¿Esa Soy Yo?

PARTE 30

Sett

Me aparté de Iria rápidamente y la estrujé aún más fuerte entre mis brazos. El grito de advertencia de Selena resonó a lo largo del pasillo.

Vi como la mejor amiga de mi chica daba repetidas piruetas cuando aquella extraña sombra volvió a aparecer.
Parecía danzar alrededor de la pelirroja de tal manera que daba apariencia de estar celebrando algún baile hawaiano alrededor de una gran hoguera.
Sus movimientos eran rápidos aunque pausados,esperando captar los movimientos de su adversario.
Selena se movía a un lado y a otro,buscando bloquear alguno de sus movimientos...pero fue inútil: con un movimiento brusco,cayó de espaldas y se estrelló contra el suelo metálico.

Iria se tensó a mi lado y quiso echar a correr al lugar de la batalla,pero se lo impedí. Me gritaba furiosa que la dejara ir,pero yo seguía sin ceder. En mi presencia, no le ocurriría nada malo.

Entonces,la sombra se detuvo y le tendió una mano a la chica. Ella la agarró y se levantó.
Después, ante la mirada atónita del grupo, se fundieron en un inesperado abrazo.

No sabía que rayos pasaba allí,y quería respuestas: me acerqué un poco y afiné el oído:

-Lo...ento. No...bia...e...as...tu. ba...us...ada.-Pude escuchar.

Intentaba ordenar las palabras en mi mente, pero ninguna combinación me parecía lo suficientemente buena,y otras no tenían sentido alguno.

Gin y Ben miraban curiosos la extraña escena, y, de vez en cuando,se giraban para preguntarnos si teníamos alguna respuesta sobre aquello.

Vi como Selena y la mujer(estuve seguro de que era una mujer,pues su figura esbelta no podría decir lo contrario),charlaban y charlaban a saber sobre qué.

Iria temblaba de tal manera que parecía estar en estado de shock. Pero no me equivocaba: comenzó a correr cuando menos me lo esperaba y se tiró a los brazos de la mujer,llorando de alegría.

-¡¡¡¡¡¡¡MAMÁ!!!!!!!-Gritó.

-Oh hija...cuánto te he echado de menos.-Dijo ella.

Las dos lloraban abrazadas.
Sentí una oleada de compasión. ¡Por fin mi chica había encontrado a su madre!

Los hermanos se miraban pensativos, pero un cruce de miradas alegres me hicieron comprender que ya lo habían pillado.

Fui hacia ellas y me quedé un momento observando la conmovedora escena.
Selena tenía los ojos vidriosos y brillantes de la emoción,aunque ella no lloraba,pero parecía estar a punto de hacerlo.

-Te quiero mamá, te quiero...-Decía Iria con un hilo de voz.

-Y yo,mi vida...

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-Llegué hasta aquí por pura suerte, me encontré a Pat por el camino y tuve que enfrentarme a él, aunque aún sigue vivo. Parece ser que ha conseguido los poderes de aquella pobre gente que ahora se encuentra tendida en una tabla y con una manta por encima...nunca creí que esto fuera a llegar tan lejos,y os pido disculpas. Conseguí escaparme con mi única habilidad: la velocidad, y ahí fue cuando os encontré a vosotros;creía que eráis guardias y esperé impaciente a que alguno de vosotros se acercara para poner fin al asunto. Pero,entonces, cuando Selena se acercó, vi que su cabello y figura me resultaba demasiado familiar,así que,cuando estaba a punto de rematarla,le tendí la mano y le ayudé a levantarse.-Dijo Sara,sonriéndole a la pelirroja.-Lo que no esperaba encontrarme después es con todos vosotros, precisamente a los que andaba buscando.

-Nosotros también te buscábamos a ti.-Mencionó Ben.-Decisión de tu loca hija.

Todos reímos.

-¡Oye! ¡Que yo no estoy loca!

-Sí, sí que lo estás... -Contraataqué yo.

Me fulminó con la mirada,pero no pudo resistirse ante mi mirada seductora y acabó poniéndose extremadamente roja,lo que le provocó una risita nerviosa.

Sara observaba la escena y no pudo reprimir una carcajada.

-Vaya,vaya...mi pequeña se ha hecho mayor. ¡Con novio y todo!

Iria abrió los ojos como platos ante la reacción de su madre,posiblemente no se lo esperaba. Y,sinceramente, yo tampoco.

-¡¡¡Mamá!!!-Le gritó ella avergonzada,llevándose las manos a la cara.

Me reí de ella,podía ser tan inocente a veces...pero cuando la conocías,en el fondo era la chica más atrevida con quién podrías llegar a hablar,solo le hacía falta una pizca de confianza para poder soltarse del todo. Y yo se la daba.

Alguien me tocó el brazo y di un respingo. Me tranquilicé al ver que Sara,la madre de mi chica, se acercaba delicadamente a mi oreja,mientras me apretaba los hombros amistosamente. No sabía por qué me había alterado de tal manera,ya que en la sala solo nos encontrábamos nosotros.

O eso creíamos todos...

-Gracias por cuidar de mi hija. Te debo una.-Me susurró tan bajito que casi fue inaudible.

Me dio un último apretón de hombros y me abrazó, después se dirigió hacia el grupo y les ordenó algo.
En poco tiempo,ya estábamos todos reunidos de nuevo.

-Bien. Debemos liberar a los adolescentes prisioneros de la base. Si no actuamos rápido, Pat acabará con todos.-Anunció ella,en medio del grupo.

-¿Y cómo lo haremos?-Preguntó Ben.

Iria y Gin compartieron una fugaz mirada maliciosa.
Iria vocalizó algo que solo su amiga pudo captar,a lo que ella asintió, sonriendo satisfecha.

-Pues...la verdad es que no tenía ningún plan en mente...no sé desde dónde se puede llegar rápidamente a las salas.

Sara se paseaba de un lugar a otro,nerviosa.
Todos la seguíamos con la mirada procurando que parara,excepto Iria y Gin,que seguían mirándose, como poniéndose de acuerdo sobre lo que querían decir.
Finalmente, Iria paró a su madre sosteniéndole de las manos con ternura.

-Mamá, mamá... tranquila. No siempre se te tiene que ocurrir a ti algún plan. Yo podría tener uno...¿verdad,Gin?-Dijo ella,arqueando una ceja y entornando visiblemente los párpados.

-Así es.-Contestó la peli-verde.

Sara miró a su hija y esperó expectante a que le contara su misterioso plan.

-¿Qué clase de sitio tienes en mente que llegue a todas las salas, cariño?

Ella miró una última vez a su amiga y las dos dijeron al unísono:

-Los conductos de ventilación.