DAÑARTE |C.D|™

2

Fue mucho tiempo el cual camine hasta llegar a su casa, el camino hasta aquí fue muy largo, estaba prácticamente rendida ya no podía estar más tiempo parada aquí afuera.

— ¡!James¡! — grite otra vez su nombre lo más fuerte que pude.

Pero el no respondía, no llevaba ni la cuenta de cuánto tiempo llevaba ahí afuera tocando la puerta sin obtener ninguna respuesta, era realmente frustrante.

Los pies me dolían a horrores, tenía la suerte de que su casa quedase a las afueras de la ciudad, si ese no hubiese sido el caso ni en sueños hubiera llegado caminado hasta aquí, pero en si, si era una distancia  considerable.

Se me hacía extraño el hecho de que no abriese, solo rogaba internamente por qué no le hubiese sucedido algo malo o que el hubiese salido, me urgía hablar con alguien.

— Jane ¿Qu-ee haces a-aquí?— la puerta se entreabrio, dejándome algo sorprendida por sus palabras ya que yo siempre venia a verlo y nunca había recibido aquella frase  suya hacia mi.

Levante la mira de una vez por todas y no pude evitar soltar un leve grito al verle la cara, el tenía muchos moretones y heridas, claramente tenia el aspecto de haber sido golpeado hasta más no poder.

—¿Que te pasó?— pregunte asustada, tratando de acariciar una de sus mejillas.

— No es nada. — respondió seco, apartando mi mano de su rostro al instante, ¿que le sucedía?.

Me extrañó mucho su actitud, ¿De cuando aquí el se había vuelto así conmigo? no recuerdo haberle hecho nada para que actuase de esa manera.

—¿Puedes dejarme entrar?—pregunte con precaución.

— Está bien — susurró no muy convencido.

Y ya habían transcurrido más de diez minutos, solo diez jodidos minutos en aquella sala y no obtenía ninguna respuesta por su parte, lo sabia por qué James no había dejado de mirar aquel gran reloj que había en su sala. Se me hacia a que el no estaba muy cómodo con mi presencia o tal vez era el simple hecho de que parecía que el quisiese que yo me fuese.

Lo más antes posible.

No veía ninguna razón aparente ante su comportamiento conmigo, tampoco veía la razón por la cual el no quería apoyarme ¿Tan difícil se le hacía el ayudarme a rescatar a mi hermana?.

Sé que sonaba tonto de mi parte, pero no tenía opción estaba casi segura de que Scott mentía, el no sería tan estupido como para darme tremenda cantidad de dinero y dejarme ir así no más, el tenía que estar planeando algo y estaba completamente segura de que no era nada bueno.

Me alejé de mis pensamientos y le preste atención a James, pero el seguía ido, lo único que se limitaba a hacer era mirar aquel reloj y no responder nada.

¿A que le temía tanto?

— No... yo enserio lo lamento, tengo a la gente de Scott hasta el cuello. Si descubren que te estoy ayudando será mi fin, yo no voy a arriesgarme ... siempre eh puesto las manos al fuego por ti y todas las veces e salido perjudicado, esta vez no será así — respondió tras haberlo pensado muy bien.

No podía creer lo que estaba oyendo, lo que había dicho me había herido en lo más profundo ¿Como siquiera se atrevía a decirme semejante desfachatez?.