SANGRE DIVINA PALADINES

capítulo 84 INICIO DE LA GUERRA

Los gigantescos muros de Heliópolis hechos de piedra caliza, rodean todo el reino dándole una forma cuadrada, en cada lado de los muros se posicionan el ejército heliopolitano y los pocos cosmopolitanos que quedan juntos con algunos soldados kalisies. El 90% de los soldados son sangre divinas que entrenaron toda su vida para luchar en la guerra, por ello la mayoría son de niveles altos de 7 a 9 y pocos son de nivel 10 a 12. Los soldados jandies usan armaduras y armas de acero. Mientras que los kalisies solo visten con sus mochilas especiales y cascos, ya que ellos dependen mucho más de su avanzada tecnología. Los nuevos héroes del inframundo Bruce, Samanta, Alfonso, Jordan y Willian; se posicionan junto con los soldados en cada lado de las murallas del reino. Bruce está en el extremo este, donde se ubica la entrada principal; Willian en el extremo norte; Samanta y Alfonso están en el extremo sur, ellos van juntos ya que son los de nivel más bajo y Jordan está en el extremo oeste. Todos se preparan para combatir al ejército de bestias demoniacas.

En Aksum, los Kalisies Elpats y Liudes rodean sus murallas junto con varios autómatas robots de tres metros de alto con forma de chacales, águilas, cocodrilos, uros, leones, ibis, humanos y gatos; estos robots son de color rojizo y dorado debido a que están hechos con muchos minerales como hierro, oro y bronce; también poseen cañones en sus lomos, son capaces de flotar en el cielo gracias a impulsadores magnéticas en sus pies; estos autómatas están dotados de inteligencia artificial para tomar mejores decisiones en las batallas. Todo este ejército es acompañado por los peluches los guardianes del Duat .

En el rascacielos real de Aksum, se encuentran las princesas viendo todo a través de varias pantallas y hologramas en tercera dimensión que se proyectan en todas partes.

JIHAD: ¿no estas nerviosa?, princesa Nea

NEA: para nada, princesa Jihad, es una lástima que nuestros padres fueran asesinados por el señor oscuro, y que nuestras madres murieran en la guerra, ahora nosotras seremos las gobernantes de nuestros pueblos

JIHAD: es verdad, pero antes de pensar en gobernar primero debemos luchar y salvar a nuestros pueblos de la extinción

NEA: debemos resistir tanto como podamos hasta que el ángel Abadón y la serpiente de Midgard obtengan la bendición de Osiris y también restauren el verdadero poder de Horus, solo así tendremos garantizada la victoria.

De pronto los pequeños robots exploradores de los kalisies con formas de palomas y lagartijas que se esparcieron en todo el desierto comienzan a desaparecer de los radares, lo que significa que ya aparecieron las bestias demoniacas y están en el suelo del Duat. Las bestias demoniacas aparecen de la nada en medio del desierto y se reagrupan, ellos avanzan en dirección a Aksum. Algunos robots pequeños voladores los ven y rápidamente informan a Aksum antes de que sean destruidos por las bestias, al parecer ninguno de estos robots puede escapar de la ira de las bestias.

Por otra parte muy lejos del territorio de los kalises, en las ruinas del reino Aspit; Samir y Abida entraron al templo de Isis, este templo está lleno de huesos y restos humanos momificados; Samir y Abida recorren el templo hasta llegar a una habitación donde se encuentra una estatua de Isis. Frente a ellos en la misma estatua brilla y comienza a proyectar la imagen de ISIS la hermosa diosa de la vida, la maternidad y el nacimiento.

ISIS: han hecho bien en venir a mi templo

SAMIR: solo quise saber dónde estaba el portal hacia mi mundo

ISIS: la puerta al Kemet fue sellado por la diosa que nos está debilitando

ABIDA: ¿qué diosa es? ¿Atenea?

ISIS: se la conoce como HELA, ella ha llenado de poder a las bestias demoniacas del Sheol y las trajo al Duat para destruir a todos los seres vivos