Capítulo 12

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Mónica Hernandez:

-¿Entonces tu madre tiene una hija de tu esposo? -me pregunta por segunda vez el desconocido que ya no es tan desconocido resulto llamarse Alan y es psicológo. Yo asiento, mientras me llevo otra cucharada de mi tercer trozo de tarta y segundo café de la noche. -Increible. -suspira con sorpresa y yo enarco una ceja.

-¿No se supone que eres sicologo? Deberías estar acostumbrado a todas estas locuras. -cuestione, mas el simplemente solto el aire.

-Si, pero ninguna donde madre hija se acuestan con el mismo hombre, la madre se embaraza, desaparece en el mar y la hija se casa con el hombre que las dos aman, pero ahora resulta que él no ama a la hija si no a la madre y que no se sabe si alguna vez lo hizo. -contesta y yo asiento con lentitud.

-Dicho así suena mal y alocado.

-Es que es algo malo y alocado. -dice con obviedad y yo suspiro.

-Sinceridad te dicen ¿eh? -le digo dejando caer la cuchara y mirandolo.

-Mira la cosa esta así... Esta claro que las dos fueron victimas del destino y sus jugaretas. Tu madre quien era una mujer sentimentalmente destruida y acabada se enamoro del primer hombre que le demostro que no todos son unas bestias y tu; una niña que siempre se sintio completamente sola y repudiada por su madre quien la abandono al nacer. Fue criada sola por un hombre totalmente enfermo y que siempre tuvo que trabajar y dar el máximo para cuidarlo. Se enamoro del primer hombre que le ofreció un mundo distinto, un mundo lleno de protección y amor. Mas ahora que has visto que él no te ama como pensabas y puedes ser feliz sin él y protejerte sola, buscas cualquier excusa para estar peleada con el destino... Y con tu madre. -me dice y cuando termina lo veo arrecostarse hacia atras como si hubiera resuelto un gran acertijo.

-Yo amo a Saul, llevo meses buscando tener un hijo de él y ahora resulta que mi madre le dió una hija. -digo molesta y el asiente.

-Y aquí es donde estoy buscando la culpa que dices que tu madre tiene... -dice y no logro identificar si lo dice en burla o realmente. -Si, tuvieron una hija, pero según lo que me cuentas no es como si lo hubieran planeado. Además después de todo la que se caso con él sabiendo que había tenido una relación con tu madre fuiste tu. -Al menos tu madre nunca supo nada hasta mucho después y trato de romper cualquier lazo, en cambio tu, tu continuaste con esa relación. No solo eso te negaste a acercarte a ella por miedo a sentirte culpable por quitarle a su gran amor y no fue hasta que la viste con la vida en riesgo y sola que decidiste perdonarla. -lo miro ofendida y me pongo de pie.

-No quiero seguir con esto. -le digo dirigiendole una última mirada antes de salirme de la mesa.

-Si te ofendes es porque es verdad. -me comenta con tranquilidad y yo lo fulmino con la mirada para luego salir furiosa del lugar. Mas su voz me detiene al llegar a la puerta.

-¡Tu lo que debes hacer es buscar una conversación con tu madre, sin él, sin nadie. Donde puedan hablar y aclarar sus ideas! - me grita y yo niego para luego salir furiosa. ¡Lo que me faltaba perder mi tiempo con un imbecil". Resoplo... y dirijo una mirada hacia el cielo, la luna ilumina en lo alto y las estrellas hoy parecen millones de diamantes dispuestos a iluminar mi camino.

*****

Saul Aguirre:

-Extrañe tanto tenerte así. -digo entre supiros y la apego más a mi al mismo tiempo que me divierto pasando mis uñas por su espalda. La escucho suspirar y acomodarse más sobre mi pecho. -¿Sucede algo? Te veo muy callada. Es por ese imbecil ¿verdad? -no puedo evitar escupir toda mi rabia y mi coraje. Ella levanto la cabeza y me miro.

Más allá de La DoñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora