La Barrera de Nuestro Amor (Miyagi x Shinobu)

CAPITULO 27 Eventos desafortunados.

---Shinobu---

En toda esta semana he salido a comer con mi “papá” siempre platicamos de mis sueños y de su trabajo, aunque a veces no me dice nada en concreto.

Al igual en toda la semana he hablado con Miyagi, él me platico todo lo que sentí y que quería que tan siquiera fuéramos amigos, volvernos a hablar, cosa que al principio me negué pero fui aceptando conforme pasaba el tiempo.

No puedo negar que aun tengo sentimientos hacia Miyagi, pero eso es algo que Satoshi me ha ayudado a superar, él me dijo que podría conservar mis más preciados recuerdos con You ya que eran parte de mi vida y mi pasado.

Satoshi siempre ha estado a mi lado apoyándome y eso es algo que le voy a agradecer siempre.

-Hermano ya me voy. –comente mientras tomaba mis llaves.
-¿A dónde irás? –pregunto Nowaki.
-Iré a ver a un amigo junto con Satoshi.
-No llegues tan tarde como es tu costumbre Shinobu. –comento mi hermano.
-Trataré pero no te aseguro nada. –reí.
-Mocoso insolente. –me miro.
-Corre Shinobu yo distraeré a Hiro-san.

Nowaki abrazo fuertemente a mi hermano y lo beso, yo corrí hasta la puerta.

-Buenos días Shinobu. –sonrió Satoshi.
-Hola. –bese su mejilla- ¿Listo para conocer a tu suegro?
-Pero ya lo conozco. –me miro confundido.
-Me refería que te presentare a mi amigo, que es como un padre para mí. –sonreí.
-Entonces, tratare de ganarme su bendición. –me beso la frente.
-Ya la tienes ganada, le hable de ti. –me sonroje.
-Espero que le hayas dicho cosas buenas de mí.
-Sin duda alguna. –reí y caminamos hacia el lugar de la reunión.

---En un callejón---

-¿Ya saben lo que tiene que hacer? –comentaba un señor.
-Sí.
-Quiero al rubio intacto y en cuanto al pelirrojo pueden herirlo o lo que sea.

---Satoshi---

Desde que empezamos a caminar me siento en un cierto estado de alerta, es como una especie de sentimiento como si algo malo fuera a pasar. Abrace a Shinobu lo más delicado posible.

-Te amo Shinobu, nunca lo dudes. –lo mire.
-Que cosas dices, -se sonrojo- te quiero.

Lo tome de su mentón y lo bese lentamente. Lo volví a tomar de la mano y reanudamos nuestro camino.

---Shinobu---

Llegamos a la plaza y Bardo nos esperaba sentado, yo agite mi mano y él hizo lo mismo. Nos acercamos a él.

-Hola Bardo, te presento a Satoshi mi novio, -me sonroje- Satoshi él es Bardo mi “papá”.
-Gusto en conocerte muchacho, mio figlio me ha contado mucho de usted. –sonrió.
-Igual gusto en conocerlo y me alegro que Shinobu le haya hablado sobre mí.

Los tres platicamos acerca de nuestra vida, sobre planes a futuro y a lo mejor un viaje en las vacaciones a algún lugar nevado.

-Me gustaría pedirme algo Bardo. –comento Satoshi y me miro de reojo.
-Claro muchacho, dime.
-Me gustaría pedirle su aprobación de nuestra relación.
-Muchacho, me conmueven tus palabras, claro que se las doy, además lo que un padre quiere es que su hijo sea feliz.
-Gracias.

Al atardecer nos despedimos de Bardo y caminamos por un parque un poco solitario tomados de las manos.

Después de un rato 5 tipos se nos acercaron sospechosamente.

-Denos todo su dinero. –dijo uno.

Satoshi me abrazo a su pecho.

-Tengan eso es todo lo que tenemos. –comento mientras le daba su cartera.
-La verdad no venimos a asaltarlos. -rio uno.
-Venimos por el rubio. –se carcajeo él otro y me sujeto.
-Suélteme. –me intente zafar.
-No lo toquen. –dijo Satoshi y uno de los tipos lo pateo fuertemente.
-SATOSHI!!
-Estoy bien, ustedes no saben con quién se metieron. –comento Satoshi y ataco a la mayoría de los delincuentes, haciendo que dos de ellos se marcharan corriendo, incluso el que me sujetaba.
-¿Estás bien? –lo abrace.
-Sí yo, -dije y me empujo- cuidado.

Cuando voltee vi a uno de los sujetos enterrándole un cuchillo en el costado a Satoshi.

El tipo lo soltó y salió corriendo, yo me coloque a lado de Satoshi.

-Esto no es cierto. –solloce.
-No es nada Shinobu… -susurro.
-Pero…
-No fue tan profundo, solo apenas me hirió lo juro.
-TRAIGAN A ESOS DOS AL CARRO.-grito un hombre.

De dos carros estacionados bajaron muchos hombres, 3 personas sostuvieron a Satoshi y se lo llevaron a un carro rojo.

-SATOSHI.

Otros dos me agarraron e intente huir, pero era imposible, me subieron a otro auto hasta que una voz me estremeció.

-Hola de nuevo mio figlio.