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El lunes por la mañana ya tenemos todo preparado para cuando Nancy llega a su trabajo. Alec y yo la seguimos desde allí en la distancia, mientras que Keenan nos espera en la casa que va a enseñar. Él es el experto en reconocimiento del terreno y estará buscando posibles vías de escape que Rampsey pueda usar si se decide a aparecer e intentar algo. Necesitamos controlarlas todas porque somos solamente tres. 

Aunque no nos vendría mal la ayuda, por el momento no quiero avisar a nadie más. Cuantos más lo sepan, más riesgo habrá de que Gordon se entere de lo que planeamos. Y eso es algo que no debe suceder. Por desgracia, ya se huele algo, así que debemos andar con pies de plomo en torno a él. Por suerte, Alec y Keenan opinan igual que yo en eso y nos evitamos discusiones.

-Dentro de la casa está todo despejado - nos dice Keenan por teléfono en cuanto lo llamamos para avisarlo de que nos acercamos a la zona - Ya estoy fuera. Nos vemos en el edificio blanco de enfrente. Tiene una buena perspectiva.

En cuanto Nancy se encuentra en la puerta de la casa con el cliente y vemos que es seguro, nos reunimos con Keenan. La única condición que ella nos puso para que la acompañásemos fue que aquel hombre no se enterase de nuestra presencia. La elegía a ella como agente siempre para sus compras precisamente por su discreción y no quería que creyese que estaba intentando aprovecharse de él de ninguna de las maneras. De todas formas, tampoco habría forma de explicarle nuestra presencia sin contarle lo que le había ocurrido a Kelly. Y no era algo de su incumbencia. O sin mentirle, algo a lo que Nancy no está dispuesta. Y por ese motivo, ninguno debe entrar en la casa a no ser que sea totalmente necesario.

-¿Estás seguro de que no había nadie? - le pregunto a Keenan un tanto ansioso. No quiero que se repita lo de la consulta de Cameron.

-La revisé dos veces - asiente, conocedor de la historia - Tres en los lugares en que yo me escondería si quisiese pasar desapercibido. Está totalmente limpia.

-Bien - asiento - Ahora toca esperar.

-Será divertido - susurro Alec mirándome. Esperar nunca fue mi fuerte y él lo sabe.

-Esta vez no podré adelantarme - le sonrío.

-Me extrañaría que no lo hicieses igualmente.

-Ya me conoces - me encojo de hombros - No puedo estar quieto demasiado tiempo.

-Pues muy tranquilo te he visto yo estos últimos días - sé que siente curiosidad sobre lo que he estado haciendo, pero no me animo a decirle nada porque cuando descubra lo de Cameron se volverá insoportable. Ya ni digamos Kath. A ella le tengo más miedo todavía.

-Habrá estado ocupado con la morena esa - dice Keenan, sin saber que acaba de meter la pata hasta el fondo. A buena hora le hablé de ella.

-¿Qué morena? - pregunta Alec interesado.

-Una a la que está ayudando también - antes de que pueda callarlo habla de nuevo.

-Descríbemela.

-¡Eh, chicos, es Rampsey! - exclamo y ambos se ponen alerta - Vaya, falsa alarma.