14. Letting go;
Las clases habían terminado por ese día. Vernon había quedado de ir a casa de unos amigos de otro salón después de la escuela y nada lo detuvo más que yo, se despidió de mí pidiendo una disculpa por abandonarme hoy y se retiró del aula, perdiéndose entre la multitud de personas que cruzaban la puerta. A lo lejos pude ver como Seungcheol se acercaba a la puerta, como siempre, de la mano de su novia, quién le sonreía muy feliz, por compartir ese contacto físico otro día más. Volví a mis asuntos y comencé a guardar mis cosas, perezosamente. No tenía nada bueno que hacer después de clase y en casa sabía que sólo me esperaba la comida ya hecha y mi madre junto a mi hermana, nada nuevo.
Tomé mi mochila y fui la última persona en dejar el aula. Los pasillos estaban repletos de chicos de todos los grados saliendo de sus aulas, listos para regresar a su casa sin mirar atrás y otros cuantos simplemente cambiando de aula para su siguiente clase. Escondí mis manos en los bolsillos de mi pantalón y comencé a andar solo por el pasillo, tratando de esquivar a todos los que pasaban a los costados de mí. Me llevé más de un empujón y no me sorprendió en lo absoluto que no se detuvieran a pedir una disculpa. Cuando por fin llegué a donde los casilleros, todo se veía más calmado, sólo necesitaba coger mi libro de biología y podría ir a casa. Coloqué la contraseña con destreza y abrí mi casillero, en seguida tomé el libro que reposaba dentro y para cuando volví a cerrar mi casillero me encontré con una cara familiar, que sinceramente no esperaba ver.
—Hey, ¿a casa? —dije tratando de esconder mi tono de voz malhumorado.
Él simplemente asintió, e hizo contacto visual conmigo por un instante antes de volver a desviar la mirada. Sonreí aunque en el fondo simplemente quería irme de ahí y de paso darle un buen puntapié en la pierna.
—Bueno, nos vemos —dije intentando avanzar, pero Jisoo se interpuso entre el angosto pasillo de los casilleros. Fruncí el ceño y solté la primera grosería que se me vino a la mente —. Muévete, no puedo pasar, tonto.
Él no me respondió y eso me hizo enojar más.
— ¿Estás sordo? Dije que te muevas.
Intenté pasarle por un costado, uso su cuerpo como barrera y volvió a bloquearme el camino.
— ¿Qué mierda quieres? —gruñí, molesto.
Jisoo me miró después de tanto tiempo y por un momento quise ser yo quien evitará el contacto visual. Lucía tan roto, y no había ni un ápice de lo que era su burlona sonrisa que siempre me mostraba.
— ¿Aún te gusta él? —murmuró con cierto tono de voz que sólo me hizo sentir más incómodo.
Y simplemente no supe que pensar, ¿de qué estaba hablando?
— ¿Él? —dije riéndome —. ¿Qué tonterías estás diciendo?
—Estoy diciendo que si aún te gusta Seungcheol hyung.
Me atragante con mi propia saliva cuando lo dijo de forma tan directa. Le miré asombrado por el hecho de que le había importado un carajo decírmelo a la cara en los pasillos de la escuela donde cualquiera podía escucharnos. Para mi buena o mala suerte todos habían abandonado la escuela rápido; los únicos aquí éramos él y yo. Quise fingir que no me había afectado en nada lo que dijo, y traté de sonreír para volver a encararlo.
— ¿Seungcheol? ¿Gustarme?
—Por favor, deja de negarlo —replicó.
Sentí como el pecho se me contraía y me quedaba sin palabras. ¿Jisoo lo había notado? Simplemente no supe que decir ante eso y de la nada el silencio se había hecho presente. Ninguno de los dos habló y simplemente nos quedábamos ahí parados mirando la nada. Cuando me fue casi insoportable seguir de esta forma, fui yo quien le encaró.
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ROUGE
Fanfictionjeonghan se enamoró sólo para darse cuenta de que nunca podría ser correspondido. perdido entre la tristeza y el rechazo se encontró con alguien que blasfemó amarle.