Simper

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20. Thank you, Jeonghan;

Mantuve las manos sobre mi rostro mientras esperaba a que la última clase antes del receso terminará. La profesora había cedido los últimos minutos de la clase para que la delegada de la clase diera un anuncio. No era problema mío, cosas sobre los preparativos de un festival, al cual no quería asistir si me sinceraba conmigo mismo.

No oí lo que dijeron y me concentré más en como Vernon dormitaba pese a estar en los primeros asientos, fruncí los labios y comencé a hacerme un montón de hipótesis sobre qué le había tenido despierto tan tarde a altas horas de la madrugada.

Había recibido un mensaje suyo a eso de las cuatro de la mañana, y no sé qué me resultaba más sorprendente, el hecho de que haya pensado que estaría a ese hora para responderle, o que algo en su interior le hubiese hecho creer que yo le ayudaría con cualquiera que fuese su problema. Bueno, quizá sonaba un poco horrible lo que decía, pero era verdad. Cuando Seungcheol estaba cerca, yo me volvía la última opción, porque siempre me negaba a escuchar sus quejas. Aun así, insistió hasta las cinco de la mañana. Y yo no vi los mensajes hasta que desperté hora y media después.

Le vi casi caerse de la silla y despertar de golpe sólo para ser reñido por la profesora. Se recompuso y se hundió en su asiento murmurando una disculpa a Sungjae y la profesora. Y volví a pensar algo realmente bueno que le tuviera tan preocupado como para hostigarme por mensajes. Pero, sólo podía pensar en la nueva expansión de su videojuego favorito, y eso en realidad no ameritaba tanto pánico. Vernon compraría la expansión así lo único que quisiese fuese una razón para no hacerlo, no haría caso y gastaría su dinero en lo que se le viniera en gana. Así que, su problema tenía que ver con algo más. Cuando se trataba de otras cosas que no fuesen baloncesto o los videojuegos era bastante torpe, por lo que era difícil adivinar qué.

Cuando el timbre sonó anunciando el receso, todos se pusieron de pie sin prestar atención a las últimas palabras de la profesora. Todos recogieron sus cosas y pude notar como Seungcheol se quedó plantado en su asiento esperando a que Geumsuk cruzará primero la puerta.

Durante los últimos días había confesado querer volver con ella, pero siempre que se llenaba de valor para llamar y hablar, algo en su cabeza le detenía y volvía a ser el perdedor que vi la vez que me contó que terminaron, exceptuando el hecho de su borrachera, eso no volvió a repetirse. Y si lo hacía, sabía que le abandonaría ahí, en su miseria.

Luego de que se disculpará por el beso que, técnicamente, me robó; por un momento creí que todo se echaría a perder, así que decidí arreglarlo, le prometí que la próxima vez que lo hiciera le daría una paliza. Y eso pareció dejarle tranquilo, no porque pensará que yo me había creado ilusiones falsas sobre nosotros, eso jamás cruzó su cabeza.

En realidad, le preocupaba que fuera yo quien pensara que él era el raro entre nosotros dos, y que fuese yo quien le hiciera a un lado porque yo no estaba interesado de esa forma, no en una connotación romántica. Me gustó de esa manera, y le dejé con esa idea, si abría la boca sobre lo que realmente pensaba las cosas sólo se pondrían peor, y lo único que deseaba era tener un poco de paz; así que, mantuve la boca bien cerrada y actué como si nada.

Vernon metió sus libros sin cuidado a la mochila antes de colgársela en los hombros, sin ser consciente de que no había cerrado correctamente la bragueta. Se acercó a mí, y esperó paciente a que me colocará la mochila para después ir a donde Seungcheol quien apenas y guardaba sus cosas con mucha cautela, mientras sus ojos se desviaban por pequeños instantes a donde Geumsuk conversaba con una amiga que parecía ocupada tratando de acomodar unos carteles que seguro usarían para exponer en la clase de biología.

Y, aunque era buen observador, me guardé para mí el hecho de que yo también notaba como ella miraba a Seungcheol cuando este no se daba cuenta. Parecía triste y como si quisiese ir a donde él. Pero, al igual que Seungcheol, era muy tonta.

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