Razón tenían los chicos al decir que mi emoción por entrar a la U era de primíparas, me estoy volviendo loca literalmente, tanto trabajo, exposiciones, ensayos, lo único que me falta es visitar Israel y morir en el intento.
-¿Por qué tan estresada amor?- Dijo Liz, alce la mirada del computador, me parecía extraño que ella me trata de esa manera.
-Bueno loca de mierda, te trato lindo y jodes, te trato feo y también, vete a cagar- Rodo los ojos, y me dejo aún más atónita.
-Deja de tratar tan mal a mi hija, joder- Llego mi mama y las dos rieron, miro lo que estaba haciendo en el computador e hizo una leve mueca.
La verdad era que ella quería que estudiara algo relacionado con números, pero soy terrible en eso, siempre sentí que me iría bien en psicología.
-Vamos cariño, Amber saldré un rato con Liz- Beso mi frente y salió.
-¡Oye! ¿No te llevaras a Sergio?- Le grite al darme cuenta del niño que estaba sentado en el sofá viendo los Power Rangers.
-¡Te los regalo!- Me grito desde la puerta para luego cerrarla, dijo ¿Los? Me levante y vi a la bebe durmiendo en el otro sofá.
Rodé los ojos y me acerque a ella, la tome en mis brazos y la lleve al cuarto de mis padres.
-Ni se te ocurra colocarla aquí, que tal y llore, o se cague, no no no, llévala a otro cuarto- Dijo mi papa un poco paranoico y reí.
Salí de la habitación y la lleve donde solía ser el cuarto de Liz, la acosté en la cama y encendí el aire, deje la habitación entre abierta y volví a la sala.
-Tía Amber, ¿Jade vendrá?- Dijo Sergio, apartando su vista de la televisión, me senté en la silla del comedor y reí.
-No mi amor, o bueno no lo sé- Este hizo un puchero y se acercó.
-Mi mami me engaño- Dijo frotando los ojos, y se fue caminando.
-¿A dónde vas?- Le pregunte y este giro.
-Donde mi Tío Alejandro, el me da risa le patina el coco- Los dos reímos y se fue corriendo.
Luego de terminar los mil y un trabajos de la Universidad, sentí que el celular vibro, lo tome y era un mensaje de Nicolás.
-Uno aprende a amar, no cuando encuentra a la persona perfecta, sino cuando aprende a creer en la perfección de una persona imperfecta.-
Sonreí como idiota, no sabía que decir, ese hombre me enamora cada vez más.
-Es imposible tonto, si hablamos de la parte física, soy fea-
Soy una arruina momentos lo sé, creo que es lo que mejor se hacer, sentí el celular vibrar de nuevo y lo tome.
-Estoy embarazado.-
Fruncí el ceño y reí, de verdad estoy leyendo esto, digo, ¿de verdad lo dijo?
-¿Qué?- Dije riendo y se lo envié.
Prácticamente lo vio enseguida y espere a que respondiera.
-Lo siento, pensé que estábamos diciendo cosas imposibles.-
Mi sonrisa fue más amplia y cuando le iba a responder mi papa me hablo.
-¿Estás hablando con Nicolás?- Dijo en tono grave, y me miro con el ceño fruncido, me causo un poco de gracia ya que se notaba que estaba molesto y porque llevaba en el hombro a Sergio, el niño no paraba de reír.
-¿Por qué deduces eso?- Arquee una ceja.
-Estas sonriendo como pendeja- Abrí la boca y reí.
-Pues no, estoy viendo memes- Le saque la lengua y reímos.
-Yo veo- Se iba a acercar y de inmediato me coloque nerviosa.
-Lo siento, ya lo elimine- Le sonreí y este rodo los ojos.
................................................................................................................
-¡Ay qué asco!- Grito Siane al ver el video, estábamos con Gerard viendo partos naturales y de cesárea, mire al castaño y no dejaba de reír.
-Quita eso, que porquería- Dijo como si fuera a vomitar.
