Capítulo 20

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Llevaba mas de diez minutos moviéndome de un lado a otro intentando conciliar el sueño pero fue inútil ya estaba despierta.

Mire alrededor, Charlie dormido a un lado de mi, lo cuál me hizo recordar lo que había pasado la noche anterior. Era raro que yo fuera la primera en levantarse él siempre me levantaba a mi.

— Despierta Char —lo moví un poco hasta quedar un poco encima del él.

— Buenos días linda —me dio un beso en la mejilla.

— ¿No crees que deberías levantarte ya?

— Bueno, digamos que alguien me dejo agotado anoche y merezco dormir un poco más.

— ¡SAL AHORA! AFUERA

El pobre se levanto de golpe asustado.

— ¿Ahora que hice? Mira que si no quieres que sea sinc...

— AFUERA

Tome mi ropa que estaba tirada en el suelo me puse lo que alcance. La sabana estaba manchada y yo estaba tan avergonzada que no quería decírselo. Rápidamente la quite y salí corriendo de ahí olvidando que Charlie estaba a fuera, corriendo al cuarto de lavado.

— ¿A dónde vas? Eleanor ¿Dije algo que no debía? — venia corriendo detrás de mi.

— Traes algo de fuera.

Y fue cuando se detuvo, o era idiota o se había olvidado que estaba desnudo.
Cuando llegue fue como si un peso menos se hubiera ido. Pero él ya me había alcanzado esta vez con una toalla atada a su cintura.

— ¿Por que quitaste las sabanas? Yo quería seguir durmiendo.

— Yo... Lo siento —ahora estaba llorando y ni siquiera yo sabia por que.

— Ya sé que pudo pasar, entiendo tranquila aún tengo mas. Se lava y queda lista eso tenia que pasar ¿Si? No pasa nada — acaricio mi mejilla con sus dedos para después secarlas, estaba roja y no solo de la vergüenza aunque ya estaba mas tranquila y luego me abrazo— Ahora vamos a ir a ducharnos porque ayer tu interrumpiste mi ducha.

Ambos reímos, después de todo el "caos" que arme nos bañamos juntos.

— No creo que sea buena idea, cariño —dije cuando Charlie me indico que me sentara sobre el en la tina.

— Yo creo que si, nunca se me había ocurrido es bueno experimentar.

— Me refiero a que me duele —por más que quisiera intentar eso que se le había ocurrido a Charlie estaba muy adolorida— ¿Quieres dejarme al punto de no poder caminar? —bromee.

— No sería tan mala idea.

— ¡Charlie!

— Me hackearon, amor.

Salimos de la ducha y fuimos a desayunar.

— Bueno me estoy quedando sin comida así que después de esto iremos a comprar algunas cosas pasaremos todo el día juntos, mañana hago las ultimas cosas pendientes que tengo aquí y después nos vamos a Atlanta.

— Char sobre eso... yo aún no le he dicho a mamá bueno ayer estaba por decirle pero hubo un problema así que tendré que hacerlo hoy y nuestro día juntos no será posible.

— Lo entiendo pero todo habrá valido la pena porque estaremos juntos toda una semana, además tengo que aprovechar todo el tiempo posible contigo va a comenzar la gira y todo eso. Te echare mucho de menos.

— Y yo a ti, pero valdrá la pena.

Fuimos al supermercado a comprar algunas cosas que hacían falta. En el transcurso al menos cinco personas lo detuvieron pero no era molesto era algo tierno ver a las chicas tan emocionadas así como yo hubiera estado en esa situación, aunque bueno a mi solo me miraban con desaprobación.

•••

— Tengo que irme nos vemos después, tengo que arreglar algunas cosas y si no lo hago no me será posible ir a Atlanta.

Después de un tiempo no tan largo de falsas despedidas nos besamos.

— Te amo.

— También te amo.

— Adiós —y finalmente entre a casa.

No había nadie como siempre, aún faltaban algunas horas para que llegara Mamá y cuando lo hiciera tendría que disculparme.

Don't Let Me GoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora