Fue un adiós, no cualquier adiós, este fue para siempre.
"Somos lo suficientemente capaces de aceptar que cometemos un error, pero a veces no somos lo suficientemente capaces de aceptar las consecuencias de este."Narras tú:
Esa mañana desperté con el ruido de una bocina sonando a lo lejos de mí. Mi cabeza apoyada en el volante, mi cuello doblado y mis piernas adoloridas. Levanté con lentitud mi cabeza y miré al espejo retrovisor interior. Mis ojos estaban hinchados como mis labios. Aun había lágrimas recorriendo mis mejillas, como si llorara hasta dormida. Mi cara estaba completamente colorada y traía mi pijama puesto. Mi cabello despeinado y mi vista centrada en la nada. Mi mente estaba en la nada, mi corazón estaba en la nada, yo me sentía como si estuviera en la nada, cayendo.
Había caído en el sueño dentro del auto, sin recordar acción alguna. Creía que no recordaba el por qué de mi llorar, pero lo sabía hasta la profundidad. Él me había engañado, él no había sido sincero, él rompió el vínculo de confianza y yo, yo había roto el que nos unía. Y eso era todo lo que en ese momento recordaba.
¿Has sentido alguna vez que una persona te sostenía y al no estar ahí, caías como una casa sin pilar?, él me sostenía, él era mi razón, pero él ya no estaba y por nada en el mundo, pediría que el volviera, porque el dolor era aún más intenso que las ganas de tenerlo conmigo en ese instante.Estaba estacionada a un costado de una calle londinense poco poblada. Con dificultad, reconocí donde estaba. A diez minutos de llegar a mi casa y casi quince minutos de llegar al departamento de él. Lamentablemente, recordaba más cosas, siendo que yo solo quería mi mente en blanco y mi sentir también. Su familia estaba en mi casa. No es que no hablaría más con ellos, pero saber que él podría llegar o que yo llegara en ese estado y no sabría cuál explicación dar, me hacia querer no llegar. Pensé en llamar a alguien, me sentía sola, completa e irremediablemente sola y sin lugar donde dormir y olvidar todo. Entonces recordé que la casa de Danielle quedaba cerca, lo aceptable para conducir, ya que mis ojos se entrecerraban por la hinchazón.
Poco me importó estar con ropa de dormir, poco me importó lucir como me sentía; terrible.
Me paré frente a la puerta, golpeé con esperanza de que alguien abriera. Y así fue.
Ella vestía ropa holgada y su cabello estaba recogido. Sonreír, incluso en el peor momento, intenté sonreír... A él le gustaba mi sonrisa.Danielle: ¡Oh dios! -Exclamó al verme- ¿Qué te sucedió?, ¿estás bien?, tus ojos están inflamados, ¿te caíste?, ¡Liam! –Llamó hacia adentro y volvió a mirarme.
Tu: Yo... -Mi voz estaba entrecortada, se negaba a salir de mis labios, pero salió- ¿Podría pasar?
Danielle: Si, claro que sí. Ven, entra. –Tomó delicadamente mi brazo y me condujo hasta el sofá, pero antes cerró la puerta tras de mí.
Liam: ¿Qué te ha sucedido? –Preguntó con un tono sorprendido y una mirada preocupada.
Tu: Yo... -No sabía que decir, como empezar.
Danielle: Esta algo perpleja. –Murmuró.
Liam: ¿Por qué estás en pijama?... ¿quieres que te llevemos a casa?
Tu: ¡No! –Exclamé.
Danielle: ¿Qué sucedió, ___?
Tu: -Lo recordé y volví a estallar en llanto- Zayn.
Liam: ¿Qué le sucedió a Zayn?, ¿Está bien?, ¿dónde está?
Danielle: Liam. –Volvió a murmurar.
Tu: No sé donde ni como estará... y no me importaría saberlo. –Mentí, con el rencor que mi corazón portaba. Noté como Liam y Dani se miraron.
Liam: Eso no suena bien, ¿discutieron? –Me preguntó casi como si fuera un padre.
Tu: -Dejé que el escalofrío recorriera en mí- ¿Pueden creer que Zayn y Kendra... se besaron? –Solté rápidamente.
Dani: Debe ser una broma... porque él...
Tu: No, no lo es. Lo oí de sus labios, de sus propios labios.
Liam: Te ves cansada, ¿quieres dormir?
Tu: Quisiera.
Dani: Ven, te llevaré a la habitación de huéspedes.Dani me condujo hasta esta. Liam cogió su celular y salió de la casa, de seguro lo llamaría, era su amigo también. Caí rendida a la cama, solo me recosté y dormí sin medida de tiempo, dormí y dormí, algo no me hacía despertar, tal vez aun en el sueño, sabía que si despertaba volvería a la pesadilla.