-No mires, y no lo quites tío- Le guiñe el ojo, este rio, la verdad es que si daba mucho asco pero al verle la expresión a esa pendeja causaba gracia.
-Mucho por hoy, mañana seguimos viendo más videos- Gerard quito el video y cuando iba a protestar, Siane me tiro el cojín.
Era relativamente tarde más o menos cinco de la tarde, mi mama y Liz no llegaban y conste que se fueron desde las diez de la mañana y ya estaba preocupada, llame a mi papa y me dijo que se encontraban en el salón de belleza.
Los chicos llegaron y comenzaron a hacer desorden, Eleonor riéndose con Siane de quien sabe que, y de quien sabe sobre que, Jared regañando a Sergio para que deje de molestar a Jade, Gerard defendiendo de a su hijo, para luego largarse a una de las habitaciones para reírse.
Esta gente está loca la verdad.
Al pasar por la habitación de mis padres escuche a Alejandro y Gerard riéndose.
-Quiero que Sergio enamore a Jade- Dijo riendo.
-Esa es una palabra muy grande para unos bebes- Dijo mi papa torciendo la boca.
-Lo sé, pero me refiero a cuando este más grande, ¿Te imaginas? Si es celoso ahora que esta pequeña, cuando este grande será peor- los tres reímos aunque no me vieran.
Nicolás me envió un mensaje para que fuese a su casa, como todo el mundo estaba entretenido en una cosa no notaron que salí de la casa, era un poco tarde, alrededor de siete de la noche, no me gusta esto, está muy oscuro para ser esta hora.
Llegue a la casa de Nicolás, y este abrió la puerta, sin esperar un minuto más me tomo de la cadera y me beso.
Cuando se resignó a soltarme, subimos a su habitación, llevo palomitas, gaseosa y dulces, vimos películas y hablamos un poco.
Luego de cierto tiempo me encontraba acostada en la cama de Nicolás, el encima mío, empezó a besarme el cuello, solté un leve gemido por la acción, empecé a sentir como su erección crecía y empezaba a sentirla.
- Amber quiero hacerte el amor, justo ahora que gimas mi nombre, hacerte olvidar todo a tu alrededor, ser el primero y el ultimo, te deseo y te amo-
Gemí en respuesta a lo que me decía
Sentía como si estuviera derritiéndome en una piscina de placer, mientras su mano recorría todo mi cuerpo, nos levantamos de la cama, fuimos quitándonos una a una nuestras prendas, ambos estábamos admirando nuestra desnudes, nos abrazamos sus manos acariciaba mis pechos pasaba a mi espalda y descendía por mis brazos, yo acariciaba sus espalda mientras besaba su clavícula.
- Tu piel es lisa, suave y cremosa como la seda- susurro en mi oído
Me arregosto en la cama suavemente, empezamos a besarnos, sus manos exploraba mi cuerpo, llevo su mano a los muslos donde empezó a dibujar círculos, llego a el lugar en el que se producen el placer que estremece, gemí y me arque, mi cuerpo sabe quién es el, lo extraño acerca de los extraños es que son desconocidos y conocidos hay un patrón de él, una forma que entiendo, una geometría privada que se complementa con la mía, él es un laberinto en el que me perdí hace años, y ahora encuentro la salida él es el mapa que faltaba es el lugar que yo soy.
-Yo la escogí a usted, si, a usted, porque me di cuenta que encontró mi punto débil, y fue la única que descubrió la forma para calmar esta alma indomable. La escogí porque me di cuenta de que valía la pena, valía los riesgos, valía la vida- Susurro con voz ronca en mi oído.
Hicimos el amor, simplemente quiero que él sea el último tal y como lo dijo.
ESTÁS LEYENDO
Stay By Me.
Teen FictionPara la sociedad le resulta difícil creer o de tan solo imaginarse a dos personas que se llevan muchos años de edad puedan llegar a enamorarse. Están acostumbrados a lo cotidiano, y si ven algo distinto suelen criticarlo, e incluso tacharlo como si...