Adicta a tu manera de amar {AGUSLINA}

Capítulo 58

-2 Final 

Carolina

-¿Supieron lo que le hicieron a Ruggero?- dijo una de mis compañeras de clase, mire a Valen quien tenía su ceño fruncido.

-¿Qué le hicieron?- pregunté

-Tus chicos, lo avergonzaron frente a todo el Blake- dijo riendo.

Valentina me miro confundida. Mierda, ¿Qué habrán hecho los chicos? Me pareció demasiado extraño cuando Jorgito llamó diciendome que se vendrían los tres juntos. 

-¿Qué crees que hayan hecho?- me preguntó Valen en susurro.

-Ni idea chiquita, pero estoy segura que nada bueno- respondí.

Luego de que termináramos con el trabajo de Ciencias Políticas, mi cabeza no dejaba de pensar en el morocho, ojiverde  y el de los rulos metidos en problemas. Cuando íbamos caminando hacia los casilleros, saque mi celular para escribirle a mi novio. 

Yo: Hola mi amor, ¿dónde estás?

Espere a que respondiera pero no se había conectado en Whatsapp así que decidí concentrarme en guardar los libros de las clases.

Cuando termine de organizar mi casillero y tomar los libros que necesitaba lo primero que hice fue revisar mi celular. Y por suerte, tenia una respuesta de mi morocho.

Mi morocho: En casa de Jorgito, ¿Ya saliste?

Suspire aliviada cuando supe que estaban en casa de Jorgito y no en la dirección por haberle hecho quien sabe que carajos a Ruggero. 

Yo: Si, voy de camino... Al parecer tienes algo que contarme.

Mi morocho: Algo así...

-Están en casa de Jorge, amiguis- le comente a Valentina que estaba organizar los libros. 

-Bien, ¿Irás?

-Si, quiero que me cuenten qué carajos hicieron- dije terminando de cerrar mi casillero. 

-Iré contigo- dijo segura.

-Amiga no creo que...- iba a negarme, pero no pude seguir hablando ya que ella me interrumpió.

-Chica iré, necesito ver a Jorgito- dijo mientras caminaba a la puerta principal- Te espero afuera. 

Rodee los ojos y camine detrás de ella. Fuimos hacia su auto que estaba estacionado debajo de una gran árbol. 

-¿Vamos?- dije dudosa, estaba segura que Jorge no la dejaría entrar a su casa.

-Vamos- dijo ahora con una expresión no muy segura, como si estuviera pensando lo mismo que yo. 

Subimos a su auto, lo encendió y arrancó el motor hacia la casa de nuestro mejor amigo. En parte, me sentía un poco molesta con ellos por ponerse a nivel de Ruggero, pero por otro lado... sabia que ellos no se quedarían de brazos cruzados. 

Cuando llegamos, estacionamos frente a la casa del señorito de rulos y pude ver que estaba el auto de Malena, Valentina bajo detrás de mi. Las dos caminamos hacia la entrada. 

Toque el timbre y enseguida mi novio abrió.

-¡Te extrañe tanto princesita!- fue lo primero que dijo para luego atraerme a él.

-Y yo a ti, mi rey- dije dandole un sonoro beso en los labios. Él tomó mi mano y me jaló hacia la sala donde estaban los demás esperando. 

-¿Qué carajos hace ella aquí?- fue lo primero que dijo Jorgito señalando en dirección a Valen para luego cruzarse de brazos.