Desperté a las seis de la tarde. Danielle me despertó. Traía un vaso de agua y lo dejó sobre el buró. La miré, sentí esa presión que se siente al haber llorado hasta estar seca y sin vida en los ojos. Ella se sentó en la cama y miró al suelo.
Danielle: Llamó Zayn. –Su tono de voz era pasivo.
Tu: Ah... -Comenté seca.
Danielle: Dijo que su familia ya va camino a Bradford, por si quieres volver a casa.
Tu: Quisiera estar acostada todo el resto del día.
Danielle: Si gustas quedarte, puedes hacerlo. No tengo ningún problema, me agrada la compañía.
Tu: -Sonreí por sus amables palabras- Creo que necesito reflexionar, estar sola y pensar en que haré.
Danielle: No quiero que te hundas, no me gustaría verte siempre así de mal.
Tu: Todo estará bien, no hoy, tal vez mañana tampoco, pero lo estará. –Me destapé y me senté en la cama, bebiendo agua.Liam fue a dejarme a casa, ya que mis "padres" creían que no estaba en condición de conducir. Ellos eran sumamente tiernos y se querían, me recordaban tanto a nosotros... ese nosotros no existe ya. Pensar que tan solo ayer me encontraba entre sus brazos, sintiendo su amor, su dulzura.
Liam: ¿Segura que estarás bien?, en la casa de los chicos hay dos camas a tu disposición por si no quieres estar tan sola.
Tu: Estaré bien, Liam. –Forcé una sonrisa.
Liam: Bien, te dejo... -Caminó hasta la puerta, pero se detuvo y se devolvió como si se arrepintiera de algo- Hay algo que debes saber.
Tu: -Lo miré mientras ataba mi cabello- ¿Si?
Liam: Quiere hablar contigo.
Tu: Me hubiera llamado.
Liam: Más de quince veces... y esas llamadas fueron solo cuando estuve media hora con él, imagina cuantas llamadas perdidas debes tener.
Tu: Es complicado, Liam... No me siento bien. –Me sostuve en una silla intentando mantenerme con fuerzas.
Liam: Eres mi amiga y quiero lo mejor para ti, sé que escuchar lo que te debe decir te hará bien.
Tu: Escuché lo necesario. Tal vez puede estar arrepentido, tal vez fue solo un impulso como él dice, ¿y eso qué?, la besó de todas formas, sin pensar en esto.
Liam: ____, yo... -Lo observé nervioso.
Tu: Si hay algo que sepas y yo no, es el momento, luego será peor. –Dije prediciéndolo.
Liam: No quiero que lo tomes mal, ósea... estás en tu derecho, pero no qui...
Tu: Está bien. –Interrumpí con miedo.
Liam: Yo... sabía que Kendra y él... ya sabes, eso. Fui el primero en saber que ella gustaba de él, pero también sé que Zayn no sentía lo mismo por ella.
Tu: ¿Tú lo sabías? –Pregunté atónita.
Liam: -Asintió- Siento no habértelo dicho, pero...
Tu: No lo sientas, no eras el indicado para decírmelo.
Liam: -Suspiró- Volveré a casa, descansa. –Asentí con tristeza.¿Acaso cuando algo malo sucede, esto arrastra más cosas malas consigo mismo?, me siento sola, a pesar de tenerlos a ellos, me siento sola.
Me di un baño y me coloqué ropa cómoda. Minutos me tomó decirlo con seguridad, pero lo hice. Saldré adelante sin él.
Ya eran las ocho, ya oscurecía. La familia de él había dejado la casa en mejor estado que el que tenía cuando se la ofrecí, me avergoncé. Iba a revisar internet, pero si lo prendía sabía que todo tendría el nombre "Zayn" plasmado en la red social a la cual fuera que entrara. Lo mismo si encendía el celular, ¿sería que al final todo lo mío era sostenido por él?, empezando por mi estabilidad emocional.
Pero sería fuerte y dejaría de pensar en él, tenía mi casa, mis estudios y mi trabajo. Oh dios, ¿Cómo no lo había recordado?, él estará siempre cuando trabajé. No debí haber escogido trabajar cerca de él. Aunque, en ese entonces estaba tan enamorada de él, que quería estar cada milésima de segundos con él.
¿Intento engañarme a mi misma?, no lo estaba, lo estoy.
Sus ojos miel penetrando en los míos, como si ellos me contaran una historia de la cual me enamoraba cada día más.Una luz de un auto se reflejo en la ventana principal y oí el auto estacionándose afuera. No veía el color, pero algo en mí estaba brincando, mi corazón tal vez. Miré por sobre la cortina, pero no se veía. La corrí tan solo un poco y vi...
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Stole my heart | z.m.
FanfictionHay veces en la vida en las que sientes que todo te juega en contra, que pagas cada error que has hecho, que la vida nunca te volverá a sonreír, que dices "no puedo más", que nada ni nadie vale la pena. . . Pero en realidad, son solo pensamientos d...