Aristóteles y Dante descubren los secretos del universo (2da parte)

Dante.

Busqué por todo el lugar, pero no lo encontré, hasta que vi un volante arrugado en un parque, lo abrí y lo leí, se trata de una fiesta. Lo volví a leer y busqué ese lugar, no es que crea que Dante podría aparecer allí, pero hay que averiguarlo.

  —Más vale que no esté aquí.

Llegué a donde se supone está la dichosa fiesta, es una casa algo grande, entré y vi a muchos chavos, bueno, no muchos sino, algunos. La música a todo volumen, Rock, pop, etc. Y unos cuantos bailando, fumando, drogandose, parejas en sus momentos intimos, yo que sé. He oído hablar de estos lugares, pero nunca me llamó la atención.

Busqué entre la "poca" gente que hay, vi a sus amigos en un rincón de la casa, me acerqué para ver si encontraba a Dante, pero no fue así, esperé a que uno de ellos se saliera del grupo para, cuestionarlo.

No pasó como esperé, pero mejor, busqué entre las personas, quizá si te llevas con los "populares" eres conocido.

 —Oye, conoces a Dante Quintana?-Me acerqué a un tipo que fumaba mota.

  —¿Dante? No me suena.-Sacó humo de su boca.

  — Se lleva con ese grupito.-Señalé a sus "amigos.

  —No amigo, ni idea de quien sea ese Daniel, digo, ¿Dante?-Hizo una pausa.-¿No será que te refieres a Dan?

 —¿Dan? ¿Cómo es?

  —Sí, Alto, de cabello corto, de piel clara.-Lo interrumpí.

 —Sí ese.-Él señaló otro rincón de la casa.

   —Busca por allá.-Me fui.

Me extrañó que me llevara a este lado, pues sólo hay parejas, ¿Será que él está...? Espero y no.

Me puse a buscar, ¿Y qué fue lo encontré? Lo peor, lo qué yo jamás esperé ver en toda mi vida, sí, efectivamente ahí está Dante, ¿Haciendo? está... es... Ahh vamos Ari, dilo, él está, be..bes.. !BESÁNDOSE CON OTRO CHICO¡ ¿ENSERIO DANTE? ¿ENSERIO? les juro que dentro de mi corazón sentí como algo ocurrió, como si, ahg, se desequilibrara TODO.

 —Dante.-Le grité.-Te pierdes todo el día, ¿Y qué haces? esto.-Mi voz comenzó a escucharse entrecortada.

  —Ari, ¿Qué haces a...?-Lo interrumpí.

 —Buscandote, eso estaba haciendo, pero no importa.-Me fui hacía la salida y él corrió detrás de mí.

  —No es lo que crees.-Me dijo.

 —¿No? ¿Y qué era?-Si no me iba, comenzaría a llorar enfrente de él, justo ahí.-No quisiera saberlo.-Le dije.

  —Espera Ari.-Me tocó el hombro.-No te vayas, así, escuchame.

 —No Dante, yo no puedo, ya no puedo con más.-Aparté su mano de mi hombro, y me salí, él corrió hasta donde pudo, pero yo intenté que no me viera, me fui a mi camioneta, y como el "hombre" que soy, jajá si claro, no pude contener mis lágrimas, ni el dolor que sentí al ver a Dante haciendo eso, ¿Por qué? ya sabía que las cosas iban muy bien para ser verdad, todo estaba mucho mejor cuando tenía 15 años, estaba aburrido, y... ya saben, me sentía miserable. Ah, pero no, tenía que llegar ese chico, ¿Por qué acepté qué me ayudara a nadar? ¿Por qué no sólo le dije: No gracias, ya es mucho con que seamos dos perdedores en un mismo lugar? Vamos Ari, calmate, sé que me arrepentiré por esto, pero ahora, es más ese dolor que hay dentro de mí, que cualquier otra cosa.