¿Esa Soy Yo?

PARTE 2

-Una vez que nos hemos presentado todos...¡Que dé comienzo la entrevista!-Gritó entusiasmado Pat. -Lara, tú serás la primera.

Al escuchar esto, Lara dio un respingo y empezó a temblar. Sus compañeros más cercanos la apoyaron y le desearon mucha suerte.

No debí prestar atención cuando Lara se presentó, ya que no me sonaba su nombre de haberlo escuchado antes en el tiempo que llevamos aquí metidos.  Era guapa. Morena de ojos negros, mediana y muy tímida. Solo la ví a hablar con dos compañeros, Raúl y Will.

-Mientras le hacemos la entrevista a vuestra compañera, podéis levantaros y conoceros un poco, ya que formaréis equipo en el juego.-Dijo Pat.

¿Juego? Que yo recuerde no mencionaron en ningún momento algo de ningún juego.

Cuando Pat ya se hubo ido, todos los adolescentes se levantaron y comezaron a juntarse en pequeños grupos. Bueno...todos no. Los únicos que quedábamos sentados delante de la mesa éramos Sett y yo.

<<Que casualidad>>

Puse los ojos en blanco y me puse a jugar con uno de los mechones azules que había retirado a cosa hecha de mi perfecto recogido. No me percaté de que alguien se había sentado al lado mía.

-Hola.

Levanté la vista. ¡Oh dios, no puede ser, no puede ser! Abrí la boca para decir algo pero no me salieron las palabras. En fin, ni siquiera sabía qué decir.

-Lo siento. ¿Te he asustado?-Me preguntó algo desconcertado.

-N-no. No me has asustado.-Maldito tartamudeo...-Es solo que...

-¿Qué..?-Insiste él.

-Que...que estoy nerviosa por la entrevista¡Sí!¡es solo que estoy nerviosa por la entrevista!-Mentí, formulando la excusa más tonta de la historia.

Él me sonrió, posiblemente porque no se esperaba esa reacción. <<Tonta,tonta,tonta>>

En ese momento, entró Patrick para llamar al siguiente.

-¡Will!

Levanté la vista al tiempo que visualicé como Will se alejó de los suyos y empujó la puerta de cristal, escoltado por Patrick.

-¿Quién será el siguiente?¿Tú?-Me miró Sett con una sonrisa diábolica.

Intenté esbozar una sonrisita. Me costó, no soy muy amable.

-¿O tú?-Le seguí el rollo.

-¿Sabes? Me caes bien.

¿Qué?¿Le está gustando mi forma de ser? Esto marcha bien...

-Gracias.-Le respondí.

Estuvimos hablando sobre nuestros gustos,intereses,hobbies,familias y mascotas, cuando llegó mi turno.

-¡Iria!

Me levanté un poco decidida, pero dudé al ver que la mano de Sett tapaba la mía.

-Que te vaya bien, chica de las mechas azules.-Me dijo amablemente.

Le sonreí y le dí las gracias. Luego, giré sobre mis talones y me dirigí a la puerta de cristal, junto con Pat.

En el camino hacia la sala de las entrevistas, no hablamos mucho. Solo me dijo que intentara controlar mis nervios y que ignorara a las cámaras que apuntaban hacia mi cara mientras yo respondía a las preguntas que me hacían.

Cuando Pat me dejó sola en frente de la puerta de madera, me sentí insegura. También lo estuve cuando la puerta se abrió y me invitaron a entrar. Vacilé unos instantes, pero al final entré.

-Bienvenida, Iria.-Me dijo una reportera.-Siéntate en el taburete de allí.

Una vez sentada en el taburete, giraron las cámaras hacia mi rostro y comenzó la entrevista.

-Aquí estamos en directo con Iria Gómez.¿Cómo te encuentras Iria?

¿En serio? ¿Eso es una pregunta de televisión?

-Me encuentro perfectamente, gracias.-Contesté.

-¿Qué edad tienes?

-Tengo 16 años.

-¿Y que te gustaría estudiar?

-De momento, no tengo pensado en qué empleo se basaría mi vida, pero me gustaría ser arqueóloga. Me gusta mucho la historia.

-Interesante...¿Tienes hermanos?

Oh,no. Esa pregunta no.

-¿Es necesario responder a esa cuestión?

-Por supuesto. Contesta.

Mi hermano murió cuando yo tenía nueve años. No pienso contestar a esa pregunta.

-¿Podemos pasar a otra pregunta?-Insistí cada vez más cabreada.

-No. Debes contestar a esta pregunta. Venga. Contesta.

-No.-Le respondí.

-Contesta a esta pregunta o serás expulsada de la sala.

-He dicho que no quiero contestar a esa pregunta. Pase a otra.

-Contesta.-Me dijo en tono amenazador.

Ahí ya no pude más. Estallé. No debí hacerlo...

-¿Eh?¿Pero que es eso?-Exclamó uno de los cámaras.

-¡Graben, graben! ¡Emítanlo en directo!

Tarde. Las cámaras acabaron calcinadas, y por poco, los entrevistadores.

<<Mierda, mierda, mierda-Pensé.-¿Qué he hecho?>>

Salí de aquella sala lo más rápido que pude. Corrí hacia mi casa y llamé al porterillo. No había nadie. Mamá había salido. Mierda.

Palpé los bolsillos de mi chaqueta en busca del móvil, pero caí en que me lo había dejado en mi casa al contestarle a Selena. ¡Selena! Su casa no estaba lejos de aquí.

Cogí una bicicleta de préstamo y pedaleé lo más rápido que mis piernas me permitían.

Cuando estuve en frente de la casa de Selena, la llamé a gritos. Tuve suerte, Selena subió la ventana y asomó la cabeza en busca de mi voz.

-¡Iria!¿Qué haces aquí? ¿Y la entrevista?

-¡Déjame entrar! ¡Te lo contaré cuando esté a salvo!

La chica desapareció de su ventana, poco después se escucharon los ruidos de pasos que bajaban las escaleras a toda velocidad.

-¡Pasa!-Me chilló.

Entré y me paré en seco para recuperar el aliento. Ella se situó a mi lado y me lanzó una mirada asesina. Se lo temía. Me conocía mejor que nadie.

-A ver. ¿Qué ha pasado?

-Me hicieron la pregunta de que si tengo hermanos.

-Dios...¿Qué hiciste?-Su tono de voz era de preocupación.-No me digas que...

-Sí, lo hice.-Confesé agachando la cabeza.

Se llevó las manos a la cabeza.

-¿Hubo heridos?-Me preguntó.

-No, por desgracia no.-Empecé a recordar lo sucedido y me entraron ganas de estallar de nuevo, pero me contuve.

-Dios, tía...

-Lo sé, lo sé...