Capítulo 2

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Saul Aguirre:

Observo a Monica salir del baño de la habitación y por su cara imagino que nada salió como esperaba. La miro en espera de una respuesta y ella niega con la cabeza.

-Nada -sollozó mientras me enseñaba la sexta prueba de embarazo realizada en seis meses y se abalanzó sobre mi. La abrace y la acune entre mis brazos.

-Todo estará bien, ya llegará el momento. -la tranquilice.

-No, tu no entiendes. No puedo ser madre, algo esta mal en mi. No puedo. -sollozo/ gritó al mismo tiempo que se separaba de mis brazos y me miraba.

-Tranquila...

-¡No! -gritó -A ti no te importa porque no quieres lo mismo que yo. Tu nunca lo has querido, porque no me amas como yo a ti.

-No digas eso... -ella mejor que nadie sabía mi gran sueño de ser padre. -Calmate... -trate de atraerla hacia mi, mas ella me empujo.

-¡No! -volvió a gritar -No quiero que me toques, quiero que te vayas. -me dijo con el rostro bañado en lágrimas y aunque sabía que solo era un berinche por no poder ser madre, me moleste.

-Estas siendo injusta... -la mire y ella me volteo el rostro. Asentí con la cabeza y tomando la chaqueta de sobre la cama salí furioso.

*****


Altagracia Saldoval:

-T-í-o -escuche a Matamoros repetirle la misma palabra por octava vez a Luna. Quienes ambos estaban en la alfombra de la sala jugando. -T-í-o -la pequeña lo volvió a ignorar y esta vez quizo meterle una de sus galletas a la boca. Yo reí.

-Ya ves hasta ella se canso de escucharte decir lo mismo -lo mire con una sonrisa, mientras continuaba con mi lectura. Como extraño mi constructora. Necesito volver a trabajar, aunque tengo mis negocios por aca; necesito moverme, crear planos, formar construcciones. Pero no podré hacerlo hasta que mi situación no este de nuevo arreglada.

-Estas celosa porque sabes que primero dirá "Tío" que "Mamá" -se defendió y yo volví a reír mientras negaba.

-Soy su madre, esta claro que primero dirá "Mamá"

-Señora, le llego esto - entro Laía con un sobre en las manos. -Dijeron que es urgente. -Yo estire mi brazo para que me lo diera y luego de ponerlo en mis manos se retiro.

-Es de México -le informo a Matamoros, mientras lo abro. Por fin después de dos meses de haber recibido el último sobre, recibo noticias nuevas. Apenas lo saco me encuentro con varios papeles entre ellos una carta firmada por un juez donde me declara inocente y que todas mis propiedades regresan a mi. En otro papel me encuentro con otra carta donde me declaran con vida por lo que puedo hacer uso de todas mis propiedades en cualquier momento y en la última carta es de mis abogados donde me felicitan y me anuncian mi libertad total y me agradecen por contratar sus servicios. -¡Soy libre! -exclamó emocionada y veo como mi pequeña da un brinquito asustada y me mira. -Soy libre, Matamoros -rió al mismo tiempo que le paso los papeles y corro a tomar a mi niña en mis brazos y la lleno de besos.

Matamoros se acerca hasta a mi y expande sus brazos.

-Felicidades, Doña -sonrié y yo lo abrazo. Mi bebé sonrie y aplaude con sus manitas como si entendiera. Provocando nuestras risas.

*****

Saúl Aguirre:

-¿Problemas en el paraíso? -cuestionó Lopecito cuando vió a Mónica entrar a nuestra oficina a buscar unos papeles sin ni siquiera saludarme. Hice una mueca y lo mire.

-Ya sabes, lo mismo de siempre... -comenté

-¿Todavía no puede embarazarse? - yo negue. -¿Y tu que quieres? -cuestionó mirandome fijamente y yo suspiré.

-No lo se, siempre ha sido mi sueño ser padre. Pero ultimamente con Mónica y su presión se ha vuelto casi una pesadilla. -me lleve el dedo indice y pulgar hasta el puente de mi naríz. Por un momento, mi mirada se poso sobre la foto de Altagracia la cual estaba sobre el escritorio de Mónica. ¿Qué habrá sido de ella en estos casi dos años? Nunca he podido decirle a Mónica que su madre esta viva. ¿Como decirselo si nunca más volveremos a verla? ¿Para que hacerla sufrir?

-¿Todavía sientes algo por ella? -cuestionó Lopecito y yo lo miré con el ceño fruncido. Con una mueca me señalo la fotografía.

-No -me apresure a decir. Suspire. -No lo se, pero ¿para que? Ella esta muerta -trate de convencerme de eso, aunque sabía que no era así y Lopecito asintió.

*****

Altagracia Sandoval:


Sonreí cuando sentí los brazos de Trigve cubrirme.

-Ahora que eres libre ¿Vas a regresar a México? -me preguntó al mismo tiempo que besaba mi cuello y yo mantenía la mirada en la Torre Eifel frente a la ventana.

-No, no por el momento. Luna esta por cumplir los diez meses y no me gustaría irme aun. -conteste, mientras mi mirada se perdía en el paísaje. Todavía recuerdo cuando llegamos a este lugar.

Luego de haber entrado al mar aquel día para escapar de la policia. Matamoros me estaba esperando a la distancia con un pequeño bote para sacarme de ahí. Como lo habíamos planeado antes de ir a la boda de mi hija y verla casarse con el amor de mi vida, llamamos a Trigve y decidi hacer uso de él para salir del país es uno de sus aviones privados. El sin poner ninguna traba, gustozo me ayudo. Y cuando llegamos aquí compre este pequeño lugar para Matamoros y para mi.

Dos semanas después me entere de mi embarazo y feliz lo acepte; y a pesar de que Trigve supo desde el primer momento que ese bebé no era de él lo acepto y cuido como tal. Y aunque nuestra relación es libre, sin titulos y sin nada... e incluso sin amor de mi parte se que es algo bueno y tal vez algún día logre amarlo como él se merece.

-¿En que piensas? -cuestionó y yo voltee a verlo con una sonrisa

-En como llegamos aquí. -le respondí y lo bese con pasión, él correspondio al beso de la misma manera, al mismo tiempo que me levantaba entre sus brazos. Yo enrede las piernas en sus caderas y jugue con su cabello, mientras lo sentía caminar hasta mi habitación.

Más allá de La DoñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora