EXTRA;
Me removí por enésima vez, abrace la almohada e intenté cerrar los ojos con fuerza. Las frazadas cubrían parcialmente mi cuerpo dejando una de mis piernas al descubierto. No hacía frío y en realidad la calefacción mantenía la casa en una temperatura agradable. Acerqué las rodillas más cerca de mi vientre, en posición fetal, pero nada funcionó. Volví a moverme en la cama, girando el cuerpo y quedando en el borde derecho de la cama.
Suspiré con pesadez al recordar la cena con los padres de Jisoo.
Su madre se burló un poco después de habernos pillado besándonos. Su padre se rió de las bromas, palmeando mi hombro, confesando que su mujer era así de bromista. Y, Jisoo se encogió de hombros pidiéndome que no me tomará en serio los chistes inocentes que su madre hizo, es más, la idea de que un chico estuviese besando a su hijo no pareció desagradarle en lo absoluto. En lugar de eso, lucía emocionada, al fin conocía a la pareja de su hijo.
El recuerdo logró hacer que mis mejillas se calentaran. ¡Nos vio!
Giré, bruscamente, jalé las frazaba y cubrí mi rostro, quedando frente a la pared de nuevo. Aguanté un par de minutos en esa posición con las piernas flexionadas, hasta que volví a sentirme desesperado. No podía dormir. Llevaba más de dos horas, echando vistazos al pequeño reloj digital que descansaba en la mesita de noche junto a la cama de Jisoo.
Después de la cena, habíamos permanecido en la sala viendo programas de variedades que, estaba seguro, Seowoo estaría viendo en casa en ese mismo momento. Terminamos viendo una película de suspenso y cuando comencé a bostezar Jisoo sugirió ir a dormir.
No estaba cansado, pero acepté. Se supone que jugaríamos videojuegos ese día después del concurso y la cena con sus padres, pero, finalmente, nada de eso sucedió.
Jisoo me deseó las buenas noches y se tiró en el futon, tapándose con la frazada, que había dejado anteriormente, hasta el cuello y estirándose un poco antes de cerrar los ojos.
Resignado, me fui a dormir también.
Por una tonta razón, creí que permaneceríamos despiertos hablando o algo por el estilo. La verdad es que, esperaba quedarnos conversando hasta la mañana siguiente antes de que tuviera que irme a casa y esperar a verle hasta que a alguno de los dos se nos ocurriera un lugar interesante a dónde ir a pasear.
Presioné mis labios, gimoteando, deseé tener otra frazada para cubrir mi rostro de nuevo.
Por milésima vez, giré mi cuerpo y descubrí una parte de mi rostro para mirar a Jisoo que yacía en el futon dándome la espalda. La luz del pasillo que se colaba en la habitación me permitió distinguir sin esfuerzo su silueta.
Mis mejillas se calentaron al recordar la razón por la que la puerta de la habitación estaba abierta. La madre de Jisoo pidió que no la cerráramos, alegando que a Jisoo le asustaba la oscuridad, no le creí nada.
Resoplé.
Volví mi atención a Jisoo y fruncí ligeramente las cejas. ¿Cómo es que dormía tan cómodo? Le odié, ni siquiera estaba en mi dirección para mirarle mientras dormía.
—Tonto —murmuré.
No recibí ninguna respuesta, a fin de cuentas, no esperaba que estuviera despierto.
Derrotado, dejé escapar el aire de mis pulmones e hice a un lado las frazadas que cubrían mi cuerpo. Eran las 12:20 a.m. y, seguramente, era la única persona en esta casa despierta. Me levanté de la cama convencido de que nadie se daría cuenta, di unos cortos pasos y me coloqué a un lado de donde se encontraba Jisoo, quien no advirtió mi cercanía.
Sentado a su lado, fui capaz de ver su rostro. Los cabellos le caían, dejando su frente despejada y sus labios estaban, ligeramente, entre abiertos. Su respiración era calmada y su rostro lucía en completa calma. Jamás le vi de esa manera antes y sentí unas enormes ganas de besarle con ternura como si fuese un pequeño niño.
No me resistí y me incliné para besarle en la frente. Jisoo se removió un poco en su lugar, pero no despertó. Giré un poco y jalé la frazada que colgaba del borde de la cama, lo decidí en ese momento, dormiría junto a Jisoo en el futon.
Cubrí mis piernas y me recosté, siendo cuidadoso de no despertarle. Recosté mi cuerpo de costado, mirando la espalda de Jisoo. Coloqué las manos frente a mi cara y me sentí un poco más cómodo al estar a su lado. Pero, aún no lo suficiente como para dormirme de una vez por todas.
¿Se molestaría si le abrazaba mientras dormía?
Extendí un brazo y lo pasé sobre él, acercándome más. Eso no pareció despertarle y me tomé la libertad de encimarle la pierna también.
Ojalá no se molestará.
Pegué mi rostro a su espalda y distinguí el olor del detergente de su ropa, era una esencia dulce combinada con el aroma de Jisoo, no tenía palabras para describirlo. Sentí mi corazón estremecerse y mi pecho se sintió acogido, calientito. Sonreí, casi por instinto, y restregué mi mejilla como si fuese un gato.
Jisoo despertó.
— ¿Jeonghan? —cuestionó, adormilado.
—Oh, te he despertado.
Negó, lánguidamente.
—Para nada,... ¿no puedes dormir?
Su voz sonaba un poco distante, parecía que en cualquier momento se quedaría dormido de nuevo.
—No puedo dormir —afirmé.
Esperé a que dijera algo sobre la forma en la que me mantenía pegado a él siendo, jodidamente, meloso.
— ¿Quieres bajar a ver la televisión?
—No —hice una pequeña pausa —. Quiero quedarme así, en realidad, ¿te molesta?
Alzó el brazo y tomó mi mano para entrelazar los dedos con los míos, manteniendo el abrazo que le estaba dando. Besó mis nudillos y negó.
—Si te aburres puedes despertarme —dijo, sin poder evitar contener un pequeño bostezo.
—Vale.
—Vale —repitió, dos tonos más bajos, comenzando a quedarse dormido.
Me llené de recogijo después de ello y permití que Jisoo volviese a perder conciencia de sí mismo. No le despertaría aunque me aburriera. Pegué mi frente a su espalda y sonreí, contento, me había dejado quedarme a su lado y encimarle la pierna.
¡Era tan lindo que mi corazón explotaría!
Y yo estaba seguro de lo esa sensación significaba.
Le amo.
Pasada las 12:50 a.m. concilié el sueño, feliz.
170526. Qué explosión de jotería, y no, no hablo de jeonghan, habló de mí por escribir esto que en teoría no estaba planeado. peroooooo, me lo imaginé hace unas horas y, finalmente, no pude resistirme a no escribirlo ;u; espero que alguien le haya dado diabetes porque a mí sí me re dio mientras escribía este bonito ¿bonus? no sé, fue cortito, pero ojalá lo hayan disfrutado tanto como yo al escribirlo.
Resubido 20/12/20211
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ROUGE
Fanfictionjeonghan se enamoró sólo para darse cuenta de que nunca podría ser correspondido. perdido entre la tristeza y el rechazo se encontró con alguien que blasfemó amarle.