- Joder eres mía - exigió tomando me de la cintura, posesivamente.
- Yo no soy de nadie maldito degenerado, alejase de mi - lo empuje lejos de mi.
- oh no princesita de una forma u otra vas a ser mía - se acerco peligrosamente a mi, y sin mas se fue.
Esto fue intenso todos se me quedaron viendo como bicho raro, lo se, es extraño que un hombre que no conozco y que no mire al rostro te dijera que eres suya, pero nadie podía manejarme, ni mi propia madre lo hacia.
- Ahora que, ¿nos podemos ir? - mire mal al chico que seguía en estado de shock mirando hacia ningún punto.
- El Alpha a encontrado a nuestra luna - siguió sin moverse solo sonrío abiertamente - Lo siento Luna pero no creo que el señor Colton deje que se vaya, ahora menos que nunca - me miro y sonrío, como si fuera la octava maravilla.
- Yo no me llamo, ni parezco Luna, tal vez una banana si pero luna nunca - hable sin pensar y con un dedo en la barbilla.
oí una risa proveniente de una chica muy bonita tenia unos ojos azules, piel morena y un bonito rostro de porcelana
- Si que eres graciosa cuñada!! - río de nuevo.
- ¿Cuñada?, primero luna y luego cuñada no entiendo nada! - dije un poco confundida.
- Ey Emma, recuerda que tenemos que irnos, no venimos a ligar ni tampoco a platicar con lindas desconocidas - dijo Samuel sonriendo con egocentrismo.
La desconocida se le quedo viendo un rato hasta que ¿olfateo? un poco, se le iluminaron los ojos.
Se acerco a el de manera rápida y volvió a oler pero esta vez el cuello, sonrió y dio un beso en la mejilla.
¡Que carajo!! Acaso oler a las personas es algo normal aquí?
- Mate! - susurro.
¿Mate?, que palabra mas rara, pero creo que eso tendría un significado grande para mi vida, aparte de haber cometido el error de no oír a aquel muchacho de irnos de aquí.
(...)
- Por favor, saquenme de aquí!! - grite por milésima vez.
Agg me sentía como un pajarito encerrado en una jaula de oro.
Por mas que me quejara estaba en un cuarto demasiado hermoso.
Una cama tres veces mas grande que la mía, un baño con una tina enorme y espaciosa, el closet era lo mas grande de toda la habitación, solo se utilizaba la mitad de el con pura ropa de hombre.
Pero eso no me preocupaba, era mi olor creo que olía a tierra y mugre, no me e bañado por dos días.
¡Que no me culpen!
Estar de campamento te quitan las ganas de bañarte.
Creo que tomar un baño en esa preciosa y cómoda tina no dañaría a nadie, aparte ellos me secuestraron, tengo el derecho de bañarme.
Sin mas agarre ropa del armario de el desconocido, tome un bóxer y una camisa que me llegaba mas abajo de los muslos.
Puse música en el estéreo pequeño donde había discos de diferentes artistas hasta que encontré la mas relajada, de mi querido Ed Sheeran, eran tan hermosa su música, cantaba en bajo mientras me tallaba y sacaba toda la mugre que tenia en mi cuerpo.
Un ruido proveniente del cuarto me hizo callar, y asustarme un poco por que intentaban abrir la puerta.
Lo cual lograron haciéndome soltar un grito chillón, haciendo que el chico mas hermoso que eh visto en mi vida se tapara los oídos.
- ¡Que te pasa!, que no vez que me estoy bañando maldito pervertido! - grite enojada.
- No quieres que te acompañe - movió las cejas.
- ¡No! - volví a chillar.
Pero el no se movía para nada, como si fuera lo mas normal estar en un baño con una chica semi desnuda y asustada.
- Bueno siento interrumpir tus pensamientos pervertidos, pero podrías dejarme acabar de bañarme - lo mire mal mientras me cubría mas.
Lo bueno de todo esto es que la tina y las burbujas cubría todo mi cuerpo.
- No quiero - dijo acomodándose en el marco de la puerta viéndome.
Quien se cree este maldito hijo de fruta.
Agarre el jabón y se lo arroje.
- Tranquila ya me voy solo estaba jugando - salió riendo.
- Agg!! - refunfuñe.
Creó que será un largo día.
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Hola chicuelines, volví, espero y me hayan estado esperando, no se olviden de ir por el pan...
BayNo olviden dejar sus sexys votos.
Con amor Karen.
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Mi MATE?? Una humana!!
WerewolfNombre Emma Robinson 17 años . soñadora guerrera enojona y sobre todo terca y posesiva. - Joder eres mia - exigió tomando me de la cintura, posesivamente. - Yo no soy de nadie maldito degenerado, alejese de mi - lo empuje lejos de mi. - oh no princ...