El Gran Comedor resplandece bajo la luz de centenares de velas que flotan sobre las cuatro largas e imponentes mesas correspondientes a cada una de las casas de Hogwarts: Gryffindor, Ravenclaw, Hufflepuff y Slytherin. Al otro lado de los ventanales esbeltos y profusamente decorados del techo encantado de la descomunal sala puede verse el manto negro de la noche cerrada. Otros unos de septiembre Frank Longbottom recuerda haber visto las estrellas titilando en lo más alto de la cúpula celeste, pero aquel comienzo de curso densos nubarrones han sorprendido al expreso en su avance por tierras escocesas. Hay gente que interpretaría aquello como un mal augurio, como un vaticinio de que algo iría mal aquel curso, pero él no es de esos.
A lo lejos, Frank ve a su padre cruzando el Gran Comedor con una amplia sonrisa en dirección a la entrada del castillo para recoger a los de primero, que deben estar a punto de aparecer para su Ceremonia de Selección. Para ser sinceros, es un fastidio que tu padre sea tu profesor de Herbología, que sea Jefe de Gryffindor y el segundo a bordo de la directora del colegio, Minerva McGonagall. Te trae muchos problemas con tus compañeros, sobre todo a la hora de hacer amigos. Si Frank ya tiene bastante difícil aquella tarea por sus limitadas dotes sociales, ser el hijo del profesor Longbottom no le ayuda nada.
- Hola, Frank. – Un chico dos años menor que él de cabello pelirrojo casi rubio y los ojos azules le saluda cuando toma asiento junto a él en la mesa de Hufflepuff.
- Hola. – Le devuelve el saludo a Louis Weasley. El único Weasley que ha pisado Hufflepuff hasta el momento - ¿Qué tal el verano? – Pregunta Frank en su intento por entablar conversación con el muchacho.
- Ha estado bien. He pasado casi todo el verano en Francia, visitando a la familia de mamá. Mamá quería convencerme para que me cambiase a la Academia Beauxbatons este curso, pero no lo ha conseguido. – Le cuenta él con una sonrisa satisfecha – Es que si lo piensas... ¡Anda! ¡Pero si eres Prefecto! – Exclama Louis con los ojos abiertos de par en par y la sonrisa aún más ancha - ¡Enhorabuena!
Frank mira alrededor. Sus compañeros de casa lo observan mientras susurran entre sí. Intenta sonreírles con confianza, pero sus rostros no parecen amables.
- Qué casualidad que te hayan nombrado Prefecto, ¿verdad? – Dice socarronamente Stephanie Smith – Supongo que tu padre no habrá tenido nada que ver en esa decisión...
Los susurros aumentan de intensidad. Frank mira a un lado y a otro de la mesa para comprobar que, efectivamente, se está corriendo la voz. Aunque si lo piensa bien ha sido una estupidez creer que podría pasar desapercibido. Habría sido cuestión de tiempo que sus otros compañeros prefectos de Hufflepuff extendiesen la noticia, y de no ser así, al final de aquella cena tendría que ejercer como tal.
- Su padre no tiene nada que ver, de hecho. – Dice entonces Louis, mirando tranquilamente a Stephanie – No sé si sabes cómo funciona la elección de Prefectos. Está claro que no. Los jefes de cada casa proponen a los alumnos. El profesor Longbottom no ha podido proponer a Frank. Si alguien tiene alguna queja por el nombramiento de Frank debería hablarlo directamente con el profesor MacMillan.
Stephanie Smith frunce los labios y le lanza a Louis una mirada envenenada al mismo tiempo que se gira para cotorrear con sus amigas. Frank suspira.
- Gracias. – Le murmura a Louis.
- No tienes por qué darlas. – Contesta el muchacho – Hay gente muy idiota que merece que la pongan en su lugar. – Dice mucho más alto para que aquellos que están cerca de él le escuchen. Sobre todo Stephanie.
Frank compone una mueca que pretende ser una sonrisa, aunque lo hace a duras penas. Sabe que esa misma noche le espera la indiferencia más absoluta por parte de sus seis compañeros de dormitorio. Sin embargo no puede regodearse en su desdichada situación. Su padre irrumpe en el Gran Comedor, seguido por diminutos muchachitos y muchachitas con caras asustadas. Frank sonríe ligeramente al recordar lo asustado que estaba él antes de subir a la tarima de madera y tener a todo Hogwarts mirándole fijamente.
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Relatos en tiempos de paz
FanfictionLa familia Potter-Weasley es, muy probablemente, la familia de magos más numerosa y conocida de Reino Unido y parte del panorama internacional. Desde que la Segunda Guerra Mágica terminó, han disfrutado de la popularidad y el reconocimiento de la so...