VIDAS PASADAS© (#1)

33│ ELLA

IAN:

Me siento completo teniéndola entre mis brazos, desmayada al ver su hermoso rostro tapado de gasas, me hace recordar al maldito imbécil que la golpeo lo pagara muy caro. Lástima que ahora tenga su culo de nena en su casa. La llevo hasta mi auto, el estacionamiento es privado y nadie puede verla. Este día resulto ser más interesante de lo que pensaba. Adam le gusta mi ángel tendrá que desaparecer porque no dejare que se acerque a ella.

Así sea lo último que haga no permitiré que eso pase. Conduzco en un modo pausado. Su cuerpo estará en mi casa en especial en mi cama. La idea despierta una parte de mi cuerpo, me está volviendo malditamente loco.

La apretó con firmeza, cuando subo por las escaleras de caracol. El silencio de esta mansión es casi perturbador. Pero ella está aquí eso hace que se me revuelva el estomago.

Solamente puedo encender la lámpara del nochero de mi habitación, pero es más que suficiente para apreciarla, sus piernas largas consiguen hacerme delirar por unos segundos, mi autocontrol es difícil de mantenerlo a raya  y más cuando puedo apreciar el contorno de sus pechos.

Necesito calmarme o perderé la cabeza por esta mujer. No puedo mandar todo a la mierda por ser un animal con instintos primitivos. Me acerco lo suficiente a su rostro pongo mis labios en su frente, dejando un beso en ella. Mis dos brazos están alrededor de los suyos. Cierro mis ojos con fuerza controlándome lo más que puedo. Me separo de su rostro, apago aquella luz. Y salgo de mi habitación.

Han pasado dos horas desde que deje a April en la habitación, me encuentro en una de las recamaras del primer piso, apenas puedo cerrar los ojos con imágenes eróticas de mi ángel. Estoy jodidamente caliente.

Opto por levantarme del sillón con una dura erección, dando paso al clima frió de la noche que choca contra mi piel en la azotea.

Maldita sea. Tomo un sorbo de cerveza.

¿Qué diablos pasa contigo? ¿Qué pasa con ella?

Esto es distinto, aunque quiera negarlo con todas mis fuerzas de mujeriego, ella es distinta, lo supe después del viaje. Las chicas nunca han significado nada para mi excepto sexo, crecí de esa forma desde mi primera experiencia, desde ahí lo cambio todo para mí, Ella se llamaba Sara en ese tiempo éramos solo unos adolescentes, pero pague caro quererla. Lo pague demasiado.

Cuando las cosas terminaron de una forma poco usual, lo único que quería en aquel entonces era no volver a sentirme de aquella forma.

Flashback:

"―No puedo creer que me hallas hecho esto de esta forma. ―digo gritando a todo pulmón.

Su mirada era de cinismo y no de inocencia.

―Ian, por favor no seas dramático, era un juego entiéndelo, eres heredero de una gran fortuna, quería ser famosa a tu lado, quería tu dinero, no puedo soportar tenerte cerca ―dice con Sorna.

Hija de puta, repetía mil veces en mi mente, recordando las promesas que dijimos.

Me acerco a ella, titubea al verme desde sus ojos marrones.

―Toma tu puto dinero, y vete puta barata. ―Le digo con odio lanzando billetes al aire.

Era otoño cuando la conocí  llevaba tres años en entrenamiento de las peleas nocturnas. La segunda vez que pelee  la vi mirándome desde abajo del ring casi pierdo pero quede maravillado de ella, luego salimos, todo fue un maldito cuento de hadas hasta cuando le dije la verdad de lo que era, y desde ahí vi lo ambiciosa que era. O eso pensaba.

Era un estúpido adolescente enamorado, aun así, teníamos planes de irnos a vivir juntos así que alquile un apartamento.

Un día más de lluvia en Londres, me apresure a llegar a nuestro apartamento Sara me había dejado un mensaje que no estaba en casa era nuestro aniversario de novios, quedamos en un lugar para vernos en la noche y celebrar. Pero tuve que ir al apartamento porque necesitaba mi tarjeta de crédito.

Al tratar de empujar la puerta para abrirla. Escuche la voz de Sara y nada menos que mi padre teniendo una bonita conversación.

―Frederick, puedo jurarle que su hijo está enamorado de mí, esta noche celebraremos un aniversario.

― Ian debe de creerse que lo amas, debes controlarlo no quiero que se vaya en contra de mí. Eres buena chica ¿Por qué no me das una buena mamada?

― Lo ha hecho todo como usted ha pedido Señor, lo haré con todo mi gusto. Pero debe darme mi dinero por tener que estar con Ian.

Mi cuanto de amor se fue a la mierda. Pude controlarme para no matarlos a los dos.

― Recibirás tu pago por tener a mi hijo atrapado entre tus piernas.

― Es el mejor trabajo que he encontrado, estoy con el padre e hijo al mismo tiempo. Gano dinero por engañarlo y por hacerlo creer que existe el amor.

Pateo fuerte la puerta, la cara de drama de los dos es una pasada.

―Se les ha acabado el juego, diré solo dos cosas. Ya no serás mi padre juro que si vuelvo a verte te matare, y Sara me encargare de enviarte a un lugar maravilloso para las putas.

Pasaron más cosas pero no quiero recordar más por hoy."

Pero ahora, conozco a una hechicera de ojos verdes  tal vez lo que sentí por Sara no era amor ni se acercaba, era un adolescente inexperto que confundía las cosas.

Me gusta April Miller y nadie va a sacarla de mi mente ¿Acaso eso deseo? Todo puede acabar mal pero valdrá la pena.

DERECHOS RESERVADOS.

AL FIN LO CONFESO.