Capítulo 33.

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Llego a casa. Mi hermano está sentado en el sofá, viendo la tele. Me siento a su lado.

-Hola – digo tímida, espero que me eche la bronca. Pero lo único que hace es abrazarme. Empieza a sollozar - ¿qué pasa?

Se separa un poco de mi.

-El bebé.

Le cojo la cara con las dos manos.

-Jorge, un bebé no es motivo para ponerse a llorar. Es algo genial. Tienes 24 años y llevas con tu novia dos. Los dos tenéis un trabajo estable y os queréis mucho. No es ningún drama.

-Ya pero aún así...

-¿Qué habéis pensado hacer?

-Nada. ¿Qué harías?

-Pues... Yo creo que lo tendría.

-Por una parte lo quiero tener, porque es una parte chiquitita de mi, pero por otra... Estoy acojonado.

Suspiro.

-¿Ari que piensa?

-Está igual que yo.

-Jorge, da igual lo que yo te diga, da igual lo que mamá o papá te digan, da igual lo que el mundo diga. La decisión es de vosotros, si lo tenéis nadie más que vosotros vais a tener responsabilidad de cuidarle y quererle.

Bufa.

-Te dejo solo para que pienses. Te quiero, tate – le doy un beso en la mejilla y subo a mi habitación.

La parte buena de todo esto es que al menos no me ha regañado. Me dejo caer en la cama. Tener un sobrino molaría. Mucho. Yo quiero que lo tengan. Mi madre llega y cenamos. Mi hermano no dice nada. Supongo que está esperando a saber lo que quieren hacer.

Los días pasan y cuando me quiero dar cuenta es sábado. Estoy en mi habitación, escuchando música, recogiéndola y limpiando un poco, cuando mi hermano llega corriendo.

-¡Vicky! - me dice gritando.

-¡Jorge! - contesto en el mismo tono.

-¿Por qué gritas?

-No sé, tu me has llamado gritando, te contesto igual.

Pone los ojos en blanco.

-¿Qué querías?

-Acabo de hablar con Ari. ¡Hemos decidido tenerlo!

-¿Si? ¡Bien! - le abrazo.

-Ahora queda la parte más difícil.

-¿Cuál?

-Contárselo a mamá sin que le de un chungo.

-Tienes razón – bufo

-¡Eh! ¿Y si le contamos a la vez lo tuyo y lo mio?

-¿Qué es lo mio?

-Que estás saliendo con un chico 9 años mayor que tú.

-Ah, ¿que se lo tengo que contar?

-¡Claro!

Bufo.

-¿Por qué?

-Porque vais en plan serio, ¿verdad?

-Sí.

-Pues algún día se lo tendrás que contar.

-Yo tenía pensado que se enterara el día de la boda.

Nos echamos a reír.

-Bueno, si hay que contárselo, mejor ahora. Así le pasa todo al mismo tiempo.

Chica misteriosa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora