Extra #2

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4 años después

-Demian- grito para que pueda oírme. Cinco minutos y nada, este hombre. Veo mi reloj de mano para cerciorarme que vamos re-tarde JODER- DEMIAN- mi grito se hace más fuerte. Al instante un Demian agitado aparece por la puerta.

-¿Que pasa mi reina?- viene hacia mi y me examina de pies a cabeza haciendome reír.

-Deja, deja- quito sus manos aún riendo- ¿Viste la hora? Si no nos vamos ya, no podré visitar a mis padres.

-Pensé que te había pasado algo- se sienta en la cama- yo estoy listo, Maya está listisima y Abby bueno pues tiene una problema de "niñas" y no quiere que le ayude- dice resoplando- y Emma y Evan ellos están jugando en la cuna y ya están listos bebé, no debes preocuparte- me atrae hacia él, pues si tuve gemelos una hermosa parejita, Emma y Evan. Evan es mayor por cuatro minutos, pero Demian y yo decidimos que no diremos nada así no habrá pleitos- te estamos esperando a ti- me sienta en sus piernas y me besa delicadamente mi hombro.

-Hora de irnos- dice una pequeña vocesita chillona- ¡Mamá!- volteo a verla y sonrío de manera inmediata, beso a Demian en los labios-Iiuuuuu- Demian comienza a reírse y se acerca a Maya y la alza dándole vueltas por el aire mientras mi pequeña ríe. No puedo creer que ya mi pequeña tenga sus seis añitos. Han pasado muchos años y en cada etapa la he grabado para mostrasela a su padre. Oliver sigue en prisión, y espero siga ahí por mucho tiempo más, suena egoísta pero, tiempo después de el incidente logramos darnos cuenta quien fue el asesino de mi padre, nada más y nada menos que Oliver.

-¿Irás a ver que tiene Abby?- pregunta sacándome de mis pensamientos, asiento y me acerco a ellos dejo un beso en la nariz de Maya y un beso en el cachete de mi esposo.

Toco la puerta de la habitación de Abby y espero a que me de permiso para entrar.

-¡No quiero verte papá!-grita la vocecita desde el otro lado de la puerta.

-Ya, no soy papá- me pego a la puerta-¿Me dejas pasar?-no escucho nada, al instante se ve el pequeño cuerpecito de mi pequeña niña- Hola-susurro y me agacho.

-Hola mami- dice con voz tímida.

-¿Que tiene mi pequeña Mulán?- sonrío y tomó mi mano y me llevó hasta la cama, luego se sentó junto a mí con la cabeza gacha.

-Es un niño- me rio e inmediatamente sube su mirada y me fulmina dejo de reír rápidamente, a pesar de tener solo cinco años tiene un carácter de los mil demonios.

-¿Que pasa con ese niño misterioso?.

-Dice que soy fea- vuelve a bajar su mirada- le dijo a todas las niñas que yo tenía piojos y que si eran mis amigas no iban a ser bonitas- tomo su mentón con mis manos y observo muy detenidamente cada facción de su carita, piel blanca como la nieve, nariz recta y respingona y unos bellos y hermosos ojos grandes y verdes como los de su padre, no paso por alto la pequeña lágrima que recorre su mejilla colorada. Paso mis dedos delicadamente por su mejilla limpiando todo rastro de tristeza.

-Eres hermosa- me mira por un segundo pero su mirada se aparta inmediatamente.

-Lo dices porque eres mi madre- susurras- y las madres siempre ven hermosos a sus hijos- se encoge de hombros y yo la atraigo y la subo a mus piernas.

-Eres hermosa y no lo digo porque sea tu madre- quito el cabello rebelde que cae por su rostro, es lo único que sacó a su madre su cabello castaño- eres hermosa porque eres especial, ese niño no sabrá ver la belleza que encierras en ese corazón tuyo, sin quitar ese bello rostro que tienes- tomo su cara en mis manos y hago que me mire directamente a los ojos- Nunca permitas que alguien te diga lo que eres, y si esas niñas no quieren ser tus amigas pues muy su problema, ellas son las que pierden-beso su nariz y mi pequeña ríe.

Sobreviviendo A La Oscuridad #GoldAwardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora