Los chicos no me habían dejado de preguntar durante todo el camino sobre el caso.
- ¿Quién te ha llamado?
- ¿De qué se trata?
- ¿Cuántas víctimas hay?
- ¿Hay presencia demoniaca?
- ¿Algún fenómeno extraño?
Tuve que chillarles más de una vez que no lo sabía, que una amiga me había pedido ayuda porque pensaba que se trataba de un caso para nosotros. No tenía ninguna otra información.
Cuando al fin llegamos a la comisaría respiré aliviada. Por fin me dejarían en paz al poder preguntar a otra. Sentí pena por ella.
- Buenos días. Buscaba a la agente...
- ¡Lexi!
Apareció gritando desde un largo pasillo, con los brazos abiertos y una gran sonrisa dibujada en la cara. Cuando llegó a mi altura me estrechó como a un osito de peluche.
- Pensé que tardaríais más. ¿Qué tal?
- Genial, pero prefiero poder seguir respirando – dije riéndome mientras notaba como aflojaba el abrazo.
- Lo siento. Ya me ocupo yo Albert. Gracias – dijo al chico que estaba en la recepción. Esté asintió.
Nos separamos un poco, aunque todavía en el vestíbulo de la comisaria.
- Estos son Sam y Dean – dije señalando a cada uno. – Esta es Clary.
- Un placer chicos. Lexi me ha hablado muchísimo de vosotros. Ya tenía ganas de poneros cara a ambos.
Sam extendió la mano y Clary se la estrechó, sin embargo Dean se quedó mirándola de arriba abajo. Sabía perfectamente lo que le estaba pasando por la cabeza a mi primo. Pero no quise quitarle la ilusión, además, tenía ganas de saber cómo los acontecimientos tenían lugar y la cara que se le pondría al final. Lo reconozco, a veces me gustaba verle sufrir, un poquito.
- Acompañarme, será mejor que vayamos a otro lugar más privado para hablar de esto.
Fuimos a una cafetería cercana y nos sentamos en un reservado. Ventajas de ser agente de policía.
- Esto es lo que sabemos hasta ahora. El domingo la familia Stuart denunció la desaparición de su hijo pequeño Robert de siete años. Habían ido de picnic toda la familia, los niños estaban jugando al escondite, y Robert no apareció. El martes Robert apareció en la entrada de su casa, andando en línea recta, adelante y atrás, una y otra vez. – me dio la impresión de que Dean iba a hacer algún comentario, pero Clary no le dejó ni intentarlo – Puede que esto suene muy normal, pero aquí llega lo extraño. El niño parecía que no atendía a nadie. Cuando sus padres se acercaron, él ni les miró, no levantó la cabeza del suelo. Y cuando su madre le estrechó entre sus brazos comenzó a chillar y patalear como un loco. Fue ahí cuando levantó la cabeza y lo vimos. Sus ojos eran negros. Completamente.
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Una chica Sobrenatural (#wattys2017) [EDITANDO]
Fiksi PenggemarLexi siempre pensó que su padre la había abandonado, pero un día descubre la verdad y su mundo cambia. Tendrá que elegir entre vivir en ese nuevo mundo lleno de misterios y peligros u olvidarlo y seguir con su vida normal. Una novela basada en la se...