Química Perfecta {Larry Stylinson} [M-PREG]

❁Capítulo 37

Dedicado a: @sweetandbabycheeks y @Mari_5sos ❤️ ¡Gracias por esperar tantos meses!

No podía creerlo. Gemma estaba al frente mío. Su cabello rubio estaba más corto, su piel seguía igual de pálida y sus ojos brillaban como siempre. Ella me miraba con los ojos llenos de lágrimas y no tardé en envolver mis brazos al rededor de ella hasta derramar lágrimas en su hombro. Realmente extrañaba a mi hermana, una de las personas más importantes de mi vida. Sentía cómo nos transmitíamos amor, las lágrimas expresando cuánto nos hacía falta abrazarnos, molestarnos, hablar...

Me separé de ella y la miré con una sonrisa. Ella se veía feliz y triste, una combinación que me preocupaba bastante.

No sabía qué decirle; había huido sin despedirme y ahora que estoy aquí, no tenía palabras para explicarle todo. Todo era tan, pero tan complicado que no sabía por dónde empezar. Tenía tantas cosas que decirle, tantas disculpas que le debía...

—Ge-Gemma... Tanto tiempo sin verte yo-

—No te preocupes, hermano —ésta tomó ambas de mis manos y me sonrió—. Ya lo sé todo —bajó la mirada y me asusté.

—¿Qué? —fruncí el ceño.

—Sé por qué huiste, sé por lo que estás pasando, pero no sabía que habías regresado. Me alegra TANTO que estés bien. Tu cabello está muy largo —me miró fijamente y con tristeza.

—¿Sabes que estoy... embarazado? —tragué duro y ella asintió suavemente.

—Al principio fue difícil de creer; odié a Louis, no sabía qué pensar, pero no me tienes que dar explicaciones, Harry. Yo te apoyaré en lo que sea —Gemma puso su mano en mi hombro.

No me sentía bien. Louis no tuvo por qué haberle dicho a mi hermana sin mi autorización. Yo quería decirle a ella, pero ya era muy tarde; Louis se me adelantó.

—Tengo muchas cosas que contarte, yo... No sé por dónde empezar. Me han pasado demasiadas cosas estos últimos meses —dije mirando hacia el suelo, pero Gemma apretó mis manos, otorgándome confianza y seguridad.

—Tenemos mucho de qué hablar, Harry, pero no es el momento indicado para hacerlo. —había algo más, lo sabía. Gemma estaba inquieta, preocupada como nunca antes.

—¿Qué pasó? —no sabía qué tan mal podía ser su respuesta, pero esperaba que ella y Ed estuvieran bien.

—Es mamá. Se ha enfermado terriblemente. Tiene un cáncer que se le ha estado desarrollando muy rápido y estos días ha estado empeorando —sus ojos se llenaron de lágrimas—. Odio pensarlo, pero creo que está muriéndose, y mucho más rápido de lo normal.

Pegué a Gemma a mi pecho mientras ella lloraba. Mis ojos se cristalizaron y mi corazón se partió en dos al escuchar eso a pesar de que mi relación con mi madre estaba echa mierda, aún seguía siendo mi madre.

—Tenemos que hacer algo —le dije a mi hermana y ella se separó de mí.

—Es por eso que necesito a Louis. Sé que él es un buen médico y quizás conozca a alguno que sepa de esto. No he podido llevar a mamá al hospital porque luego de que le dijeron que tiene cáncer, no ha querido regresar más. Ella dice que se va a morir y que no hay marcha atrás —Gemma cubrió su rostro con sus manos y me dio dolor verla en ese estado.