capitulo 32

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  ¿Cómo se suponía que tenía que reaccionar? Al escuchar esas palabras se tensó por completo y una especie de relámpago paso por su espalda, hasta llegar a sus pies. Entreabrió un poco la boca, intentando soltar alguna palabra pero no salió nada, nada de nada. Harry la miró atento, esperando su respuesta o algo, alguna palabra pero esperó demasiado y no salió nada de ella. Frunció el ceño y la soltó delicadamente, dejando sus brazos a sus lados, como una estatua, porque eso parecía. Estaba en una especie de shock y no sabía como salir de el. ¿Harry le había dicho que la quería o simplemente estaba jugando con ella? ¿Era eso posible? No podía permitirse caer en sus trampas tan fácilmente, si es que realmente había alguna.

—Lo siento. —se disculpó Harry apenado, decepcionado. —Ha sido una insensatez de mi parte.
La chica lo siguió mirando, intentando descifrar lo oculto de sus palabras, intentando encontrar algo que le dijera que todo era mentira.
—Yo.. yo... —consiguió decir.
—No tienes que decir nada. —la interrumpió. —He sido un estúpido y no he pensado en ti.
Al ver que la chica no hacía nada, se dio media vuelta y comenzó a caminar hacia donde estaba su auto.
—Harry. —susurró ________.
Harry se giró a mirarla, con una pizca de esperanza resaltando en sus ojos. La chica caminó los pocos metros que los separaban y lo cogió de la mano.
—Perdóname tú a mi. —dijo mirándolo a sus ojos, sus preciosos ojos verdes que le cautivaban tanto. —Ha sido todo tan... rápido que no he sabido como reaccionar.
—Tenía que decírtelo.
—¿Hablabas en serio?
—Todo lo serio que puedo ser. —contestó y sonrió. Ella le sonrió de vuelta y sintió como su cara tomaba color.
—Pero... pero, ¿este repentino cambio?
—¿Qué quieres decir? —frunció el ceño algo confuso.
—Quiero decir... llevas años ignorándome, hasta hace poco no sabías mi nombre, no sabías nada de mi y nunca te había interesado saberlo. ¿Por qué ahora, en menos de un mes, te he interesado tanto?
Harry la miró fijamente, sintiendo como el remordimiento crecía en él.
—Las cosas cambian, la gente cambia. —hizo una pausa. —Tú me has cambiado, no sé como, pero lo has hecho. ¡Qué has hecho conmigo! —alzó un poco la voz y soltó una carcajada. La chica levantó las dos cejas sorprendida.
—No lo sé pero me siento realmente feliz, no me he sentido así de feliz en mi vida.
—No te comprendo, nunca te he comprendido, pero déjame decirte una cosa. —lo miró a los ojos, intentando ser dura, tajante. —Si es solo un juego por favor ni si quiera empieces, si pretendes que sea otra de tus muchas chicas que usas y tiras, no lo seré. todavía me queda un poco de dignidad. —Harry intentó decir algo pero ella no le dejó y siguió hablando:—No sé que intentas decirme con esto, ¿que me quieres? No... tú eres Harry, del chico que estoy enamorada en secreto y que lleva una vida muy diferente a la mía, y a pesar de todo eso, lo quiero a él. Me confunde que en un mes, tal vez uno y media vengas y me digas que me quieres, que me confieses lo que sientes. ¿Cómo me tomo eso?
—________. —su voz sonó firme. —No lo sé, ni yo mismo lo sé pero cuando te digo que te quiero, es que te quiero. Si lo he dicho, te quiero y sé que tú me quieres, ¿es muy simple, no?
—No, no es muy simple Harry. —suspiró. —Yo soy de una manera y tú de otra.
—Por favor ________, sé que he sido un descarado, que he usado a las mujeres como basura, que les he dicho muchas veces que las quiero para llevarlas a mi cama pero contigo es diferente, todo lo que te digo lo siento de verdad.
—No, para. —cerró los ojos intentando parar el escozor. No quería llorar delante de él, no podía mostrarse débil. —Conmigo no funciona. Nunca supe que vi en ti, puede que si lo sepa pero es algo muy complicado.
Harry agitó la cabeza algo frustrado.
—Dime que es lo complicado, quiero saberlo.
La chica suspiró intentando calmarse.
—Hay muchas cosas que me impiden creerte.
Auch, eso había dolido.
—Sí, supongo que si... no te voy a presionar pero que sepas que lo que te dije es todo verdad, es todo lo que ocupa mi corazón.

La chica subió las escaleras de su casa a toda prisa, ignorando todo a su alrededor. Cerró la puerta de su habitación y se tiró a la cama. Las lágrimas no salían de sus ojos, querían pero no salían. Cogió una almohada y se la puso encima de la cara, intentando amortiguar el grito de desesperación. Se sentía pésimo, no sabía que hacer ni que pensar. Harry le había dicho que la quería... eso era lo que se suponía que estaba esperando, ¿no? Que el chico del que estaba enamorada le correspondiera, pero era todo tan complicado... No podía creerle, a pesar de que había sonado sincero, simplemente no podía. Nunca pensó que si realmente llegaba el día que él le dijese que la quería iban a aparecer todas esas dudas. Quería creerle, lo deseaba, quería creerle para poder decirle 'yo también te quiero' y estar juntos, felices pero esa inseguridad en ella solo la había creado él. Tenía miedo, mucho miedo de lo que podría pasar si ella lo creía, si lo aceptaba en su vida, y no sabía como hacer para desechar ese miedo. Después estaba el tema de Josh, él seguía amándola, no quería hacerle daño. Tenía que decirle que se olvidara de ella, que encontrase a alguien mejor, que seguro que la encontraba, deseaba decírselo pero era díficil. Pasó tan ensimismada en sus pensamientos, que no se había dado cuenta de que habían tocado al timbre de su casa. Se levantó de la cama sin ánimo alguno y abrió, llevándose una sorpresa agradable y a la vez algo incómoda, haciendo que todos sus pensamientos volviesen a ocupar su cabeza.Tenía la oportunidad de decírselo, ¿era ese el momento?


—Vaya, no te esperaba hasta las cinco. —dijo ella abrazándolo.
—Ya son las cinco. —dijo Josh con una ceja levantada.
—¿En serio? —se giró a mirar el reloj de la cocina y en efecto, ya eran las cinco.
—¿Te ocurre algo? —le preguntó preocupado.
—No, no. —intentó sonreír. —Todo está genial.
Josh frunció el ceño y la miró por unos segundos.
—No te creo, te conozco muy bien señorita. Puedes decirme qué ocurre.
________ se tensó en el lugar, ¿debería contárselo? Después de todo él era su mejor amigo, pero él no la quería solo como un amigo... estas cosas se hablaban con chicas, ¿no creen?
—Pasa. —le pidió haciéndose a un lado para que Josh entrase. Josh entró y se sentó en uno de los sillones, ya conocía muy bien esa casa.
—Dime que te ocurre.
La chica se sentó a su lado y lo cogió de la mano. Suspiró y lo miró a los ojos.
—Josh... es todo tan difícil...
—Por dios ________, me estás preocupando.
—Josh, tenemos que hablar.
—Te escucho.
—No sé como decírtelo, no quiero hacerte daño.
Josh frunció el ceño y se incorporó en el sillón, quedando más cerca de su amiga.
—Dime que pasa.
—Josh, sabes que eres mi mejor amigo, te quiero muchísimo y que hayas vuelto a mi vida me hace muy feliz, te había echado tanto de menos... pero el caso, yo nunca seré lo suficiente buena para ti, te mereces a alguien que sepa valorarte, que te entienda y que sobre todo que te quiera.
—¿Qué me quieres decir con todo eso?
—Deberías olvidarte de mi, yo nunca podré llegar a ser lo que deseas.
—_________, no puedes pedirme eso. Yo te quiero a ti. —cogió aire y negó lentamente con la cabeza. —¿Por qué me dices esto?
—Intento ser sincera contigo y decirte lo que pienso.
—No creo que sea solo eso, me imagino tus razones y tampoco me incumben, pero eso si, como yo me entere que te hacen daño, le parto la cara al que haga falta.
________ sonrió sinceramente.
—Te quiero Joshie. —le dijo abrazándolo.
—Y yo a ti mi pequeña.  

DESEO (HARRY STYLES Y TU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora