Hug

338 53 21
                                    

30. Drunk in love;

Part I.

Cogí el primer lugar libre que encontré en la plaza y me quedé ahí, mirando ansioso la pantalla de mi móvil, pese a que llevaba haciendo lo mismo desde que salí de casa consiguiendo el mismo resultado. Aún no eran las cuatro de la tarde.

Resoplé, inconforme.

Jisoo, en una de sus tantas incoherentes conversaciones, mencionó que su primo había obtenido unos boletos para ver una película de terror nueva. Al final, su primo enfermó del estómago y todo se arruinó. Y él me pidió que le acompañase a ver esa película. Por muy extraño que pareciera, acepté ser el plato de segunda mesa sólo porque agregó un: "podría ir solo, pero la verdad es que quiero verte. Di que sí, por favor. ¿Por favor, sí?"

Di un leve pellizco a mis mejillas antes de que continuara sonriendo como un tonto en medio de una plaza donde había personas yendo y viniendo de todas partes.

La ansiedad de verlo después de días fue tanta que terminé duchándome y alistándome para salir tres horas antes de lo esperado, y quizá mi hermana notó algo raro y mi madre reprimió las enormes ganas de preguntar a dónde iba con tanta prisa.

En realidad, ellas dos no eran las únicas que comenzaban a notar cierto "cambio" en mi comportamiento. También estaban Seungcheol y Vernon, que no dejaban de joder. Diciendo cosas como "llevo esperando dos horas y no has respondido", " ¿por qué no respondes si estás en línea?", "Jeonghan gilipollas, responde de una vez".

Bueno, a decir verdad, no podría mentir al decir que la razón de mi distracción era cien por ciento culpa de Jisoo. Él respondía mis mensajes a la brevedad y sin darme cuenta realmente, yo comencé a hacer lo mismo. Conversamos, todo el tiempo, siempre atentos a los mensajes del otro, de tal forma que en verdad yo no notaba que tenía más mensajes que responder. Sinceramente, sólo estaba interesado en hablar con Jisoo.

Y sí, estaba muy jodido por pensar de esa forma.

Mi celular vibró encendiendo la pantalla y, en un segundo, todo quedó en blanco cuando vi que Jisoo había enviado un mensaje. No dudé en lo absoluto y cliqueé en la pantalla táctil más rápido de lo que creí.

"¿Vienes en camino?"

¿Qué tan estúpido me vería si le decía que tenía cuarenta minutos sentado en la plaza esperando?

Muy estúpido.

"Estoy en los comedores."

Envié el mensaje y abandoné mi celular sobre la mesa, sólo para escuchar de nuevo como éste mismo vibraba, en cuestión de unos segundos más tarde. Fruncí los labios en una firme línea y sentí que los dedos me hormigueaban, deseando con todo mi ser atender el mensaje de nuevo, pero en realidad no había nada más que decir. No después de ver la silueta de Jisoo asomándose, mientras giraba su rostro a todas las direcciones, buscándome.

Le miré fijo, escaneándole de pies a cabeza, casi como si fuera un acosador.

Y fue casi inevitable no sentir mis mejillas arder cuando sus ojos fueron a parar a donde me encontraba yo, pillándome en el acto y sonriendo al sólo hecho de encontrarme. Le sostuve la mirada mientras él se dirigía a mí, sin borrar de su rostro la sonrisa que llevaba pintada, haciéndole lucir extremadamente lindo, y aunque todo estaba en mi cabeza; una parte de mí creía que mi rostro se incendiaría en cualquier momento de la vergüenza.

Había querido verle después de tanto tiempo, y ahora que le tenía frente a mí quería correr, porque en verdad estaba muy mal. Jisoo me gustaba cada vez más y más, y eso era preocupante. Terminaría perdiendo la cabeza, y aun así, probablemente no me arrepentiría.

Cuando estuvo a sólo pocos pasos de distancia me sentí torpe al no saber cómo reaccionar. ¿Debería pararme y darle un abrazo? ¿Tal vez sólo ser relajado y decir "hola"? ¿O debería aferrarme a él y contarle cuánto le quiero?

Vete la última opción de inmediato.

Y antes de que pudiese poner en marcha cualquiera de mis otras dos opciones Jisoo avanzó hacía mí, sin importarle que aún estaba sentado y se abalanzó a mí, envolviéndome en sus brazos a la par que enterraba su rostro en el hueco entre mi hombro y mi cuello.

— ¡Jeonghan!

Sentí como me comprimía en el abrazo de oso más asfixiante que nunca antes había experimentado. El aire quedó atascado en mi pecho y aunque en general odiaba ese tipo de abrazos melosos, no me aparté. Envolví mis brazos alrededor de su espalda y me permití presionar mi boca sobre su hombro, percibí el olor dulzón que desprendía su ropa e inexplicablemente me sentí tan relajado y cómodo que casi suspiré, olvidando que estábamos en medio de una plaza llena de extraños que tal vez mirarían curiosos. No me importó.

—Hola —susurré contra su hombro.

Jisoo abandonó el hueco entre mi hombro y mi cuello sólo para besar mi mejilla antes de responder suavemente.

—Hola.

*°*°*°*°*°*°*°

Cuando comencé esto decidí que sólo serían 30 capítulos y tal vez un epilogo, je. Qué cosas, ¿no?:v. Espero que les haya gustado, fue cortito, lo sé, pero la escuela nomás no coopera ah.

170313.

Resubido 15 Diciembre 2021

ROUGEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora