De inmediato nos separamos, era su mamá.
— Mamá... nosotros no.
— Si como sea, no estoy ciega, Charlie. Yo sé lo que vi, debí avisar que vendría... Esto de la privacidad yo voy a subir a mi habitación sigan en lo que estaban, hola Eleanor.
Mis mejillas ardían, nunca había estado tan avergonzada. Y sin previo aviso estábamos solos otra vez.
Yo estaba sentada en el sofá con la mirada en la ventana no quería verlo. Mis labios estaban calientes... Lo sentía, aún podía sentir sus labios sobre los míos.— Y bien ¿En qué estábamos? —se sentó a un lado de mi.
Descarado.
— Ya... ya es tarde tengo que volver a casa.
— Son las ocho —dijo mirando su reloj.
— Yo... yo prometí que volvería temprano.
Estaba mintiendo es solo que me había incomodado bastante.
— Voy a llevarte.
— Puedo caminar.
— ¿Estas bromeando? Vámonos.
Asentí no muy convencida, caminamos hasta la salida, una vez ahí subimos al auto y conducio hasta mi casa. No hablamos.
— Nos vemos luego... Gracias por traerme —sonreí, no dijo nada. Me baje del auto y camine hasta la puerta de mi casa, intentado abrir la puerta. Sentí su respiración detrás de mi, me voltee.
— Sucede que necesito más inspiración —intento mirarme fijamente a los ojos, pero baje la cabeza.
Reí nerviosa.
Sin previo aviso levanto mi rostro y se inclinó a mi una vez mas. Ya era suficiente por hoy, estaba temblando. Nunca nadie me había besado de la misma manera en la que lo estaba haciendo el. Su lengua pidió permiso para entrar a mi boca tampoco había hecho esto nunca solo me deje llevar y accedí.
— Buenas noches, El.
Desapareció entre la oscuridad.
Entre a casa con una sonrisa de tonta.
— Quien lo diría... —Jeremy estaba sentado en el sofá.
— Creí que tu... estabas afuera.
— ¿Ya son novios?
Me sonrojé e intente cubrir mi rostro con mis manos, pero no lo logre.
— ¿Que? Jer, creí que ya habíamos hablado de eso.
— No hace falta, vi el show que dieron afuera.
— ¿Que viste? —pregunte nerviosa.
— Todo y cuando digo todo es TODO —recalcó lo último.
— Tú tienes que dejar de hacer esto ¿Si? Debería estar prohibido espiar a tu hermana por la ventana.
— ¿Y que tal?
— Ahora no por favor yo solo.. quiero pensar las cosas ¿Si? Ha sido un día muy loco.
— ¿Entonces aun no son novios?
— ¡Llevamos 1 semana de conocernos en persona!
— Bueno si... Pero yo no beso a personas que conozco de siete días y tampoco beso a mis amigas.
— ¿Ya te olvidaste de Meredith? Con la que te besaste hace un año, era tu amiga ¿No? Ah, y no olvidemos que acostaste con la novia de tu amigo ¿Es lo mismo no?
— Me retracto.
— Eso pensé, bien voy a dormir y no me molestes te lo advierto.
Dicho esto subí a mi habitación, me acosté en mi cama y no pude evitar sonreír por lo que había sucedido. Jeremy abrió la puerta y me levante
— Mamá quiere que bajes a cenar trajo sushi.
— Comí en la casa de Charlie, no tengo hambre.
— ¿Entonces si esta grande? Ya veo por que no tienes hambre.
— Mmm —reí.
— ¿Sabes que es repugnante?
— ¿Qué?
— Vi como te metía la lengua.
— Nadie te obligo a ver.
Comenzó a reírse como retrasado y le aventé una almohada.
— ¿Ya te vas? —pregunte fingiendo estar molesta.
— Buenas noches hermanita.
Cerro la puerta y se fue.
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Don't Let Me Go
FanfictionEleanor Brenns es una universitaria de 20 años, que además es fangirl. Charlie Puth es un famoso cantante de 24 años, que ama interactuar con sus fans. Todo comienza con un mensaje ¿podrán estos dos ser lo suficientemente fuertes para superar sus...