CAPÍTULO 8-.

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Trevor todavía no ha llegado <<Se habrá entretenido>> pienso. Cierro la puerta y me quito la ropa hasta quedarme con la ropa interior. Cojo unos boxers limpios y me entro al baño.

Nada más entrar enciendo la ducha para esperar a que salga el agua caliente, no estoy realmente seguro de lo de la fiesta, aunque si lo pienso bien me agrada tener a unos amigos con los que salir de fiesta.

Me meto en la ducha y cierro la cortina, me pongo tenso al descubrir que el agua sigue saliendo fría, decido dejarla fría con el pensamiento de tardar poco. Meto los brazos y luego todo el cuerpo. Aunque esté helada me viene bien, necesito estar despierto.

Dejo que el agua fría recorra mi cuerpo, me lavo el pelo y el cuerpo y una vez terminado me seco y me pongo los boxers limpios.

Al salir del baño Trevor ya ha llegado, está tumbado en la cama hablando por teléfono.

— ... Que si, si estoy muy bien, si no te preocupes, si estamos estudiando, ¡Que si mamá! Bueno te voy a dejar que me voy a duchar, vale adiós — Cuelga rápido y deja el móvil en la mesilla de noche — Es mi madre, ya sabes haciéndome mil y una preguntas — Se ha dado cuenta que estaba mirando el móvil, este empieza a vibrar — Oye me voy a la ducha, si sigue vibrando no lo cojas, se le habrá olvidado algo a mi madre — Sentencia cerrando la puerta del baño.

— No te preocupes — Le grito para que me oiga desde el baño.

Me pongo frente al armario, no sé que ponerme, al final me decido por una camiseta negra básica, una camisa de cuadros roja remangada y abierta. Cojo unos vaqueros con algún que otro roto y me los pongo, le doy unas vueltas en los bajos de las piernas y me calzo unas lonas blancas.

Me quedo frente al espejo <<Perfecto>> me digo para mis adentros. Tengo el Pelo mojado, decido que no me lo voy a peinar, me gusta cómo se me queda el pelo mojado.

Me voy a la cama y cojo el móvil de la mesilla de noche, me tumbo y lo enciendo. Pongo la contraseña y me llama la atención una cosa, tengo dos mensajes, los abro y son de Sandy. Son unas fotos de una camiseta blanca con una chaqueta de cuero y unos vaqueros ajustados debajo de esto pone <<¿Qué te parece?>> Abro el teclado y le pongo un emoticono de aprobación. En ese momento sale Trevor del baño, está con una toalla enlazada en su cintura, coge ropa interior limpia y se vuelve a entrar.

En unos segundos sale con los calzoncillos puestos y se queda mirando su armario como yo he hecho antes.

— ¿Y yo ahora que me pongo? — Tardo un poco en adivinar que se refiere a mí, me encojo de hombros y gira la cabeza.

Saca una camiseta azul marino y una sudadera gris, unos pantalones oscuros y unas deportivas negras.
Me vibra el móvil y veo el mensaje de Sandy, me ha puesto una carita feliz y no sé por qué estoy sonriendo como un idiota.

— Oye, voy a bajar a sacar algo de la máquina dispensadora ¿Quieres algo?
— Tráeme una bolsa de patatas fritas, siempre que pagues tú — Está de espaldas y no puedo verle la cara así que no me lo tomo como una broma.

— Como quieras — Digo y me bajo a toda prisa.

La máquina dispensadora se encuentra a la entrada, quiero recordar que tenían patatas. Tropiezo con una escalera y pierdo el equilibrio pero no me caigo, doy unos pasos y me estabilizo. Sigo bajando hasta llegar a la planta baja, no hay nadie, solo hay unos chicos que bajaban delante de mí y salen por la puerta. Me quedo mirándolos hasta que se los traga la oscuridad.

No sé si los profesores sabrán de la realización de esta fiesta, supongo que sí pero igualmente no creo que se den ni cuenta. No veo a ningún profesor por aquí, será que no les interesa mucho nuestras vidas, es normal, a nosotros tampoco nos interesan las suyas.

Lo Invisible LI#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora