Capítulo 4.5

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No lo iba a subir hoy, pero creo que merecen conocer el punto de vista de Saul del capítulo anterior, así que aquí esta. Por cierto falta muy poquito para saugracia. 😍😍😍 mis chiquitos bebés. 😂😂

Capítulo 4.5:

Saul Aguirre:

-No puede ser para pedir un recate porque ya lo hubieran hecho. -comento y Lopecito me da la razón.

-Es cierto, lo que dice Saul. Lo primero que hacen en un secuestro por dinero es pedir un recate. -afirma Valeria, mientras nos mira a todos. Estamos en mi casa. Regina permanece con los ojos llorosos, mientras Mónica la consuela y mi madre le trae un té. Mas ella lo rechaza.

Escuchamos tocar en la puerta con desespero y voy a abrir.

Cuando lo hago me encuentro con una asustada Isabela, que entra dando traspies y se acerca hasta su madre.

-¡Mamá! -la llama y Regina voltea a verla, poniendose de pie rapidamente. Isabela llora y se lanza a sus brazos temblando. Regina también rompe en llantos.

-¿Isa que haces aquí? ¿Como llegaste? -pregunta Valeria e Isabela respira varias veces para tranquilizarse.

-Me dejaron libre. -nos informa y rapidamente Regina comienza a mirarla y a checarla a ver si esta lastimada.

-¿Te hiciero algo? -pregunta su madre y ella niega. Al mismo tiempo que continua temblando. Mónica la lleva hasta el sofá y le pide que se siente y así lo hace, mientras Regina se sienta a su lado para abrazarla y Mónica sostiene sus manos.

-¿Como así que te dejaron ir? -cuestiona Lopecito

-Simplemente me trajeron hasta la casa y me soltaron, tenía los ojos vendados. Me dijeron que no me quitara las vendas hasta que se fueran o me matarían. -sollozo y a recosto su cabeza en hombro de su madre.

¿Esto no tiene sentido? ¿Por qué la dejarían ir sin pedir nada a cambio?

Veo a Regina tomar su celular y marcar un numero. Un par de segundos después habla.

-¿Altagracia?, Isabela apareció, esta viva.

-¿Altagracia? ¿Mi tía? -cuestiona la jovén levantando la cabeza para mirarla y Regina asiente.

-Si, mi amor. Tu tía esta viva, regreso cuando se entero que estabas desaparecida. -Regina seco sus lágrimas.

-¿Pero como? -pregunta

-Eso solo lo sabe ella, ya nos lo contará...

*****

Media hora después todos continuamos aquí buscando alguna respuesta a ese secuestro cuando tocan a la puerta. Como todos continuan ocupados yo voy a abrir de nuevo. Apenas lo hago me encuentro con Altagracia. La miro a los ojos y no puedo evitar perderme en ellos. Esta tan hermosa como siempre. Ella me dirigi una ultima mirada y me pasa por el lado. Yo la sigo mientras la veo acercarse a su hermana y su sobrina.

-Isabela -la llama y ella voltea a verla, se separa de Regina y corre a abrazarla mientras solloza en su hombro. Ella acaricia su cabello y cierra los ojos. La veo llorar.

Más allá de La DoñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora