Doblemente Problemáticos

Capítulo 33

ÚLTIMOS CAPÍTULOS. SE ACERCA EL FINAL, DEJEN SUS COMENTARIOS Y PRONTO VENDRÁN NUEVAS SORPRESAS.

UN MES DESPUÉS:

"¡Eres una cobarde! No puedo creer que estés haciendo esto. No creo que seas una mujerfría y desalmada, pero con esto comienzo a creerlo. ¡Eres una persona cruel!". ¡Ya para! No puedo creer que comiences otra vez. "Es el cumpleaños de tus hijos y...". ¡Y nada! ¡Ya olvídalo! "¿Y cómo vas a hacer después?". Después es después. "¡Claro! No estás haciendo lo correcto, después no te quejes de las consecuencias de tus actos, Megan". Hablas como mi madre, ya para. "No puedo porque esto es una locura. Se supone que...". ¡Que nada! ¡Cállate! "No voy a callarme porque esto es una locura". Ya lo dijiste, deja que solucione esto a mi manera. "Ya lo hicimos a tu manera una vez y terminamos peor que antes". Pero las cosas se arreglaron al final. "¿Eso crees? Dime una cosa que salió bien. Solo una y me callo por el resto del día". Bueno, esta... Y también... ¡Oh! Esto... ¡Mierda! "¡Te-Lo-Dije!".

— Megan... ¿Qué haces aquí? Los amigos de Marie y Adam ya llegaron —me informa Riley.

Estoy en la cocina, terminando de preparar la comida. Estamos festejando el cumpleaños de mis hijos en la casa de los señores Jones. Al principio pensé que era mala idea pero luego de ver el desorden en el que se encontraba en mi casa, decidí que su casa es más grande y más ordenada. ¡Gracias señores Jones!

Marie viste un vestido azul claro. Lleva una cinta azul en el cabello suelto. Adam viste una camisa roja y unos jeans negros. Todos unos príncipes hermosos y tiernos. "No empieces con tu lado de madre melosa".

Yo llevo un vestido color lavanda que es holgado y mi cabello suelto. No soy amante del cabello suelto pero esta es una excepción.

Higienizo mis manos y sigo a mi hermana hasta la entrada. Hay varios padres con sus hijos en la puerta. Allí está mi compañera de trabajo, Stacy y su hijastro, Harry. A Alex no le va a agradar la idea de ver a Harry aquí y cerca de Marie. "Por cierto... ¿Dónde está Alex?". No lo sé, le dijo a Eric que tenía que ir a cambiarse y a buscar el regalo de los niños. "Es demasiado tierno con los niños". Sólo con los niños. "Contigo ha sido bastante...". ¿Qué?

¡Él me odia! "Para de decir eso, él no te odia". Claro, porque lo que dijo aquella vez no fue cierto. ¿No? "Bueno, tal vez haya dicho alguna que otra palabra hiriente. Pero él estaba reaccionando. No es nada fácil enterarse de esa manera que tiene dos hijos". Bueno pero no tenía por qué tratarme de esa manera. No me interesa, que piense lo que quiera. "Claro que te interesa lo que piense". ¡Cállate!

— Harry, que bueno que estés aquí. Marie y Adam están en el jardín —digo mirando al pequeño niño de cabello rubio y ojos verdes.

Él me sonríe y va hacia el jardín. Harry es tímido como Marie pero él es el que cuida de mi pequeña cuando yo no puedo hacerlo. Es increíble la conexión que Marie y Adam tienen con Harry. Son tres mejores amigos, aunque muchas veces, mis hijos se peleen (y cuando digo muchas, me refiero a que siempre se pelean. SIEMPRE).

— ¡Adam! ¡Dame mi regalo!

Y aquí vamos de nuevo...

— ¡No! Yo lo quiero.

— Adam... —le advierto a mi hijo.

Él voltea a mirarme y pone su cara de niño bueno.

¡A mi no me compras! "¿En serio?". Bueno, sí. Un poco... Pero esta vez no. "¿Estás viendo su cara, no?". ¡Ya cállate!