Narcisos para Emma (Continuación de "Junto al río Támesis") [Grintson]

Los monstruos

-Rupert...

Él parpadeó y abrió los ojos.

-¿Qué ocurre?

-Rupert...-Repitió.

Él sonrió. Estaba hablando dormida otra vez. Y tenía particular interés en escucharla...

-Rupert...

-Interesante. Muy interesante.

Emma aferró con fuerza la sábana. Rupert sonrió. Ya sabía él...

-Emma.-La sacudió un poco.-Emma, despierta, cielo.

Ella apretó los ojos.

-Em... Venga, despierta.

La sacudió un poco más, pero como no despertaba, decidió seguir su juego.

Se inclinó sobre ella y le besó el cuello. Luego se apoyó en sus labios y acarició sus muslos antes de volver a su cuello.

Emma suspiró y movió su mano hacia la nuca de su esposo para que no dejara de besarla allí.

-Rupert...-Murmuró.

Él supo que estaba despierta.

-Te has tardado en despertar, ¿Sabes?-Dijo sin dejar de besarla.-Pensé que tendría que intentar de nuevo mañana.

Ella sonrió.

-No quería despertar...

-No, si eso lo sé.

Emma enrojeció.

-¿Qué...?

-Hablas dormida.

-Maldita sea.

Rupert sonrió.

-Dime algo. ¿Por qué no admites de una vez que quieres acostarte conmigo y terminamos este problema de lo que soñaste o no soñaste?-Preguntó Rupert inocentemente.

Ella negó con la cabeza.

-No voy a hacértelo tan fácil... Tendrás que ganarme.

-No será difícil. No es la primera vez.

Rupert subió hasta llegar a los labios de ella. Los miró con deseo.

-Cuando acabe con esto, desearás más que nada ser mía, Emma.

Ella sonrió.

-Veremos.

Rupert sonrió aceptando el reto antes de volver a besarla.

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-¡Papá!

-¡Voy!

Will entró al cuarto de Maisy.

-¿Qué ocurre?

-Acabo de ver algo.

Will frunció el ceño.

-¿Algo? ¿Qué? ¿Dónde?

Maisy señaló hacia un rincón de su cuarto. Will entrecerró los ojos.

-Ahí no hay nada, nena.

-Pero acabo de ver un monstruo.

Will sonrió. Se sentó en el borde de la cama. Su hijita se metió bajo las mantas hasta la nariz.

-Maisy, no tienes que asustarte, los monstruos no existen.

-Sí. Acabo de ver uno.

Will suspiró. Pero tuvo una idea brillante.