Capítulo 7 EL SACRIFICIO DE UNA MADRE

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Día Domingo 14, 7pm. En la noche después de que Mónica ya no sienta la energía de los inquisidores, libera a Willian de su control desactivando su SOBREPORTECCIÓN.

WILLIAN: ¿qué ya terminó, ya es de noche?

MÓNICA: discúlpame Willian, sé que lo que hice fue horrible

WILLIAN: pero no recuerdo nada, aunque...

MÓNICA: si, tú eres inocente de tus actos, así tus manos estén manchadas de sangre, fui yo quien te usó, yo te usé como un arma

WILLIAN: señora Mónica, ya no se castigue, usted hizo lo que hizo por Bruce, yo en su lugar también hubiese hecho lo mismo

MÓNICA: ¿enserio me perdonas?

WILLIAN: ya le dije que fue un gusto ayudarla, pero... no sé por qué... pero me siento feliz

MÓNICA (sonríe): ella me dijo que no dijera nada, pero mereces saberlo

WILLIAN: ¿qué?

Mónica le dice algo en el oído de Willian, él sonríe y le agradece, luego se retira. Mónica se dirige a su casa. Mientras Bruce y Samanta llegan a la casa primero, Bruce va a la cocina a preparar la cena, Samanta se sienta en el sofá y se pone a pensar:-"Bruce, desde cuando te volviste un asesino, ya no eres como eras antes, antes sonreías al verme, antes eras más sentimental, antes ... ahora eres totalmente frio, pero sé que eso se debe a la desesperación, tú estás entrando en la fase inicial de la desesperación, pero descuida que pronto te salvaré de ese estado-". Después de media hora Mónica llega a la casa y ve a Bruce cenando junto con Samanta, Mónica al ver que Bruce está bien se pone muy feliz y va directo hacia él, lo abraza y lo besa.

MÓNICA (emocionada): mi corazón ¡estás bien!...

BRUCE (serio): ¿mamá que pasa?

MÓNICA: sabes, siempre te voy a querer...

BRUCE: eso ya lo sé, más bien dime dónde has estado, estuve preocupado

MÓNICA: siempre serás mi hijo lindo querido, así seas el anticristo, así seas la encarnación del mal, así tengas esa aura divina oscura, SIEMPRE SERÁS MI CORAZÓN, MI RAZÓN DE VIVIR

BRUCE: mamá, no entiendo lo que quieres decir, ¿estás bien?

MÓNICA (derrama unas lágrimas): claro que estoy bien, solo es que... es que...

BRUCE (finge sonreír): descuida mamá, ahora soy de un nivel incluso más alto que Marco, no soy tan indefenso como crees

MÓNICA: no puedo descuidarte, siempre me preocuparé por ti hasta el final de mi vida

BRUCE (vuelve a abrazar a su madre): mamá, yo soy quien esta agradecido con la vida por tenerte

SAMANTA (llorando): que conmovedor... eso es amor de madre e hijo

BRUCE (pensando): realmente sentía eso por ti madre, pero aun quiero tu bienestar, así que aunque ya no te ame, aun puedo sentir algo por ti, aunque sea solo preocupación

SAMANTA (pensando): así que Mónica también puede ver el aura divina oscura de Bruce

MÓNICA: oh Samanta, disculpa, me emocioné y me olvidé de ti

SAMANTA (se seca las lágrimas): descuide, verlos fue lo mejor que pude ver en la vida, así que gracias señora por ser la madre de Bruce

MÓNICA: verdad hija, Bruce y tú estaban en un momento romántico y arruiné todo

SANGRE DIVINA PALADINESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora