Capítulo 42.

670 26 0
                                    

Es mi padre. Me abalanzo sobre él, hacía cerca de un año que no le veía. Me coge en brazos y le abrazo.

-¡Ya has venido!

-Claro. Te dije que volvería en marzo.

-¿Cuándo has vuelto?

-Ayer de madrugada. -hace una pausa- ¿Me presentas a tu chico?

-Claro.

Vuelvo hacia David.

-¿Quién es?

-Mi padre. Ha vuelto.

Oímos como nos silban. Son los chicos. Nos acercamos a ellos. Les abrazo.

-¿Qué tal en París?

-¡Vosotros lo sabíais! ¿Por qué no me habéis dicho nada?

-Era una sorpresa.

Hago una mueca.

-Vicky, yo me voy con ellos. ¿Tú que vas a hacer?

-Espera un momento. Mi padre quiere conocerte. Te has llevado a su hija pequeña casi una semana.

-¡Pero ya conocí a tu madre!

-¡Cómo no vengas me enfado!

Bufa.

-Vale. - dice alargando mucho la a. - ¿me esperáis aquí?

-Claro.

Les deja la maleta y me da la mano. Me acerco.

-Papá, este es David, mi chico. Y David, él es mi padre. Se llama Antonio.

Se dan la mano.

-¿Cuántos años tienes?

-24.

-¿No es un poco mayor para ti, Victoria? - recalca el poco.

-Papá, no empieces por favor.

-Vale. Pero vigilas lo que haces – le señala. Me empiezo a reír.

-Déjalo, anda. Me voy con ellos, ¿Qué vas a hacer?

-Yo me voy con los chicos.

-Vale. Hablamos. - le guiño el ojo y se va.

Volvemos a casa. El móvil vuelve a coger cobertura y tengo cerca de 1000 whatsapp y 30 llamadas perdidas todo de las chicas. Llamo a Noa.

-¡Tia! ¿Dónde estabas? Estábamos preocupadas. -se oye un poco de ruido- Espera que lo pongo en manos libres. Estoy con las chicas.

-En París.

-¿En París? No mientas, dime que has pasado de nosotras y te creo.

-¿Eres tonta? Fui a Granada y después me fui a Disney land. Os he traído un regalo. Si venís a mi casa os lo doy.

Cuelgan. Pienso que se ha cortado y me van a volver a llamar, pero a los 5 minutos llaman a la puerta. Suspiro. Son ellas. Suben a mi habitación y les doy el regalo. Les cuento todo con pelos y señales.

-¡Pobrecito!

-¡Pobrecita yo! ¡Me hacía mucho daño!

-Ya lo sabemos, lo sabemos todas, pero eso no quita que le hayas insultado.

-Bueno, sentiros orgullosas que la he perdido con el condón que me regalasteis vosotras.

Se empiezan a reír.

-¿Nos enseñas las fotos?

-Claro. La cámara está en la maleta.

Coral se levanta y coge la cámara. Las cinco nos ponemos a verlas. Se nos pasa la tarde de risas, haciendo cosas sin sentido, bailando y pasándonoslo bien. Decidimos hacer una Tuit cam. De fondo suena “Love you like a love song”

-¡Hola! - digo a la web cam. A los 5 minutos tenemos 100 viewers y no para de subir.

-Les hemos gustado, no paran de subir – dice Mimi. - Nos tenemos que presentar. Yo me llamo Mimi, ella es Coral – saluda a la cámara – Ale – saluda – Noa – guiña un ojo– Y Vicky – saco la lengua.

Al poco empiezan a llegar comentarios.

“¿Estas con David?”; “Eres fea”; “Mas te vale no hacerle daño”. Intento hacerme la loca, aún así algunos se nota que me afectan. Me llega un mensaje de David.

“¿Estas bien? No te preocupes, pasa de ellas”

Cojo aire. Ya llevo mucho tiempo pasando de ellas.

-Chicas, parad la música. Quiero decir algo – Mimi me mira y me toca el hombro. Coral la apaga. - Sí, estoy saliendo con David. Me da igual lo que todas vosotras penséis, no voy a permitir que por unas cuantas chicas me sienta mal y, sobre todo, no voy a permitir que nuestra relación se vaya a la mierda. Hay algo que se llama respeto. El mismo que pedís cuando alguien se meten con vuestros ídolos. Ese es el mismo respeto que tenéis que tener por David, por mi, por los chicos y por las novias de los chicos. Os recuerdo que vuestros ídolos son mayores y que tienen derecho igual que vosotras a encontrar a alguien que les haga feliz. ¿Acaso no deberías estar contentas porque vuestro ídolo tiene a alguien que le saca una sonrisa? Lo queráis o no, ahora yo soy ese alguien, le hago reír, le hago sentir bien y lo más importante: le quiero. Y él me quiere a mi. Si sois fans de verdad deberíais apoyarle en lo que haga, no intentar fastidiarle la vida a su novia. Porque eso es lo que soy: su novia. No le voy a hacer daño, le voy a dar lo mejor de mi y él me va a dar lo mejor de él. No me importa lo que digáis de mi, pero deberías aprender que las palabras hacen daño y muchas de ellas también hacen daño a vuestros ídolos.

Las chicas me miran.

-¡Que cojones tienes, Vicky! - salta Noa y empezamos a reír.

-¿Os hace un Harlem Shake?

-¡Vámonos!

Ponemos la música. Empieza Mimi motivandose y detrás todas las demás. La acabamos a eso de las 10, porque tenemos hambre.

-¿Os quedáis a dormir?

-¿Tienes camas?

-Ya nos buscamos la vida – sonrío. Un sonoro “sí” sale de la boca de las 4 a la vez.

Cenamos pizza. Nos subimos al ático con unas cuantas mantas y cojines. También cogemos unos cuantos monsters, coca cola y cosas para picar. El ático está insonorizado porque era donde mi hermano practicaba piano. Hablamos de todo, nos reímos.

-¿Os hace un twister? - dice, casi de repente Ale.

Mimi coge su móvil y mira la hora.

-¿Un twister a las 6 de la madrugada?

-Tenemos monster, ¿no?

Me encojo de hombros y saco el twister. Jugamos todas, Carol es la primera en eliminarse y empieza a hacer fotos. Al final caemos todas. Miro el móvil. Ha subido una foto al instragram. “Jugando al twister” Salgo con el culo en pompa, debajo de mi axila está Mimi, que roza el culo de Noa, que a su vez tiene la cabeza en el escote de Ale. Me río. Es una foto buenísima. Después jugamos al cluedo, al party y a otros juegos de mesa.

-¡Ya es de día!

-Coral, beber tanto monster te ha afectado, ¿cómo va a ser de día?

-¡Que sí coño! ¡Mira la ventana! - señala la pequeña ventana del ático. Algunos rayos de sol entran por la ventana.

-Chicas, ¿que hora es? - digo, asustada.

Mimi coge su móvil.

-Las 9 de la mañana. A esta hora estaríamos entrando al insti.

-¿Cuántas horas llevamos sin dormir?

Noa empieza a hacer cálculos.

-Yo ayer me levanté a las 10, así que levo casi un día entero sin dormir

-Yo me eché la siesta y me levanté a las 6 – hago cuentas con los dedos – 17 horas sin dormir.

-Chicas, el monster es malo.

Bufo.

-¿Dormimos?

-Dormimos – confirman ellas.

-Poned los móviles en silencio, quiero dormir.

Eso hacemos todas. Nos tumbamos en el suelo. A los pocos minutos todas estamos dormidas.

Chica misteriosa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora