Conociendo a Vaioleth

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Ya es hora de almuerzo y como en toda empresa están las personas que salen por la comida, otras traen de sus casas, están los que les traen comida y los que simplemente compran en la "mini"- cafetería. Digo "mini" porque muchos dicen que es pequeña y en mi opinión la palabra mini no debe usarse para describir esta área, yo en lo personal usaría enorme. No entiendo porque dicen que es pequeña no es así como un bufete pero es algo. Tiene tres cafeteras de esas pequeñas, un maquina para capuchinos, maquina para hacer frappé, dos neveras, un refrigerador, dos microondas, un pequeño horno y maquinas de frituras y refrescos. Sin contar que tiene diez mesas y una pequeña sala que consiste en tres sillones y una mesa.

En palabras simples su cafetería es enorme, ah y solo pagan en las maquinas porque el café y unos bocadillos los paga el jefe, enserio en que lugar harían algo así. Yo no lo haría, si los empleados quieren, que paguen ellos, pero por algo no soy jefa. Yo solo me siento con mi capuchino en una mesa alejada de todos, no muchas personas frecuentan venir a almorzar aquí, solo dos o tres, la mayoría calienta la comida y se van. Tomo mi capuchino y empiezo a mover el azúcar, las personas se quejan de Dylan pero yo veo que el le da muchos beneficios, puso tres tipos de azúcar sólo para sus empleados, que jefe hace lo que él; la verdad que los seres humanos somos bien desagradecidos, en mi trabajo anterior había que pagar semanal diez dolares para poder usar la cafetería y tomar café sin leche, ni azúcar con un pedazo de pan pelado, daba pena. En fin mi almuerzo consiste en una taza de café y aire... Puro aire.

- ¡Hola!......te estaba buscando- dice Vaioleth sentándose frente a mi

- He me aquí- digo mirándola aún lleva puesto ese gorro loco, es algo graciosa la chica

- Ja ja ja que graciosa... ¿ese es tu almuerzo?- pregunta mirando mi café yo solo asiento- con razón estas delgada mujer si casi ni comes... te daré un poco de la mía, no suelo comerlo todo

- No....- y como siempre no me deja terminar

Vaioleth se va a las gavetas y saca dos platos y dos pares de cubiertos los deja en la mesa y va a las maquinas toma una soda y luego se sienta enfrente de mi.

Abre una bolsa que estaba a su lado y un olor espectacular me golpea, huele increíble jamas había olido algo así, su olor es una cosa de otro mundo.

- Waoo- es lo único que puedo decir

- Y eso que no lo has probado- dice Vaioleth muy contenta

- ¿Que es?- pregunto curiosa

- No lo se, mi novio trabaja en un restaurante muy reconocido aquí en la cuidad... Siempre que puede me trae comida, aunque hay días que se le hace difícil, entonces esos días me toca salir a comer por allí- me explica entregándome un plato de comida. No se que rayos es esto pero huele increíble, me muero de hambre y esto es la gloria para mi- ¿y que hay de tu vida... ¿De donde vienes? Se nota que no eres de aquí

- Bueno he estado en la cuidad que nunca duerme desde hace un año.. Trabajando- digo dándole un bocado a la carne.... Waohhh esto esta increíble ¿que sera?

- ¿Has estado en Nueva York todo este tiempo?- pregunta Vaioleth algo dudosa

-Nueva York no es la cuidad que nunca duerme- digo riéndome

- Mmmm no se si vivimos en el mismo mundo pero hasta donde sé Nueva York es la cuidad que nunca duerme...- dice Vaioleth buscando algo en su celular- mira

- Cierto es...- me siento como una idiota... Como rayos no sabia eso- da igual, he estado todo este tiempo en Chicago

- Waoo.. ¿y en que trabajabas?- sigue investigando Vaioleth... No suelo hablar de mi con muchas personas prefiero quedarme en silencio y escuchar cosas de ellos

Tu eres mi decisión (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora