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Las cosas jamás me salían como esperaba y es que después de esperar que Jos terminara de una vez con su tonta idea de que debía conocer a su amada chica porque era tan similar a mi que eso nos haría sin duda los mejores amigos no paro aquel día que huí de la cafetería, al contrario todo fue a peor aquel día en que este llegó acompañado de la chica a mi casa con la excusa de que debíamos hacer un proyecto en el cual lamentablemente nos encontrábamos siendo compañeros. Y, es que la vida es tan cruel que ese mismo día aquella pelinegra al final notó mi presencia y es que yo creo que no le quedó de otra más que hacerlo porque el idiota de su novio se había marchado a no se que parte, dejándome completamente solo con ella cuando lo que desea con todo el alma era salir de allí y no volver jamás; sin embargo aquello no era posible porque uno, estaba en casa y dos, dudo que el cejón me permitiese alejarme de nuevo. Odio al idiota de Jos, quisiera poder odiar a Estephanya y al final de todo quisiera desaparecer, que nadie me recordará y así estos fueran por el mundo derrochando amor hasta que Jos se cansara y dejara de lado a la pelinegra, quisiera haberme sentido orgulloso al saber que mis sospechas no eran mentira, pero jamás lo hice porque soy Alonso Villalpando el chico que amó a la chica correcta en el momento equivocado y el cual aún soñaba con el momento en el que esta se diera cuenta de mis sentimientos por ella, que me amara y así quizá ser feliz; si tan solo todo fuera tan fácil el mundo seria mejor que el país de las maravillas y todos dejarían de sufrir un amor no correspondido.
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