-Esto me duele más a mi que a ti, aunque no lo creas, yo no quería llegar hasta tal punto pero es que no vi otra solución.
-...
-¿Ahora no hablas? CAMILA JODER! Estoy hasta los cojones de tener este papel de malo pero es que no me das otra alternativa. Además, ¿Qué te creías? ¿Qué iba a estar esperando toda la vida? Somos novios y por lo tanto eres mía y vamos a follar te guste o no.
-Quiero estar sola
- Estate tranquila, yo ya me voy pero mañana no hagas planes porque tienes que ir a ver como juego, es la gran final, vamos a machacar a los inválidos del año pasado, no sé cómo aún tienen esperanzas de ganar viendo los últimos resultados. Y también quiero que te vean mis amigos porque piensan que me he inventado lo de que tengo una novia y te tendrás que lucir, así que ponte guapa. Venga me voy, ah... y acuérdate de maquillarte para que no se te vea la picadura.
-¿Picadura? Querrás decir golpe...
-Camilita esos detalles mejor guardarlos porque ya sabes que mi paciencia tiene un límite y no querrás tener otra "picadura".
En el momento que Justin se fue del apartamento, Camila se quedó enrollada en las sábanas llorando, llorando hasta que sus ojos dijeron basta y decidió darse una ducha porque no podía conciliar el sueño ya que todo su cuerpo olía a Justin y eso la perturbada. Quería quitarse toda señal que indicase que pasó esa noche con aquel chico al que no quería, del que se fue enamorando poco a poco, ese chico que no era tan perfecto como todos creían. Tras aquella larga ducha, Camila se puso un pijama y se dispuso a quitar las sábanas para luego meterlas en una bolsa de basura. Después de eso, cuando ya no tenía esa sensación de que aquel chico estuvo allí, durmió en el simple colchón sin ningún tipo de manta.
Aquella mañana, Camila se había despertado por un fuerte dolor en su pómulo. Cansada, se levantó para ir al baño y mirarse en el espejo y si, su pómulo estaba de un color púrpura y bastante hinchado. Ya estaba acostumbrada al desprecio de su novio pero nunca había llegado tan lejos, igual fue el alcohol que había tomado antes de pasarse por el apartamento de Camila o las ganas de contarle a sus "amigotes" como era en la cama la tímida camarera de aquel club donde se habían conocido.
La dulce chica de apenas 20 años ya no podía más, en muchas ocasiones había pensado en escapar, dejarlo todo y comenzar de cero pero luego era consciente de que el atractivo chico de cabello moreno de ojos claros la encontraría teniendo en cuenta que su padre, el señor Foley era un importante hombre de negocios y con contactos en el gobierno por lo que encontrarme para ellos sería "coser y cantar". Y por esa razón, otras muchas veces pensó en quitarse de en medio, desaparecer y no volver pero sería incapaz de dejar a su hermana Sofi de apenas 10 años sola en el mundo ya que sus padres hace 1 año habían tenido un accidente de coche y habían muerto, algo que trastocó a las hermanas.
Debido a esto a la morena no le quedó más remedio que buscar un trabajo en un club nocturno que compaginaba con sus estudios de medicina, aunque últimamente los había dejado de lado porque no tenía tiempo, y ya ni hablemos de sus clases de piano, la cuáles Justin consideraba una pérdida de tiempo. Cuando salía de la Universidad recogía a su hermana, hacía la comida, las tareas de casa, estudiaba algo e incluso ayudaba a Sofi con tareas del colegio, incluso en las lenguas, a pesar de que Camila las odiaba y prefería las ciencias.
Cuando se quiso dar cuenta ya era tarde y si no se daba prisa llegaría tarde al partido de su novio por lo que se maquilló lo mejor que pudo, se puso unos vaqueros y una sudadera, se llevó algo para comer por el camino y puso en marcha su coche camino al estadio de fútbol.
Tras un buen rato buscando sitio para aparcar, buscó un asiento libre entre las gradas y cuando se sentó, saludó a su novio con cierta desgana, levantando ligeramente la cabeza. Él estaba preparándose junto a sus compañeros de juego. En breves comenzaría el partido y desde el momento que el árbitro hizo sonar su silbato, la vida de Camila cambiaría.
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Crying in the club (CAMREN ESPAÑOL)
FanfictionY me vi sola, llorando entre las cuatro paredes del baño de aquel club. Con su canción favorita de fondo golpeando mi cabeza y haciendo que me arrepintiese aún más de la decisión producto de mi miedo. Definitivamente, acababa de dejar marchar a la p...