Maze Runner
Desperté rodeada de gente, bueno, mejor dicho, debajo de todas esas personas. No me acobarde, ni me puse loca preguntando quien era o donde estaba, aunque moría de ganas.
Un hombre de piel oscura me tendía la mano, por lo que la tomé y el me ayudo a subir.
-Soy Alby- dijo el con una sonrisa, yo se la devolví -Que raro, la mayor parte de los que aparecen comienzan a preguntar quienes somos, o donde estamos, inclusive quienes son ellos- dijo riendo levemente, lo imité y me encogí de hombros.
-Creo que hay que mantener la calma ante todo, siempre hay que avanzar paso por paso- hablé por fin y sentí que yo era así, calmada, siempre y cuando no me provocaran.
-Eres la primera que recuerda algo de su vida pasada- dijo Alby mientras comenzabamos a caminar, como si hubiera leído mi mente -No te sientas mal si no recuerdas cosas como tu nombre, nadie lo recuerda ni bien llega- explicó y de alguna manera me sentí mas aliviada, por más que no estuviera como loca el miedo ocupaba algo de mi.
-Me gusta el nombre Leyla- dije sonriente, por lo que el me sonrió de igual manera.
-Entonces te llamaremos Leyla hasta que recuerdes tu verdadero nombre- dijo mientras llegabamos a una especie de cabaña.
-Mira, todos en el claro tienen un trabajo- empezó a explicar mientras un chico de cabello claro y otro de cejas muy finas y raras entraban al lugar.
-Y tenemos reglas- dijo el de cejas... peculiares -Y más te vale seguirlas novata- dijo con una sonrisa burlona.
-Si una de esas implica llevarme bien contigo, prefiero saltearmelas- dije con una sonrisa irónica y volví a mirar a Alby para que me explicara los trabajos.
-¿Recuerdas algo que te guste?- dijo el de cabello claro, aproximandose a nosotros -Por cierto, soy Newt- saludó extendiendo su mano para que lo saludara, y así lo hice.
-Leyla- dije y el me miró extrañado -No recuerdo mi nombre, pero me gusta Leyla- dije encogiendome de hombros, provocando que el riera -Volviendo a que me gusta, no lo se. A lo mejor cuando recuerde mi nombre me acuerdo de algo que me guste- dije y ellos asintieron con la cabeza.
-¿Que se supone que es esto?- le pregunté a Newt, que había estado todo el día acompañandome.
-El y otra persona se meten dentro del círculo, quien saca del círculo al otro primero gana- explicó y yo fruncí el ceño, el de cejas raras simpre sacaba a todos del círculo. Un espíritu competitivo nació en mi, por lo que al ver que nadie quería meterse a pelear con el cejas-finas me acerqué a la forma geométrica.
-Yo juego- dije entrando el círculo, todos se miraron entre ellos confundidos.
-No voy a jugar contigo, eres una mujer- dijo y todos los de atras rieron a carcajadas.
-Busca argumentos más validos, sin cejas, es obvio que tienes miedo a que te gane- dije burlona, provocando que todas las personas que se encontraban fuera del círculo emitieran un largo "oh".
-Bien, jugaremos. El primero que...
-Ya se jugar idiota, si no no me hubiera metido- me hice un moño desordenado en el pelo y me puse en posición de ataque. El se acercó corriendo y me quizo empujar para sacarme, como si fuera lo más fácil del mundo, por lo que me corrí a un costado cuando estaba a punto de tocarme, provocando que casi cayera fuera del área.
El me miró furioso y yo le sonreí inocentemente, quizo saltar sobre mi y yo me agache y lo tomé de los tobillos, tirandolo al piso. Una vez que estaba de espaldas en el piso, adolorido por la caída, lo pateé hasta sacarlo del círculo, recibiendo aplausos de todos, inclusive de Newt.
-No se valió, la cosa es pelear, no correrse- dijo el quejandose por el dolor de espalda.
-Veras, perdedor, cuando me corrí no caíste del circulo. Cuando te saqué, fue cuando te tiré al piso, y si eso no valiera, hubieras perdido todas las partidas anteriores- me defendí -Así que, cejitas, acepta tu derrota. Oh, y a manos de una mujer- dije y salí del círculo, para ir con Newt y chocar los cinco.
-Quiero la revancha- gritó el, aún en el piso. Me acerqué y entré al círculo esperandolo.
-Vamos, levantate, no vas a encontrar tu dignidad en el suelo, la pisé antes de salir- dije provocando que todos rieran
Esta vez, cuando el entró al círculo, no me corrí o lo tiré al suelo, me preparé para propinarle una buena golpiza. El me quizo pegar en la cabeza, pero me agache esquivandolo. Cuando me levanté, le pequé un puñetazo en el estomago, dejandolo sin aire y desconcertado, para luego pegarle otro en la mejilla izquierda, y pegarle una patada en el gemelo derecho, haciendolo caer. Estiré la mano para indicarle que se levantara, haciendole saber de que le seguiría pegando para sacarlo de manera justa, pero el me interrumpió.
-Dejalo, prefiero arrastrarme hasta fuera del círculo- dijo, yo estalle en carcajadas. El aprovechó que yo me distraje y se paró, estiró los brazos empujandome para que cayera al piso, con el golpe tuve como si fuera un recuerdo de mi corriendo en un maraton, ganando y todos gritando mi nombre.
Layla.
Era Layla, no Leyla.
-Layla- dije inconcientemente.
-¿Te llamas Layla?- preguntó el burlón, yo asentí con la cabeza -Te pega, es un nombre de PERDEDORA- cuando remarcó esas ultimas palabras, me hizo volver a la realidad. Estiré las piernas, saltando de una manera extraña para poder pararme, sin utilizar los brazos. El abrió los ojos como platos, y aproveche la situación para empujarlo al piso, tal como lo había hecho el anteriormente. El sin cejas se paró con un gran esfuerzo, esperé a que se acercara para tomarlo por el cuello de su remera y elevarlo en el aire unos centímetros, lo suficiente como para que el y el resto abrieran los ojos sorprendidos. Le sonreí de manera burlona y lo tiré fuera del círculo, ganandome los aplausos de todos los que estaban allí, incluidos los de un chino que me miraba orgulloso, vaya uno a saber porque.
Salí nuevamente del círculo para volver a acercarme a Newt, con el que volvímos a chocar los cinco.
-Recordaste tu nombre- me dijo con una sonrisa, a lo que yo volví al recuerdo y le sonreí de igual manera.
-Y tambien que me gusta hacer- dije y el me miró expectante -Correr.
