Química Perfecta {Larry Stylinson} [M-PREG]

❁Capítulo 33

Narra Harry

Me levanté con un terrible dolor de cabeza que me hacía sentir como si estuvieran metiendo agujas en ésta. Miré a mi alrededor y todo estaba tranquilo, aunque dentro de mi cabeza las cosas no lo estaban. Intenté levantarme, y me costaba, suponía que por la herida. Pero recuerdos de la noche anterior comenzaron a llegar a mi cabeza y la verdad es que no podía recordar mucho.

Lo que había en mi memoria era que habíamos pasado un gran momento todos juntos y que estábamos disfrutando perfectamente de una cena cuando Lottie y Zayn comenzaron a discutir. Por algún extraño motivo no podía recordar más después de eso.

La puerta se abrió, interrumpiendo el esfuerzo que hacía mi mente por recordar. El pequeño cuerpo de Louis entró por la puerta y me miró con una sonrisa un poco extraña. En sus ojos podía notar lo cansado que lucía y aquello me preocupaba.

—Louis —abrí mis brazos para abrazarlo y éste se me abalanzó encima.

—Harry, me has dado un gran susto —podía sentir cómo se tranquilizaban los latidos del corazón de Louis y me pareció muy lindo. Pero no entendía por qué estaba asustado.

—¿Qué ha ocurrido? —me separé y le pregunté. Éste tomó asiento en el borde de la cama y se entristeció.

—Harry, te tengo que decir la verdad —sus ojos estaban apagados y ahora yo me sentía asustado. ¿Qué podría significar esa mirada?

—¿Es algo con el bebé? —me alarmé y Louis tardó en contestar—. ¡Dime!

—Cálmate, primero que todo, amor. Es con el bebé-

—¡Qué le pasó! ¿Está bien? —mis manos cubrieron mis labios y empecé a temblar del miedo.

—Sí está bien —dijo e hizo una pausa larga—, pero tú no lo estás.

Bajé la mirada. No podía hacer nada por eso. Este bebé no tenía la culpa. Necesitaba acostumbrarme a la idea de que pronto me iba a morir y que no podría vivir para conocer los ojos de mi pequeño o pequeña. Y, por más que odiaba admitirlo, esta criatura, a pesar de que todo por lo que me ha hecho pasar, le tenía mucho cariño. Por alguna extraña razón quería sobrevivir a esto, no para seguir mi vida normal, sino para criar a mi hijo. La perspectiva que le tengo a mi vida ha cambiado durante estos 5 meses.

—No te pongas triste, amor, le encontraremos una solución a esto —Louis me sonrió y, a pesar de que amaba su sonrisa, me deprimía el hecho de que no podría ver a mi hijo sonreír nunca—. Hay algo que te tengo que decir respecto a eso.

—¿Qué? —subí la mirada y Louis fruncía los labios.

—Tenemos que regresar a Inglaterra —sus palabras me dieron un golpe, regresándome a la realidad: no me podía quedar más aquí, mucho menos Louis.

—Wow, no pensé escuchar eso tan pronto —exhalé por la boca mucho aire que tenía retenido. No podía asimilar la idea de dejar a Lottie...

—Además mañana van a cerrar todos los aeropuertos. Los tiempos no están muy buenos en nuestras tierras. Debemos regresar —Louis comentó y yo asentí—. También necesitas mejores cuidados. En mi casa tenemos todo lo necesario para evitar que te den este tipo de desmayos y mareos. Y... te faltan cuatro meses para dar a luz; tenemos que planear eso.

Eso sonaba como planear una muerte menos dolorosa para mí.

—Vale.