Fugitiva

Capítulo 49. "Libre"

♦ "Libre"

La libertad no es el poder de hacer lo que queremos, sino el derecho de ser capaces de hacer lo que debemos.    - Lord Acton

Ellos continuaban siguiéndome, ¿cómo se sentía? Oh, se sentía como algo intruso en tu espacio personal, se sentía como cuando el bravucón de la escuela te amenaza, se sentía como cuando la niña mala roba tu diario, no tan dramático, pero real.

¿Desde cuándo escapar se convirtió en sobrevivir? 

Estaba segura que era más fuerte que todos esos hombres. Como también estaba segura que no tenía mucho tiempo antes de que ellos me atrapasen.

Así que giro en una calle y corro. Corro hacia el lugar en donde sé perfectamente que van a buscarme, llegaran tarde si no se dan prisa.

Entro a bruces en la casa que se supone no debo entrar y sé que es arriesgado porque alguien podría estar aquí, pero ya es demasiado tarde cuando me encuentro sacando un bote pequeño de gasolina de detrás de las escaleras. 

El plan que formula mi mente no es bonito, el sentimiento que llevo dentro no es agradable y lo que voy a hacer será arriesgado. Me preparo para cualquier cosa que vaya a pasar, pero no me detendría ahora, no me detendría  incluso si me lo pidieran. Porque llevo soportando esto demasiado tiempo y porque llevo encerrando el odio en mi con gran energía que incluso es palpable. 

Pero no podía culpar la vida que llevaba, no podía culparme porque yo no la elegí, yo no sabía que habría riesgos y demás. Aunque si culpaba a alguien, a ella, a Petra, porque por ella estaba así, ¿no podía simplemente dejarme en paz? ¿Por qué la sed de venganza? Pero ciertamente lo entendía, porque venganza era lo que iba a ir a conseguir ahora. 

Encerrarme bajo llave no iba a servir de nada, escapar no serviría mientras el enemigo viviera, tenía que hacer algo para poder estar en paz, en paz durante mucho tiempo, la tranquilidad era algo que no reconocía, era algo que yo no tenía, me habían robado eso y más, por desgracia.

Salgo por la puerta principal con el pequeño bolso en mis manos. 

El futuro estaba marcado, para bien o para mal.

Solo esperaba que esto saliera como debía, esperaba tener suerte.

Paso a través de una multitud esperando el cruce de la carretera. Esos hombres me miran a unos escasos diez metros. Caminan hacia mí y yo paso la carretera con los autos en transcurso. Agarro fuerte la bolsa que tengo en las manos, continuo a pesar de que el pitido de los autos suena en mis oídos y los gritos de los conductores estallan en mi cabeza, pero no me detengo.

Me detengo en medio de dos edificios esperando, solo esperando. El sonido del seguro de un arma siendo quitada suena atrás en mi cabeza. Al frente aparece un tipo y sé que detrás de mi esta el otro.

—De rodillas — dice. —De rodillas — repite cuando no hago lo que pide. 

Me pongo de rodillas, en un movimiento rápido saco de la cinturilla de mis pantalones la pistola que tengo ahí y disparo primero en la pierna del tipo de atrás y luego al de enfrente, Ellos caen. Y para asegurarme que están muertos, me levanto y les disparo desde arriba una, dos, tres veces hasta que dejan de retorcerse. 

Aplausos me distraen y alzo la cara para verla parada a unos metros sonriendo nórdicamente.

—Bien, Elizabeth. Has acabado con ellos. 

—Me gustaría más acabar contigo —imito su sonrisa sarcástica. 

—No creo que se pueda.

— ¿No crees que se pueda? —camino dos pasos adelante saltando los dos cuerpos en el suelo. — ¿No crees que se pueda? —repito incrédula. —No es de si se puede o no —levanto el arma y le disparo en el hombro izquierdo, donde anteriormente le había disparado. Ella levanta su mano derecha para cubrirse la herida. — Es de que lo voy a hacer y no vas a impedirlo. —disparo de nuevo en su hombro derecho. Nunca deja su sonrisa y eso me da más impulso a seguir. —Es de que no me vas a detener. 

—Adelante.

—Sabias que esto vendría, ¿cierto? —pregunto.

—Sí, lo sabia — no hace muecas de dolor ni retrocede.

— ¿Cómo pudiste hacerle eso a personas inocentes? ¿Qué clase de retorcida cabeza tienes? — escupo con odio. 

—En este lado del mundo uno no mide las consecuencias —bajo el arma al eje de su muslo derecho y disparo. Cae riendo como si se tratara de un chiste. Muevo el brazo y le disparo en el muslo izquierdo, termina de reírse y dice:

—Nos vemos en el infierno, Elizabeth.

—Púdrete. Pu-dre- te. — levanta la mirada y me mira seria.

— ¿Por qué le pasan cosas malas a la gente buena?

— ¿Buena? — me burlo. — Dios mío, que bajo has caído.

—Soy buena.

—No seas hipócrita —escupo. —Tú no tienes nada de buena. Nada. Eres tan ilusa que incluso podrías creerte que eres buena, pero no lo eres.

—Empecé desde hoy. 

—No empiezas algo que no puedes ser. —miro al cielo aun con la pistola apuntando a ella. —No empiezas algo si no lo quieres ser. Y tú no quieres ser buena. No te muevas —ordeno cuando ella  intenta ponerse de lado. —Disparare el arma si te mueves un centímetro. 

—No importa. Solo acaba con esto. —cierra sus ojos brevemente antes de volverlos a abrir.

— ¿Y porque haría lo que dices? ¿Por qué te daría compasión si tú no la tuviste? ¿Por que terminaría algo que estoy disfrutando? 

—Porque no eres como yo.

—Es claro que no soy como tú.

—Pero si continuas así —respira lento. —Conseguirás que te atormente toda tu vida.

Tomo la bolsa y la abro revelando el bote de gasolina, lo saco y la roció con ella de pies a cabeza hasta que ya no queda más de ese liquido. Prendo una caja entera de cerillos y la miro a los ojos estando atenta de que ve mis acciones. Entonces le prendo fuego.

Doy media vuelta y un grito de horro y dolor llena el aire de ahí. Escondo el arma en la bolsa y la aviento por encima de mi hombro hacia el fuego. Camino lentamente y son prisas, sin importar si alguien me ve o no, si alguien viene o no.

Respiro agitadamente sintiéndome.... sintiéndome libre y bien. Había acabado con ella y era real, había terminado con esto y era verdad. 

Aprieto fuerte los dientes cuando la oscuridad me llega, porque no todos los días matas a cualquiera y yo había matado a muchas personas, a muchas. 

No quería sentirme de esta manera y no podía evitarlo así que hice lo único que sabía. 

“Sonreír ".

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Continuará...

Un capítulo. Bueno, Gracias, de nuevo, a todos aquellos que me dieron esta oportunidad. Gracias a los que me leyeron y votaron y comentaron y todo. No puedo agradecerles lo suficiente c: