"Escuela sexual" | En edición |

"Satisfacción" #30

ADVERTENCIA:
Este capítulo contiene escenas sexuales, queda bajo responsabilidad leerlo.

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Estábamos de nuevo en esta habitación donde es más obscura que las demás y la cama es amplia, podía sentir tensión, aunque ni yo lo crea, Logan me preocupa.
Tenía que hacer una aclaración de esta habitación.

—¿Este cuarto es exclusivo para el sexo? porque sé que en ese mueble hay juguetes sexuales. -Apunté al mueble más grande de la habitación.-
James: Así es, y cada vez que entremos aquí... no sales hasta que estemos satisfechos.

Sus palabras me aterraron, no me imaginó lo que pueden hacerme aquí mismo.
Retrocedí unos pasos atrás, porque estaban muy cerca de mi, y la mirada que tenían empeoraban las cosas; Carlos me tomó del brazo para jalarme hacía el, me besó. Aunque fue un beso inesperado, tuve que hacer que Carlos lo gozará para poder salir de aquí lo más pronto posible.

James me jaló del brazo hacía él (sí siguen jalándome de esa manera terminaré sin brazo), me besó, pero solo que el tomó la iniciativa y me quitaba la ropa lentamente. Me conducía hacía la cama, hasta que le cedió el lugar a Kendall, me quito lo poco que tenía, incluso mordió sus labios.
Logan se acercó a mi, pero Kendall lo aparto con un empujón.

Kendall: Tú ya estuviste con ella, ahora danos el lugar esta vez.

Logan se calló, no se me hizo justo.
James, sin pensarlo, me ordenó que me pusiera de rodillas en el centro de la habitación. Carlos, Kendall y James estaban junto conmigo, solo que estaban de pie y alrededor de mi.

Carlos: Es hora de jugar muñeca. -sonrió malvadamente.-

Sabía que significaban esas palabras, así que, mientras le quitaba la ropa a cada uno, besaba todo lo que podía, podía ver que les gustaba, pero aún falta lo peor.
Me volví a poner en el medio de los tres, el primero fue Kendall, me metí su miembro en mi boca; estaba manipulando los miembros de James y Carlos con mis manos. Era una melodía de gemidos que querían más.
conforme iba acostumbrándome, mis movimientos eran más rápidos.
No se exactamente cuanto tiempo estuve así, pero me quité cuando me puse débil.
Me acosté en la cama para reposar, pero Carlos ya había entrado en mi.
Sus movimientos eran más rápidos que ayer, incluso dolía.
Seguido de James y Kendall, sentía dolor y tanto placer.
Y por último Logan, ese fue su castigo, ser el ultimo, pero lo aprovechó para sacarme un orgasmo hasta morir.
Fue una gran noche.