Vivir intentando

Capitulo 12: Nuestra primera cita

-Harry te he dicho que no me llames, ahora no puedo, estoy con ella, dijo intentando que no lo escuchase. 

Yo cogí mi móvil intentando parecer que no prestada atención a su conversación, le envié una mensaje a Luna.

Luna, es Louis, el mismísimo Louis Tomlinson. 

Louis seguía hablando en secreto.

-Luego te llamo, le dijo a Harry que parecía estar bombardeándolo a preguntas. 

Colgó y me miró sonriente. 

-Todo bien? Pregunté aguantándome la risa.

-Si, solo era Harry que no puede vivir sin mi, me contestó soltando una risa de la que no pude evitar contagiarme. 

Volvió a arrancar el coche y me llevaba a algún sitio pero no sabía a donde.

En su coche sonaba Bon Jovi, algo que me encantó. 

Íbamos en el coche y la conversación no era más que la rutinaria de dos personas que empiezan a conocerse.

-Bueno y te gusta vivir aquí? Me pregunto interesado.

-Si, la verdad es que no estaba muy decidida a venir, pero bueno la vida da muchas vueltas y al final he acabado aquí gracias a mis amigas.

-Como es eso?

-Pues que yo no pretendía venir, mis amigas presentaron una solicitud por mi, mi madre murió hace muy poco y hizo que mi forma de pensar cambiara, por lo que me presenté a las pruebas y aquí estoy, hace dos semanas más o menos.

-Siento mucho lo de tu madre, pero parece que tienes grandes amigas, ellas no han venido?

-No, ellas siguen en España, las echo mucho de menos, pero bueno, he venido aquí porque quería plantearme una nueva vida y por ahora no va nada mal.

Estaba llenándome de preguntas de tal forma que no podía preguntarle yo a él, parecía interesado por todo lo que yo decía y eso me hacía sentir muy cómoda. 

Me moría por hacerle miles de preguntas pero no me dejaba, no paraba de preguntarme cosas.

- Y piensas vivir siempre en Oxford?

-No, lo sé en principios tengo seis meses de contrato para estar aquí, luego podrían renovarme aquí o en cualquier sitio del mundo.

Él me miró extrañado.

-Y no te gustaría quedarte a vivir aquí?

-No lo sé, me siento un poco como una hoja. Iré a donde me lleve el viento.

-Bueno al menos hay una posibilidad de que no te vayas lejos. 

Este comentario me dejó un poco desconcertada, no sabía que era lo que Louis pretendía quedando conmigo, supongo que le caí bien y ya esta. 

Louis estuvo conduciendo unos 20 minutos y entramos en un aparcamiento cerrado donde había varias plantas donde aparcar. 

Se bajó del coche y muy caballerosamente me abrió la puerta, yo sonreía atónita a lo que estaba viendo.

Entramos por unos pasillos donde no había mucha gente y abriendo una puerta de madera muy grande entramos en un restaurante. 

No tenía claro como había llegado hasta allí, pero me encantó el restaurante, estaba todo ambientado de manera oriental pero a la vez moderno y minimalista.

-Te gusta cocinar?, me preguntó cuando entramos.

-Si, bueno… dije mirándolo.. Sé cocinar pero porque he vivido sola mucho tiempo, no por otra cosa.