Weirdos

Día 11: Kick Ass - Parte 2

«T»  

Cuando lo veo, es como si todo el mundo empezara a brillar.

Alto, delgado, musculoso, de ojos hermosamente verdes atrapados dentro de marrones anillos y una sonrisa deslumbrante capaz de matarme y traerme de vuelta en un segundo.

—Dime Douglas, ¿qué le ibas a obligar a hacer a ese pobre niño? – pregunta Jeff mientras se acerca. Está usando el uniforme con el antiguo logo de la escuela y el equipo necesario para jugar al Lacrosse. Detrás de él, se encuentra Wayne.

A medida que los dos se acercan, las chicas empiezan a gritar. La mayoría son de tercer año y supongo que verlos debe ser como un sueño hecho realidad, ya que solo pudieron escuchar historias sobre ellos. Hasta ahora.

— ¿Se puede saber quién carajos te invitó Brown? – pregunta el coach Douglas.

Estoy a punto de asumir toda responsabilidad, cuando Jeff me mira y con un rápido guiño, casi un parpadeo, me indica que no lo haga.

— ¿Acaso necesitamos invitación, Douglas? ¿No has escuchado lo increíbles que éramos Julian y yo? – presume Jeff a la vez que demuestra su habilidad con el palo (ok, eso sonó mal pero ya saben a lo que me refiero).

—Jeff, recuerda que Douglas antes era el coach del equipo de football – le hace recordar Wayne —. ¿Qué dices Douglas, por qué no les demuestras a tus alumnos lo buen coach que eres y nos dejas ayudarlos?

—Sobre mi gordo cadáver, hijos de perra – maldice el coach entre dientes. Lo suficientemente bajo como para que nadie lo escuche, excepto yo que estoy a su lado.

— ¿O acaso quieres que rompa nuestro trato? – amenaza Jeff.

Veo al coach tragar en seco antes de responder.

— ¡Como quieran! – grita amargado y toca su silbato. De inmediato todos en el equipo vienen hacia nosotros —. Escuchen niñitas, estos dos de acá van a ayudar hoy con la práctica — nos dice señalando a Wayne y Jeff.

— ¡Profesor Wayne! – grita emocionado Charlie, uno de los defensas y creo que alumno suyo —. ¡¿Volverán a jugar?!

— ¿Quién dice que lo hemos dejado? –responde Jeff por Wayne, con una sonrisa presumida pero igual de hermosa. 

Siento que mis piernas se van a derretir en cualquier momento.

— ¿Y quién eres tú? – pregunta Kyle, el portero del equipo y la persona más antipática del mundo. El peor enemigo de un gay debido a la estúpida homofobia que tiene.

—Yo, niño, soy "El Lince" – contesta el primo de Gigi.

No me lo creo.

Apenas se escucha la respuesta de Jeff, empiezan los rumores.

— ¡¿Tú eres "El Lince"?! ¿¡Tú?! — vuelve a preguntar Kyle. El tono de su voz escupe burla e incredulidad en cada sílaba.

— ¿Algún problema? – cuestiona Jeff levantando la ceja y colocando una mano en su cintura, claramente insultado.

—Jeffy – murmura Wayne.

—Shh – lo calla este.

—A decir verdad, sí tengo un problema. Mi hermano me dijo que "El lince" era alguien increíble al momento de robar la pelota y no creo que tú, con tu apariencia de niñita, fueras a dañar si quiera a una mosca.

—Según puedo ver, tu hermano fue el único que nació con neuronas – le responde Jeff sin una pizca de amabilidad.

— ¿Qué has dicho imbécil? ¡Ven acá! Te voy a romper esa carita de niña que tienes – le provoca Kyle, mirándolo altanero y lleno de odio.