CLOE POV
Era el quince de julio, exactamente. Nuestras vacaciones de verano comenzaban hoy. Hace unos días, Alex y Dylan nos develaron el destino de los pasajes que habían ganado en el concurso de canto. ¡Miami!
Casi muero del infarto. El yeso me lo quitarían antes, ya que no, y repito, no iría a Miami con muletas.
Los días habían transcurrido tranquilos. Oh, por cierto, Ethan había sido expulsado del internado la semana pasada. Alex y yo planeamos algo muy, muy, pero muy malo.
—FLASHBACK—
—No lo haré —me negué rotundamente —. Ni hablar, Alex. No está en discusión.
—Pero es un plan perfecto. Siéntete honrada de que te escogiera sobre mis otras candidatas.
Suspiré. — ¿Qué debo hacer? — ella sonrió de forma malvada. Sí, esa sonrisa que da miedo.
—Solo debes poner esto — me pasó un frasco —, en la mochila de Ethan, sin que lo descubran, yo haré el resto.
—¿Q...qué es esto? — miré extrañada el frasco.
Se encogió de hombros — Cocaína.
—¡¿Qué?! — grité y solté el frasco.
—¡Calma! — pidió —. Es la única manera de deshacernos de él. Es la venganza perfecta.
—¿De dónde sacaste eso, Alexandra Lodge?
— Tengo mis contactos, pero no te preocupes. Es solo para vengarnos de él.
—¡Eres mala! — la acusé. Y era cierto, esto era pasarse de la raya. ¡Me encantó!
Se terminó de vestir y fue a la clase de gimnasia, que ahora compartíamos todos. Mientras los chicos jugaban, yo me colé entre las mochilas y localicé rápidamente la de Ethan, la puse en el bolsillo más cercano.
Alex sonrió y sacó su celular. Ethan corrió para atenderlo, pero al abrir su mochila, el frasco cayó a los pies del entrenador.
El resto... es historia...
—FIN DEL FLASHBACK—
—¿De que te ríes? — preguntó Brenda.
Eso sí, cuando Brenda se enteró que fuimos nosotras, se enojó por aproximadamente diez o doce minutos. Que puedo decir, nos queremos demasiado. —Recuerdos...
—Creo que ya sé cuales.
Me acerqué y la abracé. Alex entró con dos maletas —¡Abrazo grupal! —gritó y se lanzó hacia nosotras.
Las tres caímos al piso, sobre las maletas de Brenda. — ¡Quítense! —rogaba Brenda, quien estaba debajo de las dos.
Alex se paró de inmediato. —¿Emocionadas? — preguntó —. En pocas horas estaremos en un avión, en dirección a Miami.
—¡Sí! —chillé.
—Nuestras muy merecidas vacaciones —susurró Alex. Y no podía estar más de acuerdo con ella.
Alex procedió a contarnos los detalles del viaje, de camino a casa de Brenda, que era la más cercana al aeropuerto.
Nos dijo que el premio incluía estadía de diez días en el mejor hotel de Miami, pero que Dylan y ella llegaron a la conclusión de que era mucho mejor quedarnos el tiempo que quisiéramos en Miami, pero en la casa de Dylan, es decir, la que su mamá compró allí.Aceptamos encantadas. También nos dijo que la casa está a menos de un kilómetro de la playa y que podíamos ir caminando.
BRENDA POV
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Te Amo, Alex (TERMINADA)
Romance"Si no te hubiera saludado, jamás hubiera tenido que despedirme. Lo siento. Te amo, Alex"