Capítulo 55: "¡Los voy a matar!"

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Me había quedado profundamente dormida y nadie me despertó hasta que al día siguiente un despertador programado para sonar a las 9:00 a.m. interrumpió mi dormir. La tarde del día anterior había sido una tarde intensa, de confrontación y reflexión.

Quité las sábanas que cubrían mi cuerpo y me senté en mi cama, buscando despavilarme. Me levanté y preparé ropa limpia para luego darme una ducha.

Cuando ya estuve aseada y cambiada, bajé a desayunar, pero para mi sorpresa, ni mi mamá ni mi hermana estaban en la cocina ni en la sala. En la heladera encontré una nota que decía:

"Caro: espero que no hayas tirado el despetador que te dejamos preparado por la ventana. Fuimos con tu hermana a hacer las últimas compras para Navidad. Acordate que mañana es noche buena y no tenemos ni para brindar a las 00:00.

No se a que hora volvemos..

Mamá"

- Me hubieran avisado ayer e invitaba a mis amigos para hacer una fiesta.. - solté sarcástica, pero, obviamente, nadie escuchó lo que dije. En ese instante, se me "prendió la lamparita".

Saqué mi celular del bolsillo, y, mientras hacía mi desayuno, les escribí a los chicos para que vengan a mi casa a pasar el rato. "NADA DE ALCOHOL" aclaré ante todo.

Café y tostadas con dulce de leche fue mi primer comida del día, pero justo antes de terminar la última tostada, alguien tocó la puerta. Instantáneamente me manché la boca y cara con dulce de leche, para hacer reir a cual sea mi amigo que estaba tocando. Corrí a abrir la puerta y ahí estaba Martín. Como era de esperar, a él le dio un ataque de risa y yo reí también.

- Pasá que yo me voy a lavar la cara - le dije justo antes de correr al baño a limpiar el dulce.

- No seas mala onda, que estás divina así - respondió mi amigo justo después de cerrar la puerta de entrada por mi y seguirme.

- Ja, ja, ja - le hice burla mientras me secaba la cara con la toalla del baño.

- Ni un abrazo te di - seguido a esto, me dio un abrazo de oso, de esos en los que ni respirar podés -. Es que apenas me abriste la puerta con esa cara llena de dulce de leche, mis ganas de hacer algún chiste al respecto y de reirme subieron a mil. Te extrañé, Caro.

- Yo también te extrañé, cara de inodoro..

Justo en ese momento alguien tocó a la puerta y nos dirigimos aún abrazados a recibir a quien estuviese tras ella, porque Martín no me quería soltar.

- Te extrañ.. Apa.. - dijo Male al vernos abrazados a su primo y a mi, con él rodeando sus brazos por mi cintura.

- ¿Qué está pasando acá? - preguntó pícaro Fran, que venía acompañando a su novia.

- Nada de lo que ustedes piensan, mentes cochinas. - dije - Soltame que tu prima me estaba diciendo algo - le ordené a Martín.

- Te decía que te extrañé mucho - dicho eso, se abalanzó a abrazarme.

- Ya lo sé. Nadie pasa varios días con mi ausencia sin retorcerse del dolor - respondí engreída.

Saludé a Fran también, para luego invitarlos a pasar y que me cuenten las novedades en mi tiempo fuera del país.

- Sol ayer se fue de viaje a Uruguay para conocer a la familia de su novio - contó Male.

- Que culiada que es.. Te aseguro que ni una caja de alfajores nos va a traer a nosotros - contesté riendo.

- Ni siquiera un par de uruguayos musculosos. - dijo Male en chiste, y todos reímos, pero Fran levantó las cejas e hizo movimientos con su dedo índice, como una verdadera diva - Mentira, mi vida.. Vos sabés que sos mi única diva.

Comenzaron a darse besos muy romántica y acarameladamente, pero con Martín solo nos limitamos a hacerles burla.

- Mi única diva.. bla bla bla - dijo mi amigo afinando la voz y pellizcándome las mejillas.

- Yo también te amo, Malenita - imité a Fran burlona y dándole besos en la cara a Martín.

Todos nos reímos de nuestras payasadas y los invité a subir a mi habitación para darles unos pequeños regalos que les compré a cada uno en Río de Janeiro.

El más feliz fue Martín, ya que le había comprado una bolsa de dulces brasileños. Estaba tan feliz como un nene con un juguete nuevo. Male quedó encantada con esa remera que le traje y Fran también lo estaba con una gorra, ya que es súper fanático de las gorras.

Volvimos a bajar a la sala de estar para decidir qué ibamos a comer mientras mirabamos televisión sentados en el sillón, excepto Male, que estaba dando vueltas por ahí, revisando su Instagram.

- Hagamos unos fideos con tuco.. Es lo único que se cocinar - dijo Fran, ya que estaba decidido a cocinar para nosotros. Cabe aclarar que es bastante obstinado y no es tan fácil convencerlo de algo cuando ya tiene metida en la cabeza otra idea.

- Como quieras, pero no destruyas mi cocina.. ¿Dale? - contesté en modo de súplica.

- Quedate tranquila, Caro. Yo lo voy a ayudar y a vigilar - soltó Martín.

- Eso no me tranquiliza, te lo juro..

Ellos dos se fueron a cocinar y yo me quedé en el sillón mirando la televisión, ya que ese programa de "crímenes perfectos" estaba muy interesante.

- ¿Y esa quién es? - preguntó Male espiando por la ventana.

Me paré confundida y fui a ver de qué hablaba mi amiga. Ahí estaba de nuevo la rubia, ayudando a caminar a Gianluca por la vereda. Le expliqué a Male la historia y se dio cuenta de lo celosa que estaba.

- Vamos a ayudar a los chicos ¿Querés? - me preguntó. Creo que quiería quitarme de la cabeza a Gianluca y a su amiguita rubia.

- Quisiera poder ir yo a ayudarlo a caminar, pero bueno.. No me qurda otra que ayudar a estos bobos a cocinar - dije riendo.

Nos dirigimos a mi cocina, pero cuando entramos en ella, solo pude decir:

- Dios santo.. ¡Los voy a matar!

Todo era un desastre.. Fideos crudos por todos lados, salsa en el suelo, carne picada desparramada por toda la mesada. Esto daba como resultado final una muerte segura para ambos chicos, que me miraban rogando piedad..

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¡Holaaa! ¿Cómo están?

Acá les dejo el nuevo capítulo.. espero les guste.

Ya se acerca el final de la historia, no tengo claro cuantos capítulos faltan mas el epílogo, pero calculo que van a ser menos de cinco..

Gracias por todos los comentarios y votos, lo aprecio muchísimo.. Los quiero, no lo olviden 💕

Besos grandes como la colita del jugador brasileño Hulk (Yo se que saben quien es, picarones 😏😉)

Romi

El vecino de enfrenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora