Dame tu amor

Capitulo 40: El reencuentro

- Hola – respondí nerviosa.

- ¿Quién habla? – los llantos del bebe iban calmándose de a poco.

- Emm – pronuncio tratando de recordar mi nombre, el cual olvide momentáneamente por los nervios – Oriana.

- ¿Qué quieres? – contesto secamente.

- Yo leí el mensaje que dejaste en el teléfono de Francisco.

- Mira, si quieres que deje de hablarle lo hare, pero tengo que colgar estoy ocupada. – dijo interrumpiéndome.

- ¡No! – grite para que no cortara la comunicación. – solamente quiero que Francisco conozca a su hijo.

- ¿Estas bromeándome? No estoy de humor hoy - ¿Por qué es tan difícil hablar con esta chica?

- No es una broma Lola, sé que es lo correcto, pero si se lo digo a él va a salir corriendo y no es el plan.

- ¿Qué queres hacer? Llevo llamándolo y mandándole mensajes para que solamente lo conozca pero es totalmente en vano. – dijo confundida.

- Si lo ves en público no va a poder escaparse, es imposible que no se sensibilice con su hijo.

- Yo lo veo como una persona bastante fría – respondió a la idea.

Termine de explicarle por completo todo el plan que había armado detalladamente, no la escuche demasiado convencida sobre el tema, tenía miedo de que Felipe pueda llegar a hacerle algo a su hijo. Pero no lo creo capaz, además la tranquilice diciéndole que Jenny, Mariel, Julia y yo íbamos a estar teniéndola en vista para que no se le acercaran ni Felipe ni Margo.

Francisco vino más tarde preguntando por el celular pero me excuse diciéndole que tenía que mostrarles a las chicas las fotos que había tomado de Olivia con su celular.

- ¿Ustedes dicen que este vestido es adecuado? Parezco una puta en celo – dije mientras me probaba el cuarto vestido para la fiesta. Todas comenzaron a reírse y acordamos que ese vestido iría a la basura directamente, lo había comprado hace años para una fiesta, y en esos momentos me quedaba unos centímetros arriba de la rodilla, pero ahora si levantaba los brazos se veía todo mi trasero.

- Me gusta ese blanco – dijo Mariel mientras buscaba servicios de catering por internet.

- Si, me lo voy a probar – le respondí y camine hasta el probador.

Las chicas se quedaron a dormir para ayudarme a organizar todo el cumpleaños, además me sirvió de excusa para pasar más tiempo con mi ahijada Olivia.

- ¿Cuál va a ser la temática? – me dijo Julia mientras le daba pecho a Olivia, la mire por un momento confundida.

- ¿Las fiestas tienen que tener temática?

- ¡Claro que sí! – Respondió como si mi pregunta hubiera sido una completa estupidez – blanco y negro, fiesta de máscaras, disfraces, etcétera.

- Esos temas están demasiados quemados, hay que pensar en uno más original – respondió Jenny mientras pintaba las uñas de sus pies con un color pastel. - ¿Qué se te ocurre Ori?

- ¿Disco? – pregunte y todas negaron – ¿Zombis?

- ¿Zombis? – dijo entre risas Mariel.

- Si, todos se maquillan y bailan Michael Jackson, suena estúpido ahora que lo pienso – y me uní a las risas. – ¿Y una Hawaiana? Contrataríamos alguien que arme un arenero en gran parte del jardín y pondríamos barras.