CAPITULO 6

12.3K 473 6
                                    

Sam.

Han pasado dos semanas desde que conocí a Alonso, Fátima prácticamente se volvió mi mejor amiga; he tenido algunos problemas con la tal Isabella, al parecer esta loquita por Alonso. Entre al edificio y vi a Alonso platicando con Jos. Ya me había dicho que eran amigos de hace tiempo.

-Hola-dije sonriendo-.

-Hola nena-dijo Alonso haciéndome sonrojar-.

-Wow, lindo collar-dijo Jos tomando el dije-.

-Gracias... él también tiene uno pero con mi nombre.

-¿Eso porque?

-Es un símbolo de amistad-lo tome entre mis dedos-, en tan poco tiempo me ha demostrado ser un gran amigo.

-Mm... Oigan-dijo Alonso-, ¿Les molestaría si los dejo solos un momento? ¿No? Okey, los veo en clases.

Se alejo rápidamente de nosotros y dio vuelta al final del pasillo.

-¿Qué le pasa?-dije extrañada-.

-N-nada, seguramente tiene una "cita" con Kendra, si sabes de qué hablo.

-Ah, ya entiendo.

-Oye... creo que no hemos tenido tiempo de conocernos.

-Eso creo-dije sonriendo-.

-¿Te gustaría salir conmigo?

-¿Salir? ¿Cómo...?

-En una cita-dijo con timidez-.

-Emm... y-yo-sonreí apenada-... está bien.

-¿En serio?

-Sí, ¿Cuándo?

-Saliendo, vemos una película y así.

-Okey, te veo a la salida.

Empecé a caminar hacia atrás y luego me retire casi corriendo hacia mi casillero. Llegue y me escude con la puerta de este.

-Bien ¿Qué te traes?

Di un pequeño salto, era Fátima quien estaba frente a mí con una sonrisa y con los brazos cruzados. Al lado de ella estaba Aranza. Sabía que hablaban de Jos, Fátima últimamente se porta como una segunda mamá en la escuela, y para eso ya tengo suficiente con mi alocada madre.

-¿Qué me traigo de qué?

-Te vimos hablando con Jos, ¿Saldrás con él?

-Probablemente-dije metiendo mi mochila al casillero-. ¿Por?

-No, por nada... amm... Aranza se preguntaba si no podría ser una cita doble.

-¿Qué?

-Fátima...

-Sí, tú con Jos y ella con Alonso.

-¿Quieres que te arregle una cita con Alonso?

-Eh... si no es mucho pedir-dijo haciendo carita de perrito hambriento-.

-Claro que no, yo le digo a Alonso ¿Vale?

-¡Sí!

-Y ¿Dónde está, he?

-Por ahí... ya sabes.

-Fue por su mañanero.

Reí y nos retiramos al salón. No me gustaba mucho admitir que Alonso se metía con la directora pero Fátima no dejaba de decirlo cada vez que nota que él no está cerca de mí. La ultima vez dijo, "si no está contigo esta fajándose a la maestra, pero si tú estuvieras dispuesta a lo mismo que ella apuesto a que la dejaría". Llegue a la conclusión de que 1) Fátima a fuerza quiere unirme con Alonso o 2) ella nota algo que yo ignoro por completo.

***

Alonso.

-Hola preciosa.

-Hola, Alonso.

-¿Está Kendra?

-Sabes que ella siempre está.

-Perfecto, pasare a verla-me acerque y bese la comisura de sus labios y proseguí a pasar a la oficina de Kendra-. Hola, Kendra-cerré con seguro-.

-¿Qué quieres?

-Vaya, parece que alguien está molesta-me acerque y bese su mejilla-.

-¿Cómo quieres que no lo esté? Si desde hace semanas no te paras ni aquí ni en mi casa.

-Oye, tranquila, no es razón para que te molestes-la abrace por la espalda y bese su cuello-, sabes que aunque me enoje contigo siempre estaré para ti, y solo para ti-subí mis manos hasta la altura de sus pechos y baje nuevamente-... soy tuyo-le dije al oído-.

-se giro hacia mí-. No sé cómo le haces para hacer que olvide un simple disgusto.

-Tengo mis tácticas, hermosa.

-Escucha Alonso, no me tienes muy contenta, no me gusta para nada como te portas con esa niña.

-Sam y yo solo somos amigos.

-Ay aja, ¿Quieres que te lo crea? Es obvio que entre ustedes hay algo más que solo amistad.

-Mira Kendra, en primer lugar, lo que hay entre tú y yo no es nada formal, yo puedo salir con quien me plazca.

-Ya lo veremos, Alonso.

-Tengo clase.

Le guiñe un ojo y salí de ahí. Al salir escuche como maldecía lanzando cosas. Reí en mis adentros y camine hacia mi clase de psicología. El profe no me dejo entrar así que decidí retirarme a ver el entrenamiento de las porristas. Hacía mucho que no pisaba el campo de futbol.

Llegue y me senté en las gradas. Visualice a una chica, una chica que desde que estaba en el equipo me di cuenta de que estaba loca por mí. Aranza. Sonreí al verla dirigir los pasos del equipo de porristas.

-Hola Alonso.

Escuche una voz chillona a mí lado, mire hacia su dirección y me tope con la mirada lujuriosa de Isabella.

-Hola Isa.

-Que milagro verte por acá de nuevo-tomo mi mano-.

-Sí, bueno-quite mi mano-, el profe de psicología no me dejo entrar y no tenía nada mejor que hacer-fingí una sonrisa-.

-Te puedo entretener, si quieres.

-Ya tengo entretenimiento-hice una seña hacia el campo-, pero gracias.

-Oh, vamos Alonso, dame bola, hazme caso.

-¿Qué?

-Entiende que me muero por ti-se acerco tomándome por las mejillas-. Haría lo que fuera por tenerte una noche-rozo sus labios con los míos-.

Sonreí ante lo rogona que se había escuchado. Mire hacia el campo y note que las miradas de todas las porristas estaban sobre nosotros. Pase mi mano por la pierna de Isabella y luego atrape sus labios en un beso desesperado. Subí mi mano hacia su entrepierna, conocía perfectamente a Isabella, podía ser una ofrecida pero cuando veía que iba en serio le asustaba.

-Espera-alejo mi mano-...

-¿Qué pasa?

-No, nada, es que-se alejo de mí lo cual me hizo reír-...

-Te veo luego.

Me levante y camine fuera del campo. Mire por encima de mi hombro y me di cuenta de la mirada triste de Aranza. La tengo.

¿AMIGOS?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora