Te Amo, Alex (TERMINADA)

38. Ganar.

ALEX POV

Corrí con mis bolsas hacia mi dormitorio. Encontré a Brenda en el camino, junto a la cancha de básquet. —Bren, ¿qué haces? — bajé mis bolsas y me acerqué a ella.

—Nada, solo pienso — contestó.

—¿En?

Se encogió de hombros. — Ya sabes, la universidad. Tengo miedo de no lograr lo que quiero ser, tengo miedo de fracasar o no ser capaz de soportar los obstáculos que la carrera que elegí requieren.

—Por favor, Brenda— reí —. Sabes que podrás, todos los saben, está en ti, siempre elegiste el camino difícil, esa es una de las pocas cosas en las que nos parecemos. Sabes que si lo haces de la manera fácil, no se siente tan bien y te quedas con un sentimiento de vacío. Sabes lo que vales y lo que puedes, no te achiques cuando debes ser más grande.

—Gracias, Alex —casi lloraba.

—De nada —sonreí —, pero no llores, al contrario, sonríe. Esto apenas comienza, no lo veas como el final de algo, sino como el inicio.

—Tienes razón, al fin comenzaremos nuestras vidas — sonrió.

—Exacto.

—Por cierto, ¿dónde estabas? — cambió de tema.

—Oh, fui con Dylan a comprar mi vestido para mañana.

—Ah, el mío ya lo trajo Andrew hace unos minutos.

—Vamos a verlo. Cloe debe estar sola en el dormitorio. Los chicos están muy nerviosos, hoy es el gran día.

—Sí, estoy segura que todo saldrá perfecto, se lo merecen — decía, mientras me ayudaba con mis bolsas y caminábamos en dirección a nuestro dormitorio.

—Han entrenado tan duro, casi no he visto a Dylan — me quejé riendo.

—Ni yo a Noah. Por cierto, ¿has recibido alguna carta de aceptación?

Me encogí de hombros.— No me he fijado, seguro la mandaron a mi casa. Revisaré el domingo. ¿Por qué?

—Es que, tengo miedo de estar sola en la universidad, no quiero.

—Estaremos juntos, solo eso falta para que sea completamente feliz...bueno, eso y que los chicos ganen el partido esta noche.

—¡Eso sería grandioso! — exclamó, justo cuando llegábamos a los elevadores.

—Ya lo creo — sonreí, eso sería tan perfecto —. Debemos prepararnos, el partido comienza en media hora.

—Lo sé, estoy tan nerviosa.

—Imagínate como están los chicos.

—Espero que todo salga bien.

—Tenles confianza, has visto como entrenan y con las ganas que juegan. De todos modos, ya son campeones, han llegado tan lejos.

—Sí, pero sería mucho mejor tener el título de campeones.

Reí un poco, justo cuando llegamos frente a nuestro dormitorio. —Cloe, abre, somos nosotras — anuncié.

—Está abierto — gritó de regreso.

Bren, quien tenía menos bolsas, abrió la puerta. —Vaya, esto es increíble — sonrió Brenda —. Pensé que todo estaría destruido.

—Oye, Alex destruyó todo, pero yo lo arreglé — Cloe sonrió con suficiencia.

—Hey, necesitaba algo que ponerme — me defendí.