Más allá de La Doña

Capítulo 16

Y bueno aquí otro capítulo, ya se que esta vez si me tarde unas horitas de más en actualizar y lo siento. De verdad... Y bueno como siempre no puede faltar mi agradecimiento hacía ustedes y mi cariño por tantos y tan bellos mensajes. Ya comienzo hasta a creerme eso de que soy buena... 😂😂 y miren que nunca lo he creido, pero no importa me hacen felices y motivan a seguir. Los amo. ❤

Otra cosa... Espero que después de este capítulo no me maten. 🙈🙈 y también espero sus comentarios para conocer sus reacciones y que creen que pasara... Ahora si, bye. 😘

En twitter: @ReinaLuceroHL

Capítulo 16:

Altagracia Sandoval:

Siento a Saul acariciar mi espalda y  suspiro. Se siente también esta paz. Hacía mucho que no me sentía así, mejor dicho nunca me he sentido así. Decido ignorar la vuelta de mis pensamientos y me acomodo más sobre el pecho de Saul al mismo tiempo que el continua pasando sus uñas por mi espalda.

Mi telefono suena y dude en contestar, mas continuó sonando. Resoplo y tomo asiento en la cama, no me preocupo en cubrirme.

Siento la mirada de Saul mientras camino y eso me hace reír. Me acerco a mi bolso y mientras tanteo en el para encontrar mi movíl volteo a ver a Saul y sonrio.

Encuentro el telefono y miro la pantalla del celular, numero desconocido. Frunzo el ceño, no cualquiera tiene mi numero privado.

-¿Bueno?

-¡Mamá! -escucho el grito desgarrador de Mónica y mi corazón se paraliza. -¡Mamá! -luego escucho una risilla y el grito se detiene.

-Altagracia, amor mio...

-Trigve -susurro ansiosa.

-Ese mismo, mi tesoro. ¿Adivina qué? -cuestionó con ironía. -Tengo a tu presiosa hija conmigo. -lo escucho reír y el miedo se apodera de mi. Siento a Saul abrazarme y me sobresalto. -Hagamos algo... -se queda en silencio y escucho el grito desgarrador de Mónica, cierro los ojos y procuro tranquilizarme. -¿Qué parece si vienes por ella? Pero tienes que venir sola, mira que te conozco; no se te ocurra traer a mi gran amigo Matamoros o a cualquiera de tus guarda espaldas o entonces si, no veras nunca más a tu niñita. Aunque pensandolo bien si no vienes, mucho mejor para mi, tengo un grupo de clientes interesados en ella. -murmura y su risa me paraliza.

-No -trague en seco para deshacer el nudo de mi garganta. Las lágrimas se acumulan en mis ojos y parpadeo para espantarlas. -No hagas nada...

-Bien, pero entonces ya sabes que tienes que hacer. ¿De acuerdo? -cuestiona con tono firme y yo asiento, pero luego me acuerdo que él no me ve por lo que respiro profundo y contesto.

-De acuerdo.

-Perfecto -lo escucho sonreir. -Te enviare la dirección por mensaje. Ya sabes, sola. -me recalca la última palabra. - ¿Mónica quieres decirle algo a tu madre? -cuestiona y escucho otro grito de parte de ella. Para luego colgar.

-¿Pasa algo? - me pregunta Saul besando mi mejilla, yo niego y sin mirarlo a los ojos beso castamente sus labios.

-Solo problemas con la empresa. -digo y pasandole por el lado me voy a vestir.

*****

-¿Estas segura que no quieres que te acompañe? -me pregunta Saul deteniendome a penas llego a la puerta. Miro nuestras manos unidas y tengo que hacer uso de toda mi fuerza para no verme nerviosa o ansiosa.