Chapter Sixteen

36.9K 2.5K 44
                                    

"Chapter Sixteen: Before dinner"
"Capítulo Dieciséis: Antes de la cena"

James

Bajé de mi carro, para caminar hacía la gran casa de Caroline. Luego de a ver hecho una reservación, todo estaba listo.

Me limpié las manos en mi pantalón. No sabía por que estaba nervioso. Probablemente, Caroline tenía la razón. Sólo debimos haber follado. En fin, aquí voy.

Toca el timbre y una joven de unos 19 años, me abrió la puerta. Tenía un uniforme, así que supuse que era del personal de la casa.

- Hola - dudé en saludar - Vengó a ver a Caroline - expliqué a la mirada confundida de la chica.

- Pase, señor. Ella se encuentra en la sala, esta atendiendo a alguien ahora. Pero, no creó que le importe - Asentí. Mientras seguía a la chica.

No fue una agradable imagen la que me llevé al llegar a la sala.

Caroline

Escuché que tocaban el timbre, mientras me seguía maquillando. Verifiqué el reloj, aún faltaban veinte minutos para las nueve. Dejé que abrieran la puerta, mientras aplicaba mi labial rojo, para terminar.

- Señorita Caroline - llegó Cassandra.

- ¿Qué pasa, Cass? - pregunté sin despegar mi vista del espejo.

- Alguien la vino a ver.

- ¿No dijo quién era? - pregunté confundida.

- Nada más, dijo que era un viejo amigo - Cassandra se alzó de hombros.

- Gracias, ahora bajo - ella se retiró.

Me paré pensando quién podría ser. Además de que saldría con James, en pocos minutos. Al bajar por las escaleras fruncí mi ceño totalmente.

- ¿Qué haces aquí? - dije sin ninguna muestra de modales. Él sonrió.

- Te ves hermosa, Caroline - habló Zac, al pié de las escaleras.

- No eres bienvenido, Zac - llegué a donde el estaba - Así que te pido que te vayas, no me hagas llamar a seguridad - dije tratando de mantener la calma.

- Vamos. Tuvimos un vida juntos, no la puedes desechar así como nada - intentó tocarme, pero di un paso para atrás. A lo que él se sorprendió.

- Lo hice, no como nada. Pero si logré desecharla.

- Sólo quiero hablar, Caroline - me pidió - Por favor.

- Cinco minutos - le dije secamente - No te puedo dar nada más de tiempo.

- Esta bien, los tomó - Asentí.

- Vayamos a la sala.

Me senté y él tomó asiento a mi lado. Me puse incómoda rápidamente.

- ¿Te pongo nerviosa, Caroline? - preguntó burlón.

- Te quedan cuatro minutos - lo corté - Así que te aconsejo que te apures.

- Te has vuelto realmente dura. Aún recuerdo cuando ibas riendo por todos lados ¿Sabés cuál es tu única ventaja? - hizo una pequeña pausa - Te ves igualmente de hermosa, riendo o seria.

- ¿Lo único a lo que vienés es a decirme cumplidos?

- Bien. Directo al punto. Quiero pedirte disculpas. Yo se que fue lo más vil que alguien allá hecho - me quedé callada - Yo en realidad te amaba, Caroline. Y no se por que lo hice. Hasta el día de hoy, sigo preguntándome lo mismo.

- ¿No sabes por que lo hiciste? - inquirí más. Él negó.

- Creí, quería probar algo nuevo - él suspiró - Me había equivocado. El tiempo que estuve en California fue peor. Nada más podía pensar en ti. En serió estaba enamorado de ti, Caroline. Por dentro y por fuera. Eras una mujer fuerte e inteligente. Hermosa, amable, graciosa - él tomó mi mano - Eres perfecta - acarició con su pulgar mi palma - Cuando me besabas, cuando nos amábamos en la cama.

Zac cambió el tema drásticamente. Y fue tarde, cuando me di cuanta que había caído en su juego, él ya me estaba besando. Él me tomó de el mentón para que no me separará de él, mientras yo lo trataba de despegar de mi, empujándolo por los hombros. Me empezaba a desesperar.

- Te recomiendo que la sueltes, grandísimo hijo de puta - escuché una voz enojada. Zac se separó de mi. Y pude ver a James, un suspiró de alivio salió de mi boca. Vi como Zac sonreí.

- Él súper novio llegó justo a tiempo - se burló Zac - bueno, un poco tarde - dijo mientras se quitaba mi labial de su boca - ¿No, Caroline? - intentó tocarme nuevamente, retrocedí mientras lo veía enojada.

James estaba completamente tenso. Sus puños cerradas, y su boca dibujada en una línea.

- Estoy hablando, en serio - dijo en voz baja James - No te acerques a ella.

- ¿Sí no quiero, imbécil? - dijo Zac parándose.

- Acepta a las consecuencias - James habló. Zac rió.

- Nos vemos luego, amor - volteó a verme. Y se fue.

- ¿Estás bien? - la mirada de James cambió radicalmente al igual que su carácter. Asentí poniendo mis manos en mi cabeza - ¿Segura? - me quedé en silencio - Hablá, cariño.

- Gracias - fue lo único que dije. James asintió y me sonrió.

- Bien, vayamos a esa cena - él me tomó de la mano y me llevó hacia la salida.

Él estaba por abrir su auto pero se arrepintió. Estaba apuntó de preguntar pero él comenzó a besarme, dejando mi cuerpo entre el auto y él.

Pude sentir que estaba enojado, pero no conmigo. Su beso era furioso. Se pegó completamente a mi, mientras mordía y succionaba mis labios. Bajó hacía mi cuello y sentí como mordía un poco más fuerte, un suspiró involuntario salió de mi boca, mientras le daba un mayor acceso a mi cuello. Paró de mover su boca y se quedó justo allí, mientras ambos intentábamos regularizar nuestras respiraciones. Y cuando creí que ya se había acabado, comenzó a subir mi vestido, y acarició la cara interna de mi muslo, hasta subir a mi centro y acariciar suavemente. Gemí despacio.

- Estás mojada - susurró ronco junto a mi oído. Mordió ligeramente mi lóbulo y se separó de mí. Tomó mi mano y la llevó hasta su entre pierna. Pude sentir su erección. Soltó mi mano y él dirigió sus manos a mi cintura, yo no me atreví a quitar mi mano de él - Ya habrá tiempo para los dos - dijo junto a mis labios, y depositó un pequeño beso, para al fin abrir la puerta. Me sorprendía como podía desarmarme tan rápido.

Él subió al carro luego de mi.
De camino hasta el restaurante, intenté volver a tomar mi postura y tranquilizar mi sistema completamente. Él tampoco habló. No era un silencio incómodo el que se sentía en el aire, más bien una tensión sexual.

JEFE [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora