THINGS ━━ bakugan

0 0 5 | Joe Brown.

"Me agradas".

  Como todas las mañanas cierto pelicafe se la pasaba en su camilla en un tanto recostado, su enfermedad siempre le evitaba hacer cualquier cosa que él añoraba por hacer.

  Su madre siempre fue aquel impuso para seguir de ese modo, que caso tenía vivir sino puedes realizar lo que mas te gustaba hacer, nunca podría realizar sus sueños, nunca conocería amigos, todos en aquel hospital lo miraban con cierta lastima, no nada más las personas que venían por sus familiares hospedados sino que también las personas que residían en ese lugar.

  Se sentía frustrado siempre lo sentía, pero a pesar de ello siempre mantenía una sonrisa falsa para su madre, eso siempre le mostraba que se encontraba bien, o eso es lo que él quería hacerle pensar a ella.

  Nunca se imaginó que estaría en esta situación, nunca pensó pasar la vida de ese modo, nunca imagino que siempre estaría aislado en su habitación, pero lo que mas le dolía era que su propia madre se culpaba así misma por aquello que sucedió hace varios años atrás.

  Una tarde al joven castaño le habían avisado sobre él cambio de enfermeras, y es que aquella enfermera que siempre se dedicaba a cuidarlo estaría en otra cuidad, él pensaba que ya estaba por jubilarse, aunque aquella enfermera siempre le demostraba que no había nada de que temer eso siempre se aunque parecía mas que se lo decía así misma.

  La noche se acercaba y con ella él mejor momento para él pelicastaño, la vista en la habitación en donde se hospedaba siempre se asomaba aquel circulo brillante de nombre Luna, él adobada verla ya que además de tener él autoestima por los suelos, adoraba ver aquel brillo que mantenía la luna a pesar de estar sola en él cielo.

  Los ojos de él pelicafe se cerraban lentamente hasta técnicamente descanzar.

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  Una mano toqueteo por los hombros a aquel ojigris, eso alerto a él chico de que alguien mas, además de él, estaba en aquella habitación.

— Hola. — saludo una chica que parecía tener la pinta de ser la nueva enfermera. — Me llamo (T/N), yo seré tu nueva enfermera. — habla para después sonreír cálidamente ante él chico.

— E-eh Joe Brown. — se presenta un poco tímido y algo avergonzado ante aquella a cercanía de la peliplateada.

— Mucho gusto, Joe. — habla la chica alejándose de él. — si necesitas algo.. solo dímelo, estaré al pendiente ¿de acuerdo?. — pregunta, él castaño asiente mientras que la chica sonríe de nuevo para irse a de allí.

  Dicen que él amor puede cambiar a cualquiera incluso si esta esta enferma, no cabe duda que la felicidad y él amor cambian cualquier cosa, Joe era una prueba de ello, no tenia razón para vivir, hasta que conoció a una enfermera que le había cambiado la vida ella era de la misma edad que él castaño.

  Cada día que la peliplateada (T/N), visitaba a él pelicastaño este la recibía gustoso ante su visita, su madre se había dado cuenta de aquello tuvo las esperanzas de que su muchacho estuviera luchando por conseguir él amor de la enfermera dueña de sus suspiros.

— Buen día, Joe. — habla la peliplateada mientras entraba en la puerta de la habitación.

— Buenos días. — responde él pelicastaño sonriendo como solía hacerlo pero mas un color carmesí en sus mejillas.

  La enfermera solo lo había mirado de reojo sintiéndole al mismo tiempo, se dirigió hacia el cardiograma que estaba conectado a él mientras que el solamente la observaba, anotaba y miraba, miraba y anotaba aunque eso sonara algo raro era lo que los doctores (as) o en este caso enfermeros (as) lograban hacer.

— Estable.. — susurra. — ultimadamente estas mejor. — admite mientras sube un poco sus cejas en sorprendiéndose.

— ¿En serio?. — cuestiona un poco impresionado, hace apenas unos meses atrás se encontraba en un estado de depresión.

— Si. — responde alegre. —  me alegro mucho por ti, además él doctor encargado de tu situación me había mencionado que si pregresas de esta forma pueden darte de alta. — eso impresiono aun mas a él pelicastaño.

— No es broma, ¿verdad?. — pregunta en un tono alegre.

— Yo no jugaría con eso. — responde sinceramente, mientras se sienta como siempre solía hacerlo ya que él y ella se llevababan de esa manera.

— ¿Puedo preguntarte algo, (T/N)?. — pregunta él castaño a la chica la cual asiente de inmediato.

— Dime. — habla en un tono serio ya que su amigo se había puesto de esa manera.

— ¿Porque eres enfermera?. — pregunta tomando por sorpresa a aquella peliplateada.

— B-bueno, e-es. — trataba de formular una respuesta pero solo tartamudeaba.

— Si no quieres responderme, esta bien. — trata de provocar un sentimiento negativo en la peliplateada.

— Te lo diré. — responde decidida. — cuando era pequeña mi madre estaba enferma de una enfermedad incapaz de curar, aunque era totalmente una niña no sabia nada sobre como cuidar a mi madre, lamentablemente ella había perdido la vida años después debido a uno de sus descuidos. — a pesar de aquello que decía aun mantenía una pequeña sonrisa. — y aunque a pesar de aquello sentí la necesidad de querer ayudar a las personas, como nunca pude ayudar a mi madre. — sonrie melancólicamente.

— Lo siento mucho. — habla un poco apenado y sintiéndose culpable ante la insistencia.

— No hay problema, él mundo gira él presente no hacia él pasado. — sonrie aquella sonrisa que el pelicastaño amaba ver. — aunque su perdida me dejo un poco deprimida sigo pensando positivo, ya que él aveces es bueno desahogarse. — expresa.

— Eso mismo pienso. — admite él castaño.

— Me alegra que existan personas que valoran los recuerdos. — la peliplateada sonríe mientras que Joe imita él acto de la inclina. — te digo algo. — habla la chica mientras el pelicastaño asiente curioso. — me agradas. — habla la peliplateada después de encogerse de hombros.

— Tu igual. — sonrie (multimedia).