Cap 11: Cita

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Clary

Fui abriendo lentamente mis ojos hasta que logré ver con claridad donde me encontraba. El reloj frente a mi marcaba las 10:30 de la mañana. Intenté moverme, pero estaba casi inmovilizada por el brazo de Gonzalo, quien seguía dormido. Como pude me levanté, pero fue una mala idea. Caí sentada sobre la cama por el tremendo dolor de cabeza que había dominado mi cuerpo.

-Clary ¿qué pasó? ¿Te encuentras bien?- Gonzalo despertó un poco sobresaltado.

-Sí, sólo tengo un leve dolor de cabeza, que seguramente se debe a lo de anoche- Él asiente con la cabeza, aún medio dormido. -Buen día- Dije sonriéndole.

-Buen día, linda ¿cómo dormiste?- Sonrío de igual manera dejándome colorada.

-Más que bien ¿y vos?- Pregunté dejandole un beso en su mejilla izquierda.

-A tu lado siempre voy a dormir bien- Reí. -¿Queres que prepare el desayuno?

-¿Por qué no lo preparamos juntos?- Propuse.

-Seguro, pero primero te doy una pastilla para el dolor de cabeza. Está en el baño, esperame.

-Okey.

Volvió unos minutos después, al parecer había aprovechado para lavarse los dientes, traía una tableta y sacó una pastilla.

-Ahora te traigo un vaso con agua.

-Dejá, ahora voy al baño y después bajo para tomar la pastilla.

-Okey. ¿Qué querés tomar? Así voy preparando algo-

-Quiero...panqueques con dulce de leche y chocolatada- Dije y sonreí como si fuera una pequeña niña.

Él rio levemente. -Muy bien, te espero-

Fui al baño para lavarme la cara y peinarme. Aproveché para mandarle un mensaje a mi mamá.

Yo

Ma para el mediodía estoy allá, me quedé en lo de Cande.

Mamá

Perdón hija, pero hasta la tarde con tu papá no llegamos. Estamos en el centro comprando unas cosas y capaz que comamos por acá.

Yo

Vale, entonces hasta la tarde.

Volví a leer su mensaje y rodé los ojos. Por un momento pensé que aunque le dijera la verdad sobre dónde estaba, me hubiera respondido lo mismo.

Salí del baño y bajé para la cocina, donde Gonzalo estaba tomando jugo.

-No habrá preparado el desayuno sin mí, ¿no profe?- Dije colocandome frente a él y con ambas manos en mi cintura.

-Casi llega tarde señorita Marin, que no se vuelva a repetir-

-¿O qué?- Pregunté provocándolo.

Me miró de arriba abajo con una media sonrisa y acercó sus labios a los mios.

-¿Quiere averiguarlo?-

Reí levemente y lo empujé con una mano en su pecho.

-A ver qué estás preparando...- Dije acercándome para agarrar el bowl con la mezcla.

Noté que Gonzalo estaba preparando un poco bastante.

-Gonza, ¿no será mucho? Le pusiste como cuatro huevos- Señalé las cascaras que estaban sobre la mesada.

Me Enamoré De Mi Profesor #Wattys2020 / EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